La vieron levantarse con rapidez y correr hacia el baño de la sala. A los seis meses y todavía tenía nauseas.

May:Vamos ucker eres muy bueno en matemáticas, ayuda a dul–le pidió su hermana– Si no pasa el semestre no irá a la universidad –le recordó.

Ucker:Muy bien rojita, te ayudaré –le dijo cuando ella volvió a la sala.

Dul:¿De verdad? –le preguntó con una sonrisa.

Ucker:Pobre de ti si no sacas un cien –le advirtió.

Las próximas horas los dos estuvieron muy concentrados, ucker haciéndole ejercicios para que ella hiciera y ella tratando de hacerlos.

Ucker:¿Entendiste? –le preguntó.

Ella tenía los ojos entre cerrados, estaba cansada, era media noche.

ucker:¿rojita? –la llamó cuando ella apoyó la cabeza contra su pecho– Pequeña estúpida –susurró, se había quedado dormida, le apartó un mechón de pelo del rostro. Dejó todo así como estaba y la tomó en brazos, le puso una bata y la acomodó en la cama cuando estuvo en la habitación. Se acomodó a su lado y a penas lo hizo ella buscó su calor.

Ucker acarició su abultado vientre, nunca lo había hecho, por lo menos así pensaba  dul ya que ella nunca había notado que mientras dormía él acariciaba su vientre con ternura. No se arrepentía de ser su novio, por lo menos no hasta ahora. Ella lo llenaba completamente.

La mañana llegó algo nublada, desde que eran novios cuando despertaban si no era ella la cual estaba dormida en su pecho era él quien la estaba abrazando por la espalda, manteniéndola firme y cómoda entre sus brazos, ese día tenía cita con su ginecólogo, haber si ahora su bebé se dejaba ver. Ese día le tocaba a ella preparar el desayuno y mientras ucker se estaba duchando ella preparaba el desayuno, acomodó la mesa y fue a despertar a May

Dul:may el desayu...– guardó silencio cuando abrió la puerta de la habitación y ver aquella escena.

May estaba con cris, estaban muy abrazados y por lo que se veía estaban desnudos. Cuando ambos escucharon a dul se espantaron como quien dice.

–du...dulce– dijo May tapándose.

Dul cerró la puerta con rapidez muy sonrojada.

Al volver a la cocina tuvo que tomar agua y sentarse. Si ucker se enteraba mataría a cris

–dul, déjame explicarte –escuchó a May quien había salido de la habitación.

Dul:N...no te preocupes –le dijo dejando escapar un suspiro– Solo espero que te estés cuidando –le dijo.

May:Sí, claro que sí –le dijo.

Dul:¿Desde cuándo están juntos? –le preguntó.

May:Hace unos días –dijo avergonzada– Por favor no le digas nada a ucker, quiero encontrar el momento para decirle.

No supo que responder, su relación con ucker no era la mejor pero no podía engañarlo con algo tan delicado.

–¿Decirme qué? –la voz de ucker causó que su corazón diera un vuelco.

May:Na...nada –se apresuró a decir – ¿Verdad dul?

Dul:Eh...se me hace tarde –la vieron caminar con rapidez hasta la habitación.

Él solo alzó una ceja.

*mas tarde*

Ucker¿Qué te pasa? –le preguntó. Al verla bajar la cabeza hizo que en cierta manera se preocupara.

Odio AmarteWhere stories live. Discover now