Capítulo 11: 25/feb/2016

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Estaba destrozada, tenía cuatro días que no hablaba con nadie aparte de mi madre. Alicia ya no estaba en mi mente, la última vez que había hablado con Betty me enojé mucho con ella y desde ahí no habíamos hablado más, no había otra persona en la escuela que me pudiera poner atención aparte de Bill y Daniel, pero a ellos no les podía hablar como mis amigos sólo porque les regalaba mi comida. Llevaba más de 2 días sin meterme algo más que agua o hielo, y me sentía fatal de muchas maneras excepto de una; había perdido más peso aunque todavía me sentía gorda a comparación de demasiadas personas que me rodeaban, por ejemplo, Betty. Me encontraba acostada en mi cama con un dolor de cabeza horrible pensando en todo lo que me estaba sucediendo hasta que me levanté al baño y cerré la puerta con seguro. Me quité toda la ropa para poder ver toda la porquería que me sentía y comencé a llorar. Me veía directamente a los ojos y comencé a recorrer mi mano desde mi cabeza hasta mis piernas. Me acerqué al espejo sin miedo a que alguien pudiera mirarme, porque mi madre estaba trabajando, y pasé mi mano sobre mi rostro. Mi piel estaba llena de manchitas cafés pero lo único que podía ver eran mis ojos grandes y brillantes ,a causa de las lágrimas, que me recordaban mucho a Betty. Después rocé mi mano sobre mis hombros, sobre un brazo, sobre mi abdomen, sobre mí. Mis lágrimas resbalaban por mi mejillas como mi mano sobre mi cuerpo desnudo. Lo único que podía pensar es en "Soy obesa" "Mi cuerpo es horrible" "Soy horrible" "Estoy gorda, estoy gorda, estoy gorda, ¡ESTOY GORDA!".

No me gustaba ver mi cuerpo así, yo quería ser delgada como las modelos, como Alicia, como Betty. Busqué en los cajones de mi baño y en las puertas del mueble y encontré un cutter (Lo había puesto ahí porque siempre había creído que alguien pudiese meterse a la casa, así yo podría esconderme en el baño y defenderme con el cutter). Lo tomé y lo vi con felicidad, me sentía feliz porque por fin podría darme lo que me merecía y castigarme por ser yo.  Pasé la hoja del cutter sobre mis muñecas y sobre mis piernas, sobre mi cuerpo como hacia un rato lo estaban haciendo mis manos. Mi cuerpo estaba sangrando y en ese momento me desmayé.

Mi cuerpo y yo.Where stories live. Discover now