My Angel *Dark Angel #2*

Happy?

Estamos a punto de partir, el Paradise aún está lejos de aquí y si seguimos perdiendo el tiempo perdemos probabilidades para encontrar a mi hermano sano y salvo.

-Vamos.- dice Dean, dándome la mano de pie al lado de Stella. Ella me sonríe.

-¿Cómo es que lo soportas?- le pregunto y ella se echa a reír.

-No somos tan diferentes.- comenta y luego salimos de la estación de combustible para caminar hacia las camionetas.

Mis piernas y todo el grupo están preparándose para estar entumecidos durante un buen rato dentro de los vehículos.

Subimos y luego de unos minutos nos ponemos en marcha.

Daryl ha intentado hablarme pero entre su niña rubia y mi preocupación por Wren no ha sido posible.

-¿Ley del hielo?- pregunta John. Él mejor que nadie sabe que no quiero hablar. -Hija, no niego que tengo ganas de golpearlo pero no desperdicies el tiempo que tienes.- hace una pausa. -Nunca es bueno dejar todo para mañana.- ruedo los ojos.

-John, no es momento para un sermón.- Justin se gira y alza una ceja, con una sonrisa burlona en el rostro.

-Ya regañaron a Krista.- dice divertido. Al mirar a John su sonrisa se borra poco a poco, porque aún sigue un tanto molesto con él.

John suspira aún frustrado porque no se pueden reconciliar; mi hermano es estúpido.

-Tranquilo, ya se le va a pasar su berrinche.- hago una pausa. -Además, me tienes a mi y a Tobias ¿no?- él asiente lentamente.

Justin es un poco idiota a veces pero al final es mi hermano.

Familia es familia.

●●

Han sido horas metidos en las camionetas pero al menos estamos medio día más cerca del Paradise.

No puedo dejar de pensar que Wren podría estar solo frente a Charles, con él nunca sabes que pasará.

-¿Les parece bien si paramos unos minutos?- pregunta Rick desde la parte trasera de la camioneta. -Michonne no se siente muy bien.- todos asienten y el vehículo frena.

Comenzamos a bajar de la camioneta y cuando Michonne sale puedo notar que está con un vendaje en el brazo, no me había percatado hasta ahora porque ha llevado un suéter sobre sus hombros todo el tiempo.

Me acerco a ella.

-¿Qué tienes?- pregunto intentando que no todos se enteren de nuestra conversación.

-Un rasguño, los alambres sueltos de las vallas caídas no siempre son amigos.- ella suspira pesadamente y luego Rick llega con nosotros. -Creo que está infectado.-

-¿Mejor?- la manera en la que se hablan me hace sentir una satisfacción enorme, él es otro a comparación del Rick que conocí y Michonne es simplemente una mujer extrovertida cuando se trata de conversar con Rick.

-Creo que sí.- Michonne saca un bote de pastillas de su bolsillo. -Deberían hacer efecto ya.- argumenta molesta.

-Ya lo harán.- asegura él.

-¿Necesitan más medicamentos? Bueno, yo tengo antibióticos en mi mochila si quieren...- comienza Tobias, que iba caminando a un lado del líder. Rick le agradece y asiente como si le diera vergüenza el estar pidiendo unas simples pastillas... tal vez no tan simples en el mundo actual. Tobias le entrega un frasco blanco y Michonne interviene.

-Muchas gracias.- mi hermano asiente.

-Solamente preocúpate por ese corte ¿De acuerdo?- Tobias pudo tenerlo todo como doctor que te dice frases inspiradoras antes de que salgas de su consultorio, pero en vez de eso eligió ser abogado.