Tu y Yo

339 27 0
                                    

Doran

Por su parte en un momento llego a odiar a su compañero, se le hacia muy molesto que el felino este detrás suyo todo el tiempo, pero luego de un tiempo pudo tomarle cierto cariño especial.
Ella veía mucho parecido entre ambos, Darael y Chat eran muy similares. Podía saberlo por que lo conocía desde pequeña, pero aun tenía sus dudas.

Una luna llena se iluminaba en el agua del poso, tapada para no ser descubierta Doran esperaba a su compañero mientras hablaba con su kwami.

-Tikki.. ¿No prescientes nada?-
Alzo su vista para ver a la pequeña revolotear.

-No, Doran. Solo prometeme que no llevaras esto mas lejos-
La pequeña se preocupaba mucho por su portadora, ya que se estaba viendo bastante envuelta en esos asuntos con "ese" gato negro.

Doran se quedo callada ante aquella respuesta, no estaba segura de que responder por que ciertamente estaba pasando a mayores.

- Voy a intentarlo ¿De acuerdo? -
Dijo con una sonrisa, extendiendo su meñique el cual el kwami abrazo. Inmediatamente se escondió entre las ropas de su porradora al escuchar unos pasos, Doran intento darse la vuelta cuando unos brazos la tomaron por sorpresa.

-Una linda noche ¿Verdad, my lady?- una voz susurro a su oido

Logro librarse y se comporto de la manera habitual, con su toque de hostilidad para no preocupar a Tikki.

- Si, pero hay muchas iguales -
Se cruzo de brazos

-Pero no en todas tengo el placer de encontrarme con una belleza -

-No es para tanto Chat, me pregunto a cuantas mas les dirás eso- suspiro desganada - Ya va siendo muy tarde no crees? -

- Hmm.. Tienes razón ¡Nos vemos! -
Hizo una mueca y agito su mano mientras se marchaba cuando una mano tomo su muñeca

- No significa que tengas que irte -
Ambos se encontraban con un leve sonrojo en sus mejillas, rieron un rato y dándole un cierre aquel gato se acerco a Doran y le robo un beso un tanto corto, a lo que ella se sonrojo de una manera mas notable y lo aparto, el tan solo sonrió y se marchó.

Era algo de que preocuparse, las leyendas del pueblo no mentian. Y su pequeña acompañante tampoco.

Para proteger al MundoWhere stories live. Discover now