Me puse de pie siguiendo mi camino mientras me acercaba a un lugar en ese cementerio que se me hacía familiar, la tumba de mi familia.

Me detuve justo en frente de la tumba de ellos, me arrodille limpiando un poco el polvo que había encima de sus nombres, hacía años que no venía aquí quizás unos diez u once no estaba segura. No quería llorar simplemente contarles cosas y hablarles porque sentía que me escuchaban.

- Soilyn te echo mucho de menos, recuerdo como me protegías y lo hiciste hasta el último de tus días, a veces me acuerdo de ti y pienso en como de hermosa serías, antes decían que te parecías a nuestra madre pero ahora que miro luego de años tu foto puedo afirmar lo contrario, eres igual a nuestro padre.

- Papá ha pasado mucho tiempo, desde el día en el que se fueron de mi vida las cosas no fueron iguales nunca pude entender porque los asesinaron ¿Por qué tuve que quedarme sola? Nunca lo podré comprender los necesito y siempre los necesitaré- sonreí al mirar su foto con mi madre, se veía tan joven y apuesto.

Miré el rostro de mi madre impregnado en aquella imagen joven y hermosa tal cual como la recordaba- Mamá- dije en un hilo de voz- te necesito ¿Por qué me dejaste sola? ¿Por qué me abandonaste? Mi vida no pudo ser peor desde que te fuiste y sigue siéndolo ¡Estoy enamorada de mi secuestrador! Esto no podrá seguir por mucho tiempo soy consciente de ello pero no quiero que sea así, no quiero perderlo a él también cómo le perdí a ustedes- respiré profundo evitando que caiga una lágrima que amenaza mis ojos- Esto no es una despedida porque siempre estarán conmigo, siempre los llevaré dentro de mí.

Me paré nuevamente caminando a pasos lentos hacia donde dijo Suho que estaría, sentía que mi corta libertad estaba a punto de agotarse decidí mirar todo a mi alrededor gravando en mi memoria como lucía el cielo recién despejado y el sol cuando estaba amenazando en salir.

Miré cada uno de las sepulturas cuando noto a Suho sentado frente a una de ellas, me acerqué sin hacer mucho ruido escuchándolo vagamente su conversación mientras secaba sus lágrimas.

- No descansaré hasta encontrarte, sé que no estás muerta.- me acerqué más hacia él leyendo el nombre "Amy Park", él secó su última lágrima y se levantó de golpe mirándome sorprendido.

- ¿Estás aquí?

- ¿Quién es Amy?- pregunté curiosa, él me miró sorprendido y volteo a ver de nuevo la tumba- No importa vámonos- me indicó seriamente caminando en frente.

Subimos al auto en silencio pero mi cabeza me daba vueltas, estaba curiosa y desconfiada no podía negarlo quería saber quién era Amy.

- Suho- lo llamé.

- ¿Hmm?

- ¿No me dirás quién es Amy?- cuestioné nuevamente.

- T/n___ por favor no hagas más preguntas- me respondió y entonces me quede en silencio, dirigí mi vista hacia la ventanilla observando la poca movilización de las personas a esta hora de la madrugada- Es mi ex novia- soltó de pronto, voltee a mirarlo sorprendida y el continuaba manejando sin quitar la vista del camino, no se me ocurrió preguntar nada más, eso era suficiente información de un momento a otro no quería saber quién era Amy ni que le había sucedido.

Me volví a concentrar en el camino vacío y en cómo nos acercábamos de nuevo a mi cárcel. Bajamos del auto y entramos al edificio abandonado subiendo las escaleras que rechinaban con cada paso.

Me dirigí a mi habitación sumergida en mis pensamientos dudando de mi misma, tranque la puerta con llave y me senté en mi cama mirando la pared.

Soy la peor amiga de todas pensé

No podía quitar ese sentimiento de culpa que sentía, mi mejor amiga había sido brutalmente asesinada y yo estaba enamorada de mi secuestrador cómplice del crimen, estudié mi subconsciente y una vez más estaba siendo egoísta.

Secuestrada /Suho - ExoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora