Su Amante

cap.9

Pov's Dylan.

Estaba en mi despacho y bebiendo mi licor, Emma ya sabia lo de Juliane y yo, soy tan estupido, debí rechazarla al instante, debí calmar mis hormonas, mi celular sonó y contesté sin ver quien era,

- ¿hola? -,

- Dylan, estoy en mi departamento y tengo lencería nueva - era Juliane, suspire cansado,

- Juliane, te dije ayer que esto ya había terminado - le dije,

- Dylan, yo te amo, te necesito a mi lado - me dijo - por favor no me dejes -,

- Juliane, tengo una esposa y la amo, y no estoy dispuesto a dejarla por ti -, le dije, se que soy un imbécil pero es la verdad,

- Dylan, mejor lo discutiremos mañana, ahora estas mal te oigo un poco tomado -,

- te veo mañana Juliane -, le dije y colgué, todo por sexo.

Me serví otro vaso de licor y me lo tomé de golpe, mi celular sonó otra vez, ví quien era y era Víctor Richardson,

- ¿hola? -,

- Dylan, amigo, tu esposa está en un pub y se ve que está demasiado pasada de copas -,

- ¿en qué pub? -, dije rápido,

- en el de siempre amigo, pero date prisa que está muy bien acompañada -, me dijo y colgué, agarré mis llaves del auto y me dirigí al pub.

Al llegar entre y e intenté divisar a Emma por algún lado, había mucha gente y la música estaba muy fuerte. Detuve mi mirada en la pista de baile y ví a Emma retregarsele a un tipo que disfrutaba de ella, mi enojo subió y sin pensarlo más me dirigí hacia ella y la tomé del brazo,

- Emma vámonos -, le dije y ella se negó,

- dejala empaz amigo, ella ahora es mía - me dijo otro tipo igual de borracho que ella, le ignoré y empuje a Emma a la salida, ni caminar bien podía, la subí al auto y luego yo y empecé a manejar,

- ¿que te pasa Dylan?, estaba excelente la fiesta -, me dijo con una voz que ni se le entendía,

- estas muy borracha Emma -,

- ¡yo! -, se rió irónica, - tu eres el borracho -, me dijo.

Al llegar a la casa ella torpemente se bajo y camino en zic zac para la casa,

- ¡ Emma espera ! -, le grité y la agarré de la cintura,

- ¡no me toques con tus manos sucias que tocaron a esa zorra! -, me gritó y no me importó, subimos a la habitación y ahí se acostó sin decir más, le quité sus tacones y deje que durmiera.

Yo me fuí al despacho a terminar el último folder de los manejos de los salarios, bebí un poco más de licor y me dedique a terminar mi trabajo.

Después de media hora apareció Emma en la puerta y camino hacia mí, se veía que se le había pasado un poco la borrachera, me abrazó por el cuello y empezó a besar mis hombros y cuello, sus manos empezaron a desabotonar mi camisa,

- Emma que haces, vuelve a la cama - le dije tranquilo,

- hazme el amor Dylan, quiero sentirte dentro de mí - me dijo y me fue tentador pero no estaba en sus cinco sentidos,

- Emma no, vuelve a la cama -, le dije y fue lo peor que le pude haber dicho,

- ¡acaso no soy lo suficientemente mujer como Juliane, acaso no te doy el placer que ella te da! -, me gritó con sus ojos llenos de lágrimas,

- no Emma no. Tu eres la única que me das placer, eres mi mujer y siempre estaré satisfecho contigo - le dije y la abracé pero ella se separó de mi al instante,

- ¡entonces porque no me haces el amor ahora! ¡necesito a mi marido! -, me gritó,

- Emma estas borracha -,

- tu también hueles a alcohol Dylan -, me dijo y era cierto yo también no me encontraba en mis cinco sentidos, - Dylan hazme el amor te deseo como nunca -, me dijo tomandome de las mejillas con sus delicadas manos, yo la ví a los ojos y ella quitó sus manos para quitarse el vestido, luego se desabrochó su sostén y se lo quitó al igual que sus bragas, quedando completamente desnuda frente a mí, pude sentir mi miembro crecer ante la excelente figura de mi mujer, - Dylan tocame, hazme el amor -, parecían suplicas en ella, yo solo recorría su cuerpo con la mirada y mi miembro pedía a gritos salir de tanta tela, ella al ver que no la tocaba se arrodillo frente a mí y me impresionó ver que ella hiciera eso por hacerla mía, - Dylan por favor -, me suplicó y yo sacudi mi cabeza de forma negativa,

- no amor, no te humilles frente a mi - le tomé del brazo y la levanté, más lágrimas recorrían sus mejillas, - tu eres mi mujer, y si me pides que te haga el amor lo haré - le dije ella se soltó a llorar más, me abrazo y sollozó en mi hombro, la cargué como un bebe y la lleve a nuestra habitación, estando ahí la dejé en la cama, me quité los pantalones y la camisa quedando completamente desnudo y me posicione en ella.
Besé sus labios con ternura y delicadeza, bajé mis besos por su mejilla, mandíbula, cuello hasta llegar a su feminidad donde le dí besos. Luego besé sus pechos e introduje uno de sus pezones a mi boca y jugué con el un buen rato mientras masajeaba el otro.

Jugué con mi miembro en su feminidad hasta que lo introduje, ella gimió y eso me gustaba, que mi mujer, MI esposa se excitara por mi, por mi culpa, subí sus manos arriba de su cabeza y empecé a embestirla un poco más rápido, nuestros gemidos retumbaban en la habitación, besaba sus labios, saboreaba su sabor,

- te amo Emma -, le susurré y ella sonrió,

- yo te amo Dylan - amaba escucharlo...