-.. Y entonces salí del salón con Mia para ir a la enfermería a que me checaran- terminé de contarle a nana y a Sean el porque de mi golpe.
-esta chica tiene serios problemas- dijo nana con el ceño fruncido -te vuelve a tocar un pelo y yo misma la pongo en su lugar- nana estaba muy molesta por lo que me hizo Stacy.
-más le vale no volver a acercarse a ti, no me parece su actitud, fue muy..- dijo Sean buscando la palabra indicada.
-gata? Zorra? Corriente?- dije elevando mi ceja
-las 3 cosas- dijo Sean levantándose de su lugar -ya me voy, tengo una junta importante en media hora- dijo dándonos un beso a mi y a nana -no sé a qué hora vuelva Amber, no me esperes despierta- dijo dirigiéndose a la puerta pero yo le hable.
-Sean hoy saldré tarde, probablemente llegue hasta más tarde que tú- dije temiendo su respuesta.
-a donde vas si se puede saber?- dijo elevando una ceja.
-saldré..- dije pero Sean seguía esperando más información-saldré con un chico- solté y él me miró sorprendido.
-muy bien, no te lo prohibo pero te quiero aquí antes de las 12:00- sentenció y yo sonreí.
-gracias!- dije animada, el asintió y salió por la puerta.
-así que tienes una cita eh?- dijo nana mirándome picara y yo me sonrojé -quién es el afortunado?- dijo elevando las cejas.
-humm..- pensé en si debía decirle la verdad y al final opté por hacerlo -saldré con Jack el hermano de Lindsey- la miré esperando su respuesta y ella rió.
-muy bien señorita "es un chico más"- dijo imitando mi voz y yo reí -que te pondrás?- dijo emocionada inclusive más que yo.
-no tengo idea- suspiré -no tengo ropa- nana rodó los ojos.
-tienes más ropa que toda la gente de Nueva York junta, deja de exagerar y ve a ver que usarás- sentenció nana y yo obedecí.
Subí a mi habitación y después de revolver todo mi armario saqué un lindo vestido negro con toques dorados y la espalda descubierta.
Miré mi reloj y ya eran las 6:30 así que me metí a bañar rápidamente, al terminara salí enrollada en una toalla que aventé por la habitación después de ponerme unas pantis negras de encaje. No me puse brasier ya que si no se estropearía el vestido y éste ya venía preparado para no tener que ponerte ninguna clase de sostén.
Me puse el vestido y me dirigí a mi peinador, me cepillé el cabello y comencé a maquillarme, primero apliqué polvo por toda mi caea después en mis ojos puse algo de sombra negra y dorada, me puse rímel y delineador.
Pasé a mis labios donde después de ver mis miles labiales para ver cuál me quedaba mejor, elegí uno rojo cereza matte.
Cuando terminé mi maquillaje me miré en el espejo satisfecha.
Pensé en miles de peinados diferentes y opté por un recogido que dejaba caer algunos mechones.
Una vez lista, vi el reloj que marcaba las 8:00 en punto, Jack no debía tardar así que me perfumé por todos lados, me puse mis tacones de aguja negros y tomé un bolso negro pequeño donde guardé mi celular, las llaves y mi cartera.
-te buscan abajo- dijo nana asomándose por la puerta -te ves hermosa Bery- me sonrió nostálgica -eres idéntica a ti madre- dijo a punto de romper en llanto y yo la abrcé
-gracias nana- dije cuando nos separamos -me tengo que ir, te quiero- dije dándole un beso en la mejilla -deséame suerte!- susurré y salí de la habitación, cuando bajé las escaleras pude ver a Jack vestido con pantalón, saco y camisa de vestir sonriente.
-ten- dijo tendiéndome unas flores.
-aww gracias- sonreí enternecida -las pondré en agua- dije dirigiéndome a la cocina donde saqué un jarrón, le puse agua y después las flores -nos vamos?- dije volviendo con Jack.
-claro- dijo tendiéndome su brazo y yo lo tomé gustosa -señorita Amber Jones, déjeme decirle que no cabe duda que esta noche se ve más hermosa que nunca- dijo dándome un beso en la mejilla mientras cerraba la puerta.
