CANDY CANDY ||Un Final Feliz||

||Capítulo 7||

CAPÍTULO 7 - !Ups¡ ¿Beso?

El nostálgico lugar en el que nos encontrabamos era el mismo que durante años atormento mi memoria, aquel lugar lleno de tormentosos recuerdos era en donde desde lejos grite el nombre de el hombre al que amo mientras el se alejaba en barco con rumbo a América.

Un pequeño suspiro salió de mi boca, y el vapor que se creó se elevó hasta esparcirce y mezclarse con el aire.

-Señorita Candy- escuché decir a mis espaldas.

Voltee lentamente encontrándome con Jorge, él me veía sonriente.

-Debemos irnos señorita - dijo él.

-Si, lo siento Jorge - hablé mientras a paso lento me dirigía hacia el barco.

Una vez arriba, el barco sonó su gran bocina, las personas que despedían a sus seres queridos comenzaron a soltar las pequeñas cintas de colores mientras gritaban "Adios".

No habia nadie de quien despedirme asi que decidi dirigirme a mi camarote, necesitaba soledad. Necesitaba despejar mi mente. Pero, cuando me dirigía al camarote, un grito con una voz muy familiar captó mi atención, de inmediato volví a la orilla del barco.

- ¡Candy! -escuché de nuevo.

Busqué rápidamente con la vista entre las muchas personas que se encontraban ahí y derrepente un escalofrío recorrió mi cuerpo dejandome inmóvil, el estaba ahí buscandome y gritando mi nombre, él, el hombre al que amo me buscaba.

-!Terry! -grite captando su atención.

Su mirada se elevó encontrándose con la mía, una sonrisa se dibujó en sus rosados labios. Inmóvil en mi lugar veia como Terry corria a lo largo del muelle intentando alcanzar el barco que se alejaba cada vez más y más. No podia dejarlo así, al menos debía despedirme de el.

-¡Terry! - grite mientras corria hacia un extremo del barco.

-¡Candy!-respondió él corriendo aún más rapido.

Una vez hube llegado al extremo más cercano al muelle, me coloque de puntillas y estire mi brazo lo más que pude, el imitó mi acción. De alguna manera me sentia más cerca a el, sentia que podía tocarlo, podia recordar aquel suave y cálido beso que deposito en mi mano, podia sentir aquel suave roce que provocaban sus dedos. Podia sentir que estaba a mi lado.

El barco siguió avanzando y muy pronto el muelle, la ciudad, las personas y Terry desaparecieron entre la bruma que comenzaba a crearse.

Me sente en posición fetal mientras las lagrimas recorrían mis mejillas. «¿Por que?» era lo único que podía pensar en aquel momento.

Mis ojos comenzaban a sentirse pesados, mis párpados comenzaban a cerrarse cada vez más y más hasta dejarme caer en un sueño profundo.

***

El cálido roce que sentía en mi mano logro despertarme, con lentitud abri mis ojos, una sonrisa enorme se dibujó en mi rostro. ¿Podria ser posible que fuera el? Voltee mi vista y la sonrisa que antes tenía, se esfumó.

-Buenos dias -dijo Archie.

No respondí, simplemente sonrei falsamente. Todo habia sido cierto, ahora Terry se encontraba muy lejos de mi.

-Lo entiendo- volvió a hablar Archie - Se que no soy yo a quien esperabas ver.

Sin darme tiempo a corregirle Archie se levanto de la silla que permanecia a un lado de la cama y caminó directo a la puerta, se despidió formando una sonrisa en su rostro y salió. No pude evitar sentirme mal, Archie ha sido mi amigo desde siempre, el junto a Anthony y Stear me defendieron de los hermanos Legan. Soy una tonta.

Luego de un suspiro pesado me levante de la cama con pesadez, arrasando mi pies, me dirigí hacia un pequeño guardaropa en el cual habían metido cada uno de mis vestidos y demás ropa que Albert había comprado para mi.

Saque un vestido color durazno adornado con encaje y pequeñas perlas color blanco. Me despojé de la ropa que llevaba y me puse el vestido, luego me cepille y acomodé el pelo en dos colitas. Una a cada lado de mi cabeza.

Salí de la habitación, el día parecia perfecto. El sol iluminando los pasillos, la brisa chocando contra mi cara, las gaviotas volando al rededor del barco.

***

FLASHBACK

-Tarzan pecosa- dijo Terry riendo.

-¡Terry Grandchester!- exclamé -Te he dicho que no me llames así.

Mis mejillas enrojecieron. El estar a su lado, el sentirlo cerca y escuchar su melodiosa voz eran motivo de felicidad para mí y aunque le reclamara por llamarme "Tarzan pecosa". Lo amaba. Amaba que me llamara así, porque sabia que era la única persoba que me llamaría así. Sabía que era algo que él personalmente había inventado para mí y eso, lo hacía aun más especial.

FIN DEL FLASHBACK

Recordar aquello hizo que una sonrisa se dibujara en mi rostro. Terry fue la segunda persona, despues de Anthony, a la que he amado realmente. Nadie ocuparía su lugar jamás. El que él fuera feliz era lo mas importante para mi. Fue por eso que decidí alejarme de él aquel día de la fiesta.

Había llegado a la conclusión de que el motivo de alejarme de él fue exactamente para no afectarlo. Fue para que fuera feliz. Entonces ¿Porque estaba yo, triste? ¡No debiera ser asi! Yo, debería estar feliz de haberlo ayudado. Al menos, eso pienso.

-Sere feliz- susurre -Por ti.

《Lejos o cerca sere feliz. Porque si tu eres feliz yo tambien lo sere》

Luego de decirme aquello Archie se hizo presente en mi mente, debia disculparme, habia sido grosera cuando el no habia sido el causante de nada, él no fue quien me pidio que me alejara de Terry. Al contrario, el me aconsejó y estuvo ahí cuando yo mas lo necesitaba.

Sin pensarlo dos veces corrí hacia el camarote de Archie. Abrí la puerta rapidamente y corrí hacia la silla en dobde se encontraba leyendo, me abalanze sobre él haciendo que el libro cayera al suelo y lo abraze con fuerza.

-Lo siento- dije aun sin soltarlo -Fui grosera con tigo. Prometo no volver a hacerlo. Perdoname Aerchie.

Sentí como sus manos se posicionaron en mi cintura para luego juntarme mas a él.

-No te prepcupes- susurró a mi oido -No hay nada que perdonar.

sonreí y con cuidado deshice el abrazo que se habia formado. Me comenzé a levantar, al igual que Archie cando el barco giró, mis torpes pies y el poco equilibrio que tuve me hicieron caer y al tratar de ayudarme Archie cayo encima mió.

Sus labio se juntaron con los mios al caer al suelo. Eran suaves y tenian un sabor dulce. Ambos embobados con los que acababa de pasar, nos quedamos paralizados y sin saber que hacer. Cuando derrepente el sonido de la puerta.

-Señori...- la voz se detuvo.

Volteé rapidamente al igual que Archie. Mis ojos se abrieron como platos, esto no podía ser posible, esto no podía pasarme a mí.

-¿Candy?- preguntó -¿Archie?- volvió a preguntar.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo.

《Ojala la tierra pudiera tragarme》