-No pasó absolutamente nada- mintió
-Dulce, a ver...¿De cuándo crees que tengo cara de haber nacido?- la detuvo en seco haciéndola que la mirara a los ojos.
-Cara de haber nacido ayer- contestó de mala gana
-¡Ay no tonta!- en ese preciso momento el teléfono de la rubia comenzó a sonar, salvando por el momento a Dul de la incómoda conversación con Anahí.
-¿Aló?
-Hola Annie, ¿cómo estás?- preguntó del otro lado del teléfono deprimido
-Vamos camino a la U, ¿sucede algo? ¿Estás bien? Te escucho deprimido- lo interrogó sumamente preocupada
-Mi abuela, Annie
-¿Qué pasó? ¿le sucedió algo malo?
-Se puso peor, me tendré que quedar unos días más en Monterrey, llamaba para avisarte y no preocuparte y para que le puedas comunicar a los demás chicos
-Lo lamento...- trató de consolarlo angustiada, su rostro había cambiado por completo y eso alarmó a Dulce, estaba demasiado pálida.
-Ahora tengo que colgar, ¿si? Estaremos en contacto, espero pronto poder estar allí contigo- respondió afligido
-Yo también lo espero, lo lamento demasiado, tu madre debe estar muy mal, mándale mis saludos a tu madre...
-En tu nombre... Adiós amor, nos veremos pronto, estamos comunicados eh
-Obvio, te amo gatito bebé
-Yo también te amo mucho gatita- se despidió y ambos colgaron.
-¿Qué sucede?- cuestionó Dulce con preocupación
-La abuela de Poncho se puso peor y se tendrá que quedar más días en Monterrey- dijo afligida
-Pero Annie... pues ya veras como se coloca mejor, tienes que estar tu bien así le puedes dar apoyo a Poncho- animándola en un corto abrazo, ya estaban llegando.
El día transcurrió bastante lento, entre una materia y otra. Anahí y Dulce no se despegaban ni por si acaso, siempre que una estaba mal, estaba la otra para apoyarla en todo lo que necesitara.
-¡Oh tengo mil llamadas perdidas de mi tía!
-¿Habrá pasado algo?- preguntó la rubia
-No lo sé, creo que me iré pronto a casa hoy
-Si, es mejor puede que haya pasado algo
-Este si...
-¡Hola!- apareció Maite efusiva
-Hola May- saludaron ambas al mismo tiempo
-¿Y esas caras tan largas? ¿Sucedió algo?- preocupada
-La abuela de Poncho está peor y tendrá que estar más tiempo en Monterrey- contestó Annie cabizbaja
-Oh...¿Y tú Dulce?
-Mi tía me llamo un millón de veces y no me había dado cuenta, creo que puedo haber pasado algo o no