The Chosen Ones (capítulos 205 en adelante)

Parte 215

 Rumi estiro sus pequeños brazos y con sus manos hacia delante estaba pidiéndole el dibujo, ella se lo dio. Una vez con el dibujo en mano, agarro un lápiz de color rojo y empezó a dibujar, en pocos segundos solo el lápiz y le dio el dibujo a Alisa que tímidamente estiro sus manos para agarrarlo... pero...

-Mucho gusto, Alisa.

Rumi estaba mirando fijamente a Alisa...

(Esta... chica...)

Unas gotas de sudor caían por la mejilla de Alisa, ella no se esperaba que Rumi la mirara de esa forma, era diferente a una niña de 11 años, diferente de Suzuka y Mai que eran muy infantiles... era una mirada madura y tranquila cosa que no se esperaba en una niña.

Rumi le entrego el dibujo a Alisa con una ligera sonrisa en su rostro, ella sorprendida lo agarro y se puso a verlo, mientras que Suzuka miraba a Alisa un poco nerviosa.

-¿Huh...?

Los ojos de Alisa se abrieron enormemente al ver el dibujo, ciertamente no se esperaba que una niña de 11 años dibujara algo así.

¿Qué había dibujado?

Bueno, ciertamente no parecía ser el dibujo de alguien de 11 años, no eran solamente garabatos y líneas desordenadas, era un dibujo demasiado bien hecho.

En el dibujo se podía ver a un chico de pelo negro con una tijera en sus manos, había otro chico más también de pelo negro. El chico que tenía la tijera se la estaba clavando en el ojo derecho al otro chico. El dibujo estaba en color y se podía ver la cara de dolor que tenía el chico.

-E-esta... bueno, es un buen dibujo.

Alisa sorprendida le entrego el dibujo nuevamente a Rumi.

-Ya veo.

Mai se puso de espaldas dando a entender que no quería ver el dibujo.

Alisa se dio cuenta que en la pared cerca de los cuadros también había varios dibujos colgados, seguramente hechos por Rumi.

-¿Quieres que te cuente algo, Alisa?-pregunto Rumi mientras miraba su dibujo dando vuelta la hoja-.

-¿Eh? Bueno...

-Las tragedias hoy en día no son muy populares... es una lástima.

Alisa no había entendido lo que Rumi quiso decir, su expresión claramente lo demostraba.

-Lo siento, no sé qué significa eso...

-Ya veo.

Rumi dejo el dibujo en la mesa y se levantó, Alisa se corrió hacia atrás para dejarla avanzar, llevándose la atención de todos.

-Me iré a mi habitación, si hay muchas personas me desconcentro con sus miradas y no puedo dibujar.

Rumi avanzo hacia la puerta sin mirar hacia atrás y antes de poner su mano en la manija, se dio vuelta y con una cálida sonrisa dijo...

-Megumi, ven a mi habitación. Necesitare tus consejos.

-Bien, ahora voy.

Rumi se fue de la habitación y Megumi se levantó.

-Iré yendo con Rumi.

-¡Ah! Espera...-dijo Suzuka-.

Megumi ya se estaba alejando pero antes de eso...

-Nos vemos luego, Alisa.

-Ah... si, nos vemos luego, Megumi.

Y de esa forma Megumi se fue de la habitación dirigiéndose al cuarto de Rumi que la estaba esperando.

Una vez que escucharon el sonido de la puerta cerrarse, Mai comenzó a hablar.

-¡Dios! ¡Qué personas tan problemáticas! Por un lado tenemos a una inexpresiva y por otro lado tenemos a una niña que se cree madura... que moles... ¡Tsk! Hablando de personas problemáticas.

Al frente de Mai, estaba Celty dirigiéndose hacia la puerta pero se había frenado justo delante de Mai y se quedó mirando a las tres chicas.

Ella sostenía en su mano derecha el manga que estaba leyendo y se acercó a Alisa.

-Ten, este manga es mi favoritos, espero que te guste...

-Ah... g-gracias...

-Si no lo lees, voy a golpearte hasta que llores ¡¿Entendido?!

Alisa asintió varias veces con miedo a Celty.

-Bien, así me gusta.

Luego de eso, al igual que Rumi y Megumi, Celty se fue probablemente a su habitación donde había más mangas, entre otras cosas.

Suzuka y Mai se habían puesto al lado de Alisa mientras miraban el manga que le habían prestado.