Bella Traición ••Roman Reigns••

11- Más que amigos

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deanxroman

El moreno colocó su mano sobre las de la castaña, queriendo que está se sintiera cómoda junto a él, te estas portando como una estúpida, resonó la fastidiosa voz en su cabeza, cerro los ojos tratando de evitar esa inseguridad que la hacia actuar como tonta.

- Debes creer que soy una estúpida - Suspiro esforzándose por no dejar caer ni una sola lágrima de las que empezaban amenazar en querer salir.

- Yo no creo eso - Apretó su agarre en la mano de la castaña levantándola y depositando un corto beso en ella.

- Los únicos dos novios que tuve terminaron conmigo, según dicen por aburrida - Trago el nudo formado en su garganta - Y estoy segura que no vas a querer hablarme nunca más después de hoy - Cerro sus ojos - Te juro que jamas en mi vida había actuado tan tonta como hoy - Hizo una pausa para después mirar al moreno el cual mantenía su mirada fija en la carretera pero iba atento ante sus palabras - No puedo evitar estar nerviosa.

- Para que yo me aleje de ti, se necesita mucho más que eso - Aparcó el coche para luego mirarle - Me gustas demasiado como para no adorarte aún con todas esas pequeñas cosas, que me encantan por que me hacen sentir que no te soy indiferente - Tomó su barbilla girando su rostro para que lo mirada, provocando que se formará una sonrisa tímida en los labios de Camila.

- Pero que hermoso - Chillo Dayana al fondo de la camioneta provocando que el moreno y la castaña se sonrojaran.

- Si seras imbécil - Dio un pequeño empujón Dean a la morena - Arruinaste el momento - Ambos chicos empezaron a reír al notar la cara del moreno y la castaña, era evidente que estaban apenados ante la situación y no tendrían por que ya que eran sus amigos.

- PERO SI YA LLEGAMOS - Grito Dean observando el lugar.

- Por las barbas de santa, el viejo panzón de la navidad, no me digas que comeremos aquí - La morena abrió sus ojos y boca como plato al notar lo hermoso y lujoso que era el lugar.

- No podemos comer aquí -  Camila se giro de prisa tomando el brazo del moreno para que este no bajara.

- ¿Que sucede ? - Frunció su ceño.

- ¿Ya viste la clase de chicas que somos? - Se señalo así misma - No somos del tipo de chicas para estar con gente de clase, que es seguramente la que esta ahí, y no voy a buscar yo misma la humillación de alguien.

- Escucha primor - Dean tomo su barbilla girándola hacia él - Cuando se quiere de verdad la clase social es lo que menos importa, además muchos de los que están ahí son unos jodidos puercos - Escupió al suelo saliendo de la camioneta.

- A la mierda todo - Se bajo la morena - Yo si quiero comer con los ricos - Estalló en carcajadas.

El moreno bajo del coche dando la vuelta de este para luego abrir la puerta, estirando su mano para que la delgada la tomara, ella lo miro a los ojos encontrando en esas bellas esmeraldas la seguridad que necesitaba, terminaron de bajar del coche para luego entrar al lugar. Al principio ambas chicas se extrañaron al notar que los chicos las entraron casi corriendo al lugar y el castaño casi ahorca al mesero cuando llamo Roman al moreno, y al notar que su mesa estaba hasta el fondo del lugar y ellos se habían sentado dando la espalda al resto de las mesas. Uno de los costados de la mesa topaba a la pared y el otro costado estaba justo a la par de una enorme planta, en el fondo sentían que algo era extraño pero luego se concentraron en creer que tal vez eso era normal en las personas de dinero y tal ves esa mesa era la única reservación que habían encontrado.