DEMENTE

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Toma mi mano
Yo tomaré tu sangre.

Cede tu cuerpo ante mí,
pues aunque no lo hagas, serás mía.

Beberé tu sangre,
como a el más puro clavel.

Tocaré tu piel,
con la más grande limitación.

Cegaré tus ojos,
para que no puedas ver mis verdaderas intensiones, y solo así entonces, amada serás...

Caminaba por los pasillos de mi nuevo colegio, y por si fuera poco, es nocturno, ¿Quien diablos va a clases de 7 pm a 1 am? Bueno, durante esos días la respuesta no la hubiera encontrado.

Me dirigía a mi siguiente clase, cuando vi un osito con un parche, sentado en una especie de mesa, donde había un teléfono.

Siempre me gustaron los peluches, y ese me pareció adorable.

Así que sin pensar en nada más, lo tomé y lo miré por unos segundos, cuando una mano me lo arrebató.

Al subir mi mirada, me encontré con un chico de Cabello lila, tenía al osito en brazos.
Estaba furioso, y parecía odiarme.
-¿Porqué tocas a Teddy Como si lo conocieras?!! -me miró.
-Yo soy su único amigo, el no necesita a nadie más!!

Yo solo lo miré sorprendida y asustada.

-Yo lo siento...
-No lo digas!! No digas lo siento -continuó gritándome -porque en realidad, tu no sientes nada!! Estúpida!!

Las lágrimas comenzaban a salir, estaba a punto de irme corriendo, cuando el chico me detuvo tomándome de la muñeca, su mano estaba helada, y su agarre era fuerte, y doloroso.
-Basta -sollozé.

-No, me las pagaras -se acercó a mí.

-Pero, antes de tu castigo ¿Cual es tu nombre?

-(....)

-Lindo, pero no lo necesitaras -me miró, ahora que lo veía, tenía ojeras, aunque la verdad era muy lindo.

-¿De que hablas?

El chico, me tomó fuertemente de las muñecas, ¿Qué diablos va a hacerme?

Y luego sentí un dolor agudo, era insoportable, sentía como succionaba, y succionaba. No tenía idea de lo que estaba pasando. Y poco a poco, iba debilitándome, mis piernas, no respondían. Y mis ojos se cerraban.

Cuando desperté, lo primero que vi fue al chico de antes. Sentado frente a mi en el suelo.

 Sentado frente a mi en el suelo

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-¿Que hago aquí? ¿Qué me harás?

-(...) yo no pienso hacerte nada que no quieras.

Se acercó a mi, y me ayudo a levantarme, ya no estábamos en la escuela, si no en una habitación. Mis sentidos se pusieron alerta cuando, cuidadosamente me recostó en la cama. Se colocó encima mío, podía sentir el calor en mis mejillas, su rostro se mantenía en calma.

Me quitó la cinta del uniforme y miró mi cuello unos segundos.

-Hueles, tan delicioso...

Desabotonó la blusa, provocando que parte de mi brasier se viera.
Kanato sonrió.

-¿Que me harás? Ni siquiera te conozco...

-Soy Kanato, pero eso no importa, solo dejame tomarte, se mía...

-No... no quiero!! -grité intentando separarme de el, sin embargo, cuando estaba por bajarme de la cama, me tomó de las caderas fuertemente, colocándome de nuevo en mi lugar.

Las lágrimas descendían.

-Basta! Deja de ser tan tonta, es obvio que no escaparas de mí!! -me gritó psicópata y furiosamente.

Intenté correr de nuevo, pero cuando pise el suelo de madera, tropecé, pues mis piernas estaban débiles aún.

Kanato comenzó a reírse fuertemente, burlándose de mi desgracia.
Estaba triste, sonrojada y con lágrimas en las mejillas.

Su carcajada diabólica y burlona, me decía que era una tonta, que debería estar avergonzada solo por el hecho de ser yo.

-Puedes gritar, puedes llorar patéticamente, puedes intentar luchar, o puedes venir aquí y darme lo que quiero -dijó el chico, con una mirada mas clamada ésta vez.

Me cogió de la mano, y me sentó en la cama.

-Te tratare tan bien, como nadie mas lo hará (...) -me sonrió, un destello de lujuria, atravesó sus orbes lilas.
Una diminuta chispa de esperanza, se coló bajó mis ojos, esperaba que no me hiciera tanto daño.

-Kanato...

-Shhh -me calló, y comenzó a besarme. Desesperadamente, mi corazón latía fuertemente.

Se colocó a horcajadas encima de mí, y continuó besándome para después besar mi cuello.

-Eres mía -susurró, como si se tratara de un profundo secreto.

Ese fue el comienzo de nuestro loco romance. Ese fue el comienzo de nuestra historia.

THE END

Bloody Mad Love + kanatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora