Yo te protegeré - Zayn Malik

CAPITULO 4: PASSIVE - AGRESSIVE

- ¡Detente! Eres como un dolor en el maldito trasero - Abbi gritó - Lo que no es sorprendente ya que eres una pequeña mierda de forma independiente. 

- Joder cariño, deberías conseguir una buena follada para disminuir tu mala actitud - Zayn ironizó. 

- Eso es tan misógino - La chica argumentó - Sí consigues cogerte a la mitad de la escuela con un vocabulario tan despectivo, entonces debemos revisar el IQ del alumnado femenino. 

- Vamos Hagenn, podría hacer un acto de caridad y dejar que me chupes la polla - Zayn sonrió - Aunque ciertamente no es como que jadee por sexo todo el tiempo, algunas personas son tan integrás como tú.

- ¿Integrás como yo? ¿Es qué acaso también te odian y ruegan para que termines suicidandote en cualquier momento?

- Y de igual manera desean que al menos les hablé una maldita vez - Exclamó con indignación. Abbi comenzó a reir - ¿Qué demonios es tan gracioso? 

- Tú lo eres - Ella sonrió - Eres hilarante. 

- Y una mierda si no deseas tener mis labios contra los tuyos - Zayn afirmó con arrogancia.

- ¿Y obtener alguna enfermedad? - Abbi se levantó cuando los alumnos comenzaron a salir de sus aulas - Sé que la rabia se contagia mediante la saliva,  realmente no necesitó eso en mi sistema. 

- Jodete Hagenn - El chico imitó sus acciones, completamente fúrico.

- No gracias - Abbi comenzó a caminar lejos de él - Tampoco necesitó cualquier tipo de ETS. 

Abbi se dirigió a la cafetería de la institución, usualmente evitaba aquella grasosa y dudosa comida pero a Christopher parecía encantarle por lo que permanecían aquí durante el segundo receso. Caminó a través del lugar y observó como la caballería de Malik, compuesta por sus conocidos y amigas de su deslumbrante compañera de sexo, comenzaban a susurrar cuándo la notaron entrar.  Frunció el ceño en confusión pero descarto cualquier signo de interés en el hecho.

- ¿Cómo estuvo el castigó? - Hannah se burló. Chris rió a su costado.

- Eres un imbecil cotilla - Acusó al chico. 

- Hey - se quejó - Ella lo dedujo sin necesidad de que comentará al respecto. 

- De cualquier formá, estuvo pésimo  - Abbi contestó la pregunta de Hannah - El idiota de Malik estaba ahí y joder si mi necesidad de no golpearlo hasta la inconsciencia no aumentó, también, el director Warren nos advirtió sobre que debemos moderar nuestro comportamiento.

La chica Hagenn miró hacia las mesas que estaban próximas a ella y su mirada se detuvo sobre la de Zayn,  quien se la devolvía mientras apuñalaba con odio su desayuno.  Abbi le sonrió con diversión y Malik apartó la mirada con fastidió. 

- Han estado discutiendo durante todo el curso y la mayoría de sus discusiones provocan que terminen en la oficina de Warren, no culpó al hombre si esta arto de esa mierda - Hannah aportó.

- Hablas como sí tuviera la culpa.

- ¿No la tienes? - Christopher enarcó una de sus cejas.

- Si,  pero ese no es el punto. 

- Bazofia - Hannah le resto importancia - ¿Irás conmigo a la fiesta de Katia mañana?  Mis padres serán menos indulgentes sin estas ahí.

- No - Abbi recordó con exasperación - William tiene una cena de trabajo con un probable nuevo socio y me pidió que lo acompañe como la hija perfecta. 

- ¿Alexandra asistirá - Christopher miro extrañado a la chica.

- Lo hará si no quiere que William joda sus números bancarios, reafirmo que congelaría sus tarjetas si arruina su próximo negocio - Abbi suspiró en resignación. Su familia era el único grupo de personas que hacian sus sentimientos tan volubles.

- Suena como un día jodido - Hannah remarcó.

- Lo será.

