Capítulo 10

3.1K 170 12
                                    

-¿Donde estabas?- pregunta Kay histérica.

-Bueno, estaba en el baño.- sonrei nerviosa.- ya sabes me dieron ganas de hacer pis.

-No me mientas, Michelle Gillies.- me acusa con su dedo índice.

-Esta bien.- suspire.- no le digas nada a nadie ¿estamos?- asintió. - estaba hablando con Jayden y me ha invitado a una cita a la cual acepte.

-¡Oh por dios! ¿te gusta? - pregunta alegre.

-No lo sé. - me encojo de hombros.- vamos a ver que pasa con el tiempo.

-Ya los quiero ver juntos.- sonríe. - como una pareja feliz con muchos hijos e hijas.

-Deja de ver tanta película de princesas. - blanquee mis ojos.- pareces una niña de siete años.

Ella blanqueo sus ojos, el almuerzo termino y ahora nos dirigimos a nuestra ultima clase... Literatura.

(...)

-¿Cuando llega tu papá?- pregunta con una sonrisa.

-Este fin de semana.- sonrío. - por fin tendré mi propio coche.

-Menos mal, querida Michi.

Suelto un bufido.

Llegamos a mi casa y camino a la cocina para servirnos un poco de pizza junto con un refresco, al hacerlo camino hasta el living y le entrego un pedazo a Kay.

-Estoy algo asustada Michi.- susurra Kay.

-¿Que ocurre?- pregunto mientras como un pedazo de pizza.

-No me ha bajado Andrés y hace tres días debía de hacerlo. - suspira.

-Esperemos que pase esta semana.- asiente.- si el lunes no te ha llegado vamos a una farmacia.

-No quiero ser mamá tan joven.- baja su mirada.- apenas tengo dieciocho años y ni siquiera se como cambiar un pañal.

-No te hagas ilusiones cuando no sabemos si en realidad va a pasar.

Toda la tarde me la pase con Kay, a eso de las siete decidió irse a su casa a lo que quede sola.

Una llamada telefónica suena por toda la casa.

-¿Si?- pregunté.

-Hola hija.- saluda mi padre desde el otro lado de la linea.

-¡Papa! ¿como te ha ido en Panamá? ¿ya vienes?- pregunte alegre.

-De eso es lo que quiero hablar contigo princesa.

-Dime.

-Me han dado tres días mas.- suspira. - a lo que no podré llegar este fin de semana.- vuelve a suspirar.- quería ir y comprarte tu coche pero lo lamento princesa.

-No importa.-muerdo mi labio inferior, no quiero gritarle todo lo que me estoy guardando.- ve y salva mas vidas de personas, te amo iré a tomarme un baño.

-Yo también te amo princesa, descansa.- suspira de nuevo.- saluda a tu hermano de parte mía.

-Bien, lo haré.

Colgué la llamada y subí corriendo a mi cama tirándome de boca abajo a esta... entiendo que no pueda venir porque tiene que trabajar pero se la pasa mas en su trabajo que viniendo a visitar a sus dos hijos.

-Marciana ya llegue.- habla Max.

-¡Estoy en mi habitación! ¡La cena esta en el microondas!- grite.

Tome una toalla del perchero y caminé al baño a darme una ducha relajante, después de eso mi teléfono vibra anunciando un mensaje.

Numero desconocido: Mira perra... alejate de el... yo vine a recuperar lo que es mío y no voy a dejar que una niña de papi venga y me lo quite ¿entendido? El es mío, solo mío- 20:09.

Yo: No se que es lo que te pasa Phoenix... ni tampoco se el tipo de romance que ustedes tuvieron, pero si eso es lo que quieres no lo tendrás porque ahora me gusta Jayden y creo que también le gusto a el... así que ahorrate tus estúpidas palabras y vete a la mierda. - 20:10.

Deje mi teléfono de nuevo en su lugar... ¿que se cree esa perra? Ella no tiene el derecho en venirme y decirme que es lo que tengo que hacer, ahora que estoy empezando a descubrir mis sentimientos hacia el aparece ella, idiota.

-Marciana... papa ha llamado.- habla Max.

-Si, este fin de semana no viene.- suspiro.- llega el miércoles de la otra semana.

-¡Fiesta! Haré una este fin de semana.- aparece en el umbral de mi puerta.- quiero hacer una por el feliz semananiversario de Kay y yo.

-¿Es enserio Max?- pregunte aturdida.- ¿una fiesta por una semana de novios que llevas con Kay?

-Si, pequeña.

-Esta muy enamorado.

-Totalmente.- sonríe.- pero quiero que sea sorpresa.

-Esta bien. - sonrei.- te ayudaré... ahora deja que me ponga mi pijama.

-Te amo princesa mía.

-Yo también hermano mío.

Te Amo... Idiota.Where stories live. Discover now