JUNTOS. ¿PARA SIEMPRE? ( goku x vegeta)

Capítulo veintidós.

Caminamos en silencio, los nervios no me abandonaron en ninguna parte del camino. Sé que ir con él es una pésima idea pero nada puedo hacer contra goku.
Quizá el resultado de esta visita sea favorable y deje de temer de "hombre". O tal vez mis sospechas se confirmen y termine en un completo caos.

+++++

Estábamos frente a mi casa, mis manos no paraban de temblar, tenía miedo y mucho.

Me quedé paralizado en la puerta y mi novio sólo me observaba esperando que saliera del trance para entrar.

Cuando me recuperé lo miré.

-tranquilo, ya sabes el plan, gritar fuerte sí tienes problemas. Todo va a estar bien...-alentó mientras me regalaba una sonrisa que me transmitió seguridad.

Comencé a acercarme más a la puerta, tomé mis llaves y un segundo antes de abrirla volteó a verlo una última vez antes de entrar...

NARRA GOKU.

No me gusta que vegeta haga cosas que no quiere y que teme, pero esto en verdad considero que es necesario que lo haga solo.
Espero no equivocarme, no quiero lastimar a mi novio.
Estoy afuera de su casa, muy cerca de la puerta para escuchar mejor, hasta ahora sólo escucho sus voces, parece que platican y sé que todo está bien porque no escucho gritos.

NARRA VEGETA.

Entré a la sala caminando despacio, aún tenía miedo.

Lo vi sentado en un sillón, ni siquiera disimuló un poco su mirada de asombro.
Ninguno hablaba, había un espeso silencio que me resultó terriblemente incómodo.
Por un momento pensé en salir, pero desistí porque no quería seguir siendo un cobarde.

-así que regresaste... Ya lo suponía...-insinuó levantándose para acercarse a mi.

-quiero...e-empezar bi-bien con-contigo.-intenté sonar decidido, claro que no lo conseguí.

-bien, empecemos bien.- dijo con una sonrisa sumamente repugnante.-mi nombre es
fedrick.-se presentó extendiendo su mano derecha. Le recibí el saludo a la vez que decía mi nombre.

Me hizo señas para sentarme en él sillón junto a él. Lo hice un poco dudoso.

Estaba a su lado, él me miraba demasiado y yo no podía hacer lo mismo, estaba muy incómodo.

-¿te gusta la escuela?-preguntó para romper el hielo.

-no tanto.-respondí sin tartamudear aunque en un susurro.

Siguió haciendo un par de preguntas similares hasta que de nuevo todo estuvo en silencio, ya no era tan incómodo pero seguía siéndolo.

Jugaba con mis manos, un claro acto de nerviosismo.

Despacio levanté la mirada para verlo a él con sus ojos clavados en mi. Si es que fue posible me sentí más nervioso y bajé la cabeza.
Una de sus manos acarició mi espalda, no pude evitar que mi cuerpo se tensara.
Sus dedos recorrían por completo mi espalda y estuve a punto de salir corriendo cuando acarició mi cuello y cabello.
Tenía la cabeza agachada hasta que él, con su otra mano, levantó mi rostro para que nos viéramos fijamente.

Estaba viendo sus ojos intentando ver el reflejo de lo que fedrick era.

Salí de mi mundo de tontería con total asombro y espanto...
Sentí como era abrazado y levantado de mi asiento. ¡¿qué es lo que le pasa?! ¡¿qué hace?!
¡El terror me recorría, tanto que me dejó mudo! Sólo estaba seguro de que algo malo pasaría.

¡Me encontraba debajo de ese hombre!

Su rostro estaba cerca del mio, nuestras respiraciones se hacían una y era horrible.
No pude mantener más la cordura cuando una de sus manos aprisionó ambas de mis muñecas arriba de mi cabeza.
¡El terror se apoderó de mi por completo! ¡Olvidé en ese momento que goku podía ayudarme!

La mano libre de fedrick bajó con desesperación a mi cadera y desde ahí se deslizó por debajo de mi camisa. Mi piel se erizaba ante su contacto por mera repulsión.

Aún estaba mudo. Su mano llegó a mi pecho. Pellizcó uno de mis pezones y eso fue todo lo que necesité para salir del trance en que me encontraba y comencé a moverme desperado para que dejara de tocarme. De pronto recordé a goku, aunque dudaba en llamarlo ¿él podría ayudarme? ¿lo meteré en problemas?
No quería que algo malo le pasara a mi novio, por eso no quería llamarlo.
Aún seguía moviéndome desperado pero esto cesó cuando sentí una pierna entre las mías.
Dejé de moverme porque al hacerlo esa pierna intrusa causaba sensaciones que no quiero sentir con fedrick.

Ya no sentía más que repulsión por ese hombre y miedo.

-¡¡¡AYUDA!!!- cuando su mano dejó de tocar mi pecho para bajar a mi entrepierna grité lo más fuerte que pude, pues sabía que sólo tendría una oportunidad de gritar.

Ante mi grito fedrick tapó mi boca con una venda que misteriosamente estaba en el  suelo.

La puerta se abre de pronto, estoy de espalda a ella y no puedo ver quién es. Lo más probable es que sea goku, espero que sea él.