El Hada Del Mar (Nalu)

Enemigos Peligrosos

Pov Wendy:

Me desperté muy temprano para ir por primera vez a tierra firme sóla.

Sin hacer ruido, me marché de la habitación sin despertar a Lucy.

Me dirigí a tierra firme hasta que me pararon dos mujeres extrañas.

Vestían de una forma muy tétrica y no se parecían a las Hadas del Mar como mi hermana, Juvia o yo.

Estas tenían una cola de sirena que tenía la misma forma que un tiburon mas o menos. Tenían alas de demonios, uñas largas y arreglasas y unos cuernos en la cabeza.

- Vaya, vaya. ¿Qué tenemos aquí?

La mujer que habló era más bajita que la otra. Tenía en pelo corto de color verde y ojos turquesa. Su cola era de color negro, sus alas gris oscuro tirando a negro y sus cuernos tenían un tono cobre.

Llevaba puesto un vestido violeta y negro con mariposas.

- ¡Qué suerte hemos tenido! El maestro Hades se pondrá de muy buen humor. - dijo la otra mujer que era más alta.

Su pelo le llegaba a la cintura, era de color castaño con mechas naranjas, sus ojos eran de color verde claro y su cola era de color rojo igual que sus alas y cuernos de un tono dorado. Llevaba un vestido corto de color azul electrico.

- ¿El Maestro Hades? - me apuré y nadé hacia abajo para distraerlas pero me detuvueron en un abrir y cerrar de ojos.

- ¿Qué te pasa pequeña? ¿No quieres escuchar nuestra canción? - dijo la mujer de pelo castaño con mechas.

- ¿Se lo enseñamos, hermana Silvia? - dijo la pequeñita de firma risueña.

- Claro que sí, Gladis. ¡Empezemos!

(La canción que cantan, es la misma que cantan las hermanas Mimi y Sheshe la que aparece en el cap)

Me dolían los oidos y la cabeza. Era insoportable. ¿Qué clase de poder era ese? Y lo más extraño; ¿Qué quería en realidad ese tal Hades? ¿Porqué motivo secuestró a mi hermana? ¿Y ahora por qué me quería a mí?

- Bien ya es hora de que te llevemos con el Maestro Hades. - dijo esa mujer llamada Silvia.

- ¡Quietas ahí!

Conseguí levantarme y darme la vuelta para ver a mi hermana y a Juvia venir. Me quedé muy aliviada al verlas.

- ¡Suelta a Wendy! - gritó Lucy.

- De eso nada, sirenucha. - Silvia creó una barrera mágica que me impedía salir.

Pov Lucy:

Tenía que detener a esas mujeres. ¿Pero cómo lo haré?

- Cantemos para ellas hermana mayor. - dijo la más bajita.

- Sí a ver si se calman un poco.

¿Cómo que cantar? ¿Qué pretendían?

- ¡Qué empieze el espectáculo!

- ¡Alto! - Juvia se puso delante con los brazos extendidos.

- ¿Qué? - dijeron las hermanas.

- ¿Juvia? - que iba a hacer.

Pov Juvia:

Es el momento de demostrar los frutos de mi entrenamiento.

La hora de mostrar mis verdaderos sentimientos en esta canción.

El amor que siento por el hombre al que amé y amaré siempre. Y por la nueva amistad que entablé con Lucy y Wendy.