-gracias joven O'donnell- dije siguiéndole el juego y los 2 subimos al elevador, en cuanto las puertas se cerraron Jack se giró hacia mi acorralándome en un rincón.
-Amber con ese vestido haces que me den ganas de cogerte aquí mismo- dijo acariciando mis costados y yo puse mis manos alrededor de su cuello.
-pero no lo harás porque tardé siglos en arreglarme- dije sonriente y el se acercó a mí a punto de besarme pero incliné mi rostro y terminó dándome un beso en la mejilla -nada de besos Jack, arruinarás mi maquillaje- dije seria y el bufó -después de la cena podrás, pero ahora no- Jack me miró achicando los ojos.
-bien- dijo y comenzó a besar mi cuello como sólo él sabe hacer y yo acaricié su cabello tiernamente -veo que no te maquillaste las marcas- dijo contra mi cuello.
-no..- jadeé al sentir que succionaba mi piel -son para que la gente las vea..- susurré las mismas palabras que él me había dicho.
-exacto- dió un último beso en mi cuello y las puertas del elevador se abrieron -andando- dijo tomando mi mano y entrelazando nuestros dedos.
Nos dirigimos a su auto, un Audi R8, Jack me abrió la puerta como un caballero y yo subí, después él se dirigió al asiento del piloto para manejar donde sería nuestra cita.
Llegamos a un restaurante francés que estaba como a 15 minutos de mi departamento, yo ya lo conocía había ido una vez en un cumpleaños de Sean.
Bajamos y entramos al restaurante donde un mesero nos guió a nuestra mesa después de que Jack dijera que tenía reservación.
Nos sentamos y comenzamos a hablar de diversos temas riendo por una que otra cosa.
-y que tal la vida en el internado?- pregunté dándole un sorbo a mi copa de vino.
-todo tranquilo, a pesar de que mis padres lo vieran como un castigo para mí fué una aventura de la que no me arrepiento- dijo relajado y un mesero llegó con nuestra comida que era una especie de pasta con pollo rallado sobre ella.
Comenzamos a comer hasta que Jack habló.
-y que tal tu vida amorosa?- preguntó algo incómodo.
-tranquilo, uno que otro novio solamente- me encogí de hombros y tú? Supongo que eras un rompecorazones- dije sonriendo algo incómoda, la verdad, no quería saber con cuantas chicas ha estado porque sé que ha de haber un millón.
-la verdad es que nunca he tenido una novia formal- dijo y yo me atraganté con la comida y él me miró divertido -es cierto, he sido mujeriego y he coqueteado con muchas chicas pero la verdad es que nunca pasé de los besos en una noche, a parte, en el internado éramos solo chicos, solo veía mujeres los sábados en la noche en algún bar- dijo bebiendo de su copa.
-así que eres.. Virgen?- fruncí el ceño ya que eso sí no me lo creía.
-no- soltó una carcajada -si me he acostado con chicas pero que te digo? Con unas 2 o 3?- dijo tranquilo y me sentí mejor de que no fuera tan grave como yo pensaba -y tu? Eres virgen?- preguntó después de comer la poca pasta que le quedaba en su plato.
-humm..- lo pensé un momento y decidí abrirme como el conmigo -no- me ruboricé un poco recordando -pero sólo lo he hecho 2 veces y la segunda fue un asco- dije arrugando mi nariz.
-porque?- dijo Jack curioso.
-mi ex-novio no era para nada bueno- suspiré -aquí entre nos, la tenía chica- dije y Jack soltó una carcajada -no es gracioso- dije aguantando las ganas de yo también reírme.
-vamos Amber, si lo es- dijo riendo menos -pero no te preocupes, cuando lo hagamos estoy seguro que no recordarás ni el nombre de ese chico- dijo guiñándome un ojo y yo rodé los ojos.
-y quien dice que me acostaré contigo- cuestioné.
-Amber, si no lo hacemos no podremos tener hijos- dijo serio y la verdad es que me hizo ilusión que Jack pensara en un futuro conmigo.