- Detesto a los chicos del equipo de fútbol - Chris declaró repentinamente.  Ambas chicas sonrieron ante el anunció del despistado chico.

- ¿No eras tú el qué hace unos meses sangrabas incluso solo por una oportunidad de entrar al equipo? - Hannah rió suavemente - Exclamabas que naciste para estar dentro y representarnos en los partidos. 

- También eras tú el que Zayn rechazó por que ni siquiera podias tocar el balón o respirar cerca de uno - Hagenn aportó. La chicas recordaron la ocasión donde Christopher le daba a cualquier cosa alrededor excepto al balón y tuvieron que fingir que estaban en esa audición para apoyar a alguien más. Todo acabo cuando Chris golpeó la pelota una unica vez y ese instante fue suficiente para que golpeara al entrenador en el rostro.

- Eso fué hace mucho, superenlo - El chico hizo un ademán con fastidió.

- Dos meses no es una gran cantidad de tiempo, amigo - Abbi lo consoló. El contrarió resopló.

- Debo irme - Hannah se levantó con una pequeña sonrisa divertida - Es el primer dia de las nuevas integrantes del equipo de Atletismo y tendré que supervisarlas. 

- Suerte - Chris ánimo.

- ¿Puedo llamarte más tarde? - La chica pregunto a Christopher - Estoy teniendo algunos problemas con mi ordenador y necesitó tu ayuda. 

- Por supuesto - El hombre parecía curioso.

- Genial - Hannah se alejó complacida - Adiós Abbi.

- Hasta mañana - Ella se despidió.

- Comencé a estar consciente de algo - El chico exclamó cuando Hannah desapareció de su campo de visión.  Abbi centro su atención en él.

- Te escuchó.

- Hannah es capitana del equipo de atletismo - Comenzó y asentí - Tu eres la enemiga declarada de Zayn, que és por cierto, capitán del equipo de fútbol. Todos ustedes descatan de alguna forma.

- Ajá - La chica Hagenn parecía confundida.

- Entonces... - Christopher hizo una mueca - ¿Qué soy yo?

- Asistente -  Abbi respondió fácilmente y tomó sus cosas para irse cuando el sonido incesante de la campana se escuchó - Hasta mañana, Chris.

- Espera ¿A qué te refieres con eso?  - El hombre gritó cuando la chica se habia considerablemente apártado de él.

- Asistente - Abbi sonrió - Haces básicamente todo lo que te ordenamos si piensas en ello.

- ¡No es gracioso, Hagenn!

- ¡Nadie dijo que lo fuera!

(…)

Cuando Abbi caminaba por los desiertos pasillos de su instituto en el último período del dia, le fue inevitable no detenerse ante la repentina sensación de estar siendo observada. Miró a su alrededor, con un gesto de molestia en el caso de que se tratará de alguna broma pero no encontró nada, ningun movimiento o susurró sospechoso. Atribuyendo su sensación a la paranoia continuó con su recorrido, pero una baja risita próxima a ella le hizo comenzar a entrar en pánico. La chica Hagenn corrió hasta su auto en el aparcamiento y se encerró en el interior. 

Con las palmas sudadas y un ligero temblor en su cuerpo, suspiró nerviosa mientras conducía en dirección a su casa. Estacionó el auto cuando llegó a su destino con una sensación de alivió en su sistema y camino hasta la entrada del lugar, Abbi no tenia demasiadas actividades en su tiempo libre o si las tenia, anormalmente eran relacionadas a los deberes. Cuando era más pequeña sus padres procuraban pasar el mayor tiempo posible cerca de ella pero a la edad de diez años, un distanciamiento mutuo comenzó a notarse. 

Alexandra en ese tiempo pretendía tener a la hija perfecta, una chica que la acompañaba a sus reuniones sociales o lloraba cuando algún capricho no le era permitido. Después de percatarse de que en realidad nunca podria cambiar a Abbi, simplemente se rindió y se distanció. 

La perfección no es algo que encajara en ella, ser alguién ejemplar era exhaustivo en la opinión de la chica Hagenn.