JUNTOS. ¿PARA SIEMPRE? ( goku x vegeta)

Capítulo veintitrés.

La puerta se abre de pronto, estoy de espalda a ella y no puedo ver quién es. Lo más probable es que sea goku, espero que sea él...

Alguien ha entrado, eso es más que seguro, pero hay algo que me inquieta. Fedrick no parece estar enterado de esa nueva presencia que ahora nos acompaña.

Giré mi rostro por toda la sala buscando a esa persona. De nuevo respiré cuando vi a mi novio. Él estaba parado detrás del sofá, totalmente petrificado y pálido. Me sentí mal por él. Me arrepentí de haberlo llamado.
No pude sostener por más tiempo mi mirada con la suya.
Cerré mis parpados con fuerza, no quería saber nada más de este mundo pero esas manos en mi cuerpo lo hacían bastante complicado. Creí ser la escoria más repugnante del mundo.

Al tener mis ojos cerrados no podía darme cuenta de muchas cosas, pero estaba seguro que ahora, con goku aquí, estaría bien.

Mis ojos no pudieron soportar el dolor que sentía ni alma y lágrimas amargas salían de ellos.

Mis parpados se separaron de inmediato al darme cuenta de que intentaba quitar mi pantalón.
En mi no quedó alguna esperanza cuando no vi a goku, sólo había terror y lágrimas de frustración, tristeza y repugnancia.

¿Por qué se fue?...

La interrogante resonaba en mi cabeza sin permitirme pensar con claridad.

De pronto sus manos sujetan mi cadera y en un movimiento brusco mi cuerpo estaba
boca-abajo.
Me retorcía intentando en vano escapar de él.
Mis muñecas fueron apresadas arriba de mi cabeza con sólo una de sus manos. La otra la dirigió a mis glúteos cubiertos sólo por un boxer.
¡No me gustaba lo que hacía! ¡Comenzó a dar palmadas bastante fuertes!

El dolor físico que provocaban sus golpes no podía siquiera ser una milésima parte del dolor de mi alma ¡mi pobre alma estaba destruida!

-eres muy malo y tengo que darte una lección...... Niño malo...-fueron algunas de las frases que él repitió, bueno, fueron las que escuché.

Luego ya no tengo tan claro lo que sucedió...
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Ya no me encontraba en este mundo. Ya no sentía dolor. Solo un enorme vacío...

Volví a la terrible realidad que me azotaba. No fue por voluntad propia. Un ruido... Gritos... Discusiones... ¡¡GOKU!!. ¡¡ES ÉL!!

No veo con claridad pero sé que es él, está peleando contra fedrick, lo hace por mi.
Sin duda soy un completo estúpido. ¿Cómo pude llegar a creer que goku me abandonó?

Tallé mis ojos con mis manos para poder ver mejor. Una vez que lo logré, bajé de inmediato del sillón y me puse mi pantalón lo más rápido que me fue posible.

Me quedé parado en medio de la sala, viendo lo que ocurría sin participar: goku tenía un sartén en su brazo derecho y golpeaba a "hombre". Fedrick no tenía nada en sus manos, aunque tenía una gran ventaja y era que su fuerza superaba a la de mi novio. No sé por cuanto pero era notable.

No podía dejar que lastimara a mi novio. Me acerqué a ellos y salté sobre "hombre", no era consciente ni de lo que estaba haciendo. Fedrick me aventó lejos y caí en el suelo. Me dolió mucho pero me alegre al ver que ayudé, aunque sea un poco, a goku.

...Un golpe más, aparentemente igual a los demás. Un hombre en el suelo. Goku gritando. Goku cargándome para luego salir por la puerta corriendo...
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-¡¡goku debemos irnos!!- exclamé a penas salí del trance.

Miré a mi alrededor y no estábamos en mi casa, sino en la calle y mi novio me cargaba. Mi rostro hasta hace unos momentos descansaba en su hombro.

Me sonrojé.

Recordé lo que pasó y abracé a goku con fuerza, sintiéndome seguro. Entonces bajé de él, porque quería caminar.

Me detuve.

-goku, él...

-no te preocupes, no está muerto.-respondió a mi pregunta y no tuve la necesidad de completarla.

Minutos de silencio nos rodearon.

-lo lamento.-sé dusculpó y no sé por qué, él no ha hecho nada malo.

-¿por qué?

-por...porque lo que pasó...fue mi culpa.-dijo en un susurro triste.

No respondí, lo abracé y creo que un abrazo es mejor que las palabras, así sean de una respetable enciclopedia.

Caminamos con nuestras manos juntas y mi cabeza en su hombro.
Era más que obvio que nos dirigimos a su casa.
Quería llorar, pero no delante de goku, no quiero que se sienta mal.

Caminábamos aún tranquilos hasta que un grito nos saca de contexto.

-MOCOSOS!!

No puede ser, es él, es fedrick. Miré a goku y ambos salimos corriendo con rapidez. Mi novio va adelante porque tiene una mejor condición física que yo y aún sin soltar nuestras manos.
Él es quién me guía y puedo darme cuenta de que no vamos a su casa. Goku es muy inteligente al no ir directo a su casa hasta perder de vista a fedrick, pues sí él se entera de donde vive goku, estaremos perdidos.

Corrimos por las calles y algunas personas nos miraban extraño.
Yo estaba jadeando, no podía más. Mi novio, enterado de mi falta de condición física, sé detiene frente a un centro comercial. Revisa que fedrick no esté cerca y pueda vernos. Luego entramos.
Caminamos por los pasillos repletos de personas. No lo pude evitar y bajé mi cabeza. Quería aparentar ser fuerte y, como era de esperarse, fallé.

Goku aún me dirigía y de pronto llegamos al baño. Me abrazó y sentí que algo en mi sé esparcía por el interior de mi cuerpo.
Entonces me levantó del suelo para sentarme en un lavamanos. No tenía el valor suficiente para verlo a los ojos.
Su dedo índice levantó mi barbilla, obligándome a hacer contacto visual. Él sonríe y yo sonrío.
Él me besa y me siento dichoso.