-creo que vas muy lejos, no somos nada y ya quieres hijos- dije con algo de tristeza.
-Amber- dijo tomando mi mano sobre la mesa -no es que no quiera una relación contigo, simplemente no quiero apresurar las cosas, nos conocemos desde hace poco y ya me gustas a tal grado que me vuelves loco- dijo y yo sonreí por sus lindas palabras, era un cursi de primera -ya verás que pronto seremos novios y te podré presumir por toda la escuela- dijo con un brillo en sus ojos y yo me paré a abrazarlo, me senté en su regazo pero de una forma nada vulgar y lo abracé por el cuello.
-gracias- dije mirándolo a los ojos y poco a poco nos acercamos hasta fundirnos en un lindo beso lleno de amor y buenos sentimientos.
...
Jack estacionó su auto en el estacionamiento subterráneo del edificio y después juntos subimos hasta mi piso riendo por cosas que hacía o decía Jack.
Estábamos fuera de mi departamento despidiéndonos.
-adiós- dijo Jack abrazándome por la cintura.
-adiós- dije sonriente mientras rozaba mis labios con los suyos hasta que el acortó la poca distancia uniéndonos en un beso y yo pasé mis manos por su cuello.
El beso pasó de ser uno lindo y tierno a uno desesperado y deseoso.
Jack introdujo su lengua en mi boca comenzando una guerra con la mía, después fui retrocediendo hasta topar con la puerta de mi departamento y Jack pasó sus manos a mis muslos cargándome.
-me tengo que ir Amber- dijo Jack mientras yo bajaba mis besos a su barbilla y después a su cuello el cual comencé a mordisquear succionando su piel como el muchas veces había hecho conmigo -Amber..- gruñó y yo sonreí satisfecha de mi trabajo.
-quédate- dije mirándolo a los ojos haciendo puchero.
-me puede ver tu hermano Amber- dijo con una mueca.
-no te verá, iremos en silencio aunque probablemente ya esté dormido- eran las 12:30, mi hermano para esa hora ya estaba en el quinto sueño -a parte, si no lo está, está encerrado en su cuarto que está a kilómetros del mío- expliqué rogando porque aceptara mi oferta.
-bien- dijo después de pensárselo -si me ve, fue tu idea- me advirtió y yo le di un beso rápido.
Jack me bajo y entramos al departamento en silencio, cerré la puerta con llave y subimos sin hacer ruido hasta mi habitación que por suerte estaba cerca de las escaleras.
Entramos y yo cerré la puerta con pestillo por cualquier cosa. Me giré y vi a Jack mirando toda mi habitación y yo fui detrás de él a abrazarlo.
-linda recámara- dijo girándose a verme.
-gracias- sonreí -ahora vuelvo- dije abriendo la puerta de mi armario, solté mi cabello dejando que cayera por mis hombros en cascada.
Volteé a ver a Jack con una mirada provocativa mientras el no quitaba la vista de mi decidí darle otra vez la espalda y bajé lentamente el vestido hasta que cayó por completo al suelo y yo quedaba solo en pantis.
Saqué una sudadera y antes de ponerla sentí las frías manos de Jack en mi espalda y después en mi abdomen, me giró lentamente sin dejar de mirar mi rostro y yo me ruboricé un poco cuando su mirada bajó a mis pechos descubiertos.
-eres hermosa Amber- susurró en mis labios y me dio un corto beso en ellos para después quitarme la sudadera de las manos y colocármela el.
Sonreí un poco y después bostecé, saque unos shorts cortos y me los puse.
Fui al baño a desmaquillarme y cepillé mi cabello, cuando salí, Jack estaba sentado en mi cama.
-voy a decirle a Sean que estoy aquí- dije antes de salir por la puerta y caminar hasta el otro lado del pasillo donde estaba la habitación de Sean.
Iba a tocar pero frené cuando empecé a escuchar ruidos del otro lado, eran... jadeos? y...gemidos?
Con el ceño fruncido abrí un poco la puerta y lo que vi me dejó helada, Sean acostado con Lindsey sobre el dando brinquitos y ambos desnudos.
