Un Amor en Banca Rota

Hipoteca

-otro aviso del banco- Dice mi padre preocupado.

-Debemos decírselo a Annie, tarde o temprano se tiene que enterar-dice mi madre al borde de las lágrimas.

Mis padres están en la pequeña sala que tenemos, dándome la espada y están tan preocupados que ni siquiera se han dado cuenta de mi presencia.

-Mejor esperemos, trabajare día y noche si es necesario para poder pagar la deuda con el banco aún tenemos 2 meses, podremos pagar una parte de la deuda.- Mi padre siempre ha sido un hombre luchador, son estos momentos los que me hacen sentir la chica más dichosa del mundo por tener esta pequeña familia, con un padre que se juega la vida por mí, su única hija y por Carla, mi madre, aunque no somos ricos por lo menos tenemos comida en la meza. Y gracias a los esfuerzos de mi madre que es niñera y mi padre Ray exmilitar desde que yo tenía 2 años y desde entonces carpintero yo pude terminar la carrera de Literatura Inglesa, en la universidad Estatal en Portland, que aunque tenía beca y trabajaba ellos siempre me ayudaron con algunos objetos, como mi computador y mi escarabajo, mi Wanda.

-Está bien yo cuidare más pequeños o lavare ropa ajena si es necesario para poder ayudarte amor- mi madre abraza fuertemente a mi padre.

-¡Yo también quiero ayudar!- Intervengo en su plática.

-Annie- dicen los dos al unísono, totalmente sorprendidos.

-Porque no me habían dicho que habían hipotecado la casa- digo con un tono de voz acusatorio.

Ambos se miran entre sí, mi madre suelta unas lágrimas y mi padre baja la cabeza.

-Aquí voy a estar hasta que me lo digan- mi padre mira a mi madre y ella asiente.

-Annie, mi niña no quería que te enteraras porque sabía que ibas actuar asi, pero ya que lo sabes te lo tengo que decir todo, sabes que hace más o menos 3 años iba a poner una carpintería grande junto con un amigo en sociedad y después tu madre y yo te dijimos que mejor esperaríamos un tiempo para poder ahorrar más y no tener deudas.

-Si lo recuerdo todo, querías comprar un local que te había gustado mucho pero se salía del presupuestó de ambos, y que aprovecharían que tu socio se había ido con su familia a Londres y habían quedado en esperar hasta que el regresara, asi podrían ahorrar más.

-Asi es pequeña, ambos acordamos poner la misma cantidad de dinero, que obviamente teníamos en el banco, un día quedamos en ir a ver unos materiales y herramientas que necesitábamos, pero recuerdo que ese día iríamos tu madre y yo a visitarte a Portland, yo ciegamente confié en él y...- su voz se quiebra y sus ojos se humedecen.

-Y que papá- lo invito a seguir.

-No podía faltar a verte entonces, le di mi tarjeta de crédito para que sacara el dinero, cuando tu madre y yo regresamos a casa encontramos la tarjeta en la entrada, junto con una nota donde decía que me agradecía por el dinero que le regale que aunque no era mucho él lo iba a disfrutar- Mi madre se rompe a llorar y mi padre trata de calmarla, estoy en shock cómo es posible que ese hombre que se decía ser su amigo, su hermano le haya echo eso.

-Stephen Norton te.. hizo.. hizo eso- logro decir en un susurro, mis ojos pican por las lágrimas contenidas.

-Si pequeña, todo ese dinero era prácticamente todo lo que teníamos, los ahorros de toda la vida.

-Pero porque hipotecaron la casa- digo ahora si entre lágrimas.

-Porque un mes después ..de.. de eso tu padre...sufrió una parálisis en una de sus piernas debido a el estrés y las preocupaciones y se necesitaba un tratamiento de 6 meses, pero era muy costoso y por eso decidimos hipotecar la casa. Dice mi madre que había permanecido callada.

-Porque no me lo dijeron si sabían que yo estaba trabajando, podría haberles mandado algo de mis ahorros, podría haber vendido a Wanda!!- ahora estoy gritando.

-Porque cuando tú te fuiste y no quisiste que te enviáramos dinero cada mes porque querías trabajar quedamos en que el dinero de tu trabajo solo seria para ti- dice mi padre un poco alterado.

-Y porque ocultar lo de tu parálisis, por lo menos eso merecía saberlo- digo jalándome el cabello.

-Princesa no queríamos preocuparte, ni mucho menos distraerte de tus estudios- dice mi madre un poco más tranquila y abrazándome. No puedo creer que duré 3 años sin saber esto.

-Ahora que lo sé los voy ayudar, voy a buscar trabajo de lo que sea.

-No hija, de lo que sea no por eso tienes tu carrera.

-Si papá pero ya hace un mes que me gradué y sabes que mucho antes de eso envié solicitudes a las 4 editoriales que hay aquí en Seattle y solo me han hecho entrevistas de dos de ellas pero quedaron en llamarme hace 2 días si me contrataban, pero no eh tenido ninguna noticia, asi que desde mañana iré a buscar trabajo a donde sea.

-Porque no le preguntas a Kate si sabe de algún trabajo- Kate es mi única y verdadera amiga, la conocí en la universidad y con ella compartía el piso donde vivía, ella es periodista y también vive aquí en Seattle, trabaja desde hace una semana en un periódico y gracias a su padre que es dueño de Kavanag Media y su madre es diseñadora tiene buenos contactos, ellos me han tratado como parte de su familia y a mis padres también, su hermano mayor Ethan es Medico y lo quiero como un hermano mayor.

-Le preguntare mamá, pero aun asi buscare en otros lugares-

-Está bien pequeña, gracias por no juzgarnos- dice mi padre abrazándonos a mi mamá y a mí.

-No tengo porque si a ustedes le debo todo, verán que juntos saldremos adelante.

Como todos los días me levanto y me doy una refrescante ducha, hoy será un día agotador buscando trabajo, ayer le envié un mensaje a Kate antes de dormir preguntándole si sabía de algún empleo y me dijo que justo acababa de llegar de cenar de casa de sus suegros y el hermano de su novio Elliot, busca una asistente, al parecer él es dueño de su propia empresa GEH, he oído hablar un poco de él, es muy serio y solitario, pero muy bueno en su trabajo, su empresa es de telecomunicaciones, la mejor empresa del país. Kate me consiguió una entrevista hoy a las 3 de la tarde, al parecer la inquisidora Kavanag tiene el mismo efecto con todos porque 5 minutos de haberle mandado el mensaje me dijo sobre la entrevista, así es que antes de eso buscare empleo en otros lugares.

Salgo de la ducha y me pongo un conjunto de ropa interior blanco de encaje, que aunque costo muy barato es muy cómodo, me decido por un traje tipo ejecutiva negro, junto con una blusa blanca de manga larga y unos zapatos de tacón bajo negros, me dejo el pelo en hondas y salgo a desayunar junto a mis padres.

-Buenos días- digo con una sonrisa y dándole un beso a cada uno.

-Buenos días hija, te ves muy linda- me dice mi padre.

-Gracias papá, la verdad es que me parezco a mis padres- digo y los tres soltamos una carcajada.

-Qué bueno que bajaste princesa, tu padre hoy amaneció con mucha hambre y si no llegas a tiempo quizá no hubieses encontrado algo- dice mi madre y mi papá frunce su ceño como un niño pequeño.

Desayunamos entre risas y al final papá se va porque tiene mucho trabajo en la carpintería, le cuento a mamá lo de la entrevista que me consiguió Kate y ella se emociona mucho y me dice que está segura que lo conseguiré y ella me cuenta que hoy no tendrá que salir porque traerán a dos niños aquí para que los cuide, a ella siempre le han gustado los niños y disfruta cuidarlos, no entiendo porque no tuve más hermanos si a mi padre también le vuelven loco los niños.

-Mamá me tengo que ir, cuídate, te quiero- le digo dándole muchos besos que la hacen reír.

-Tú también mi niña.- dice y me braza fuerte.

Hola a tod@s, aquí les dejo el primer capitulo, como ya saben es mi primer historia publicada y quiero agradecerles a todas las que han comenzado a leerla en verdad muchas gracias y nos leemos pronto.

Besos y abrazos, su servidora, 

Claudia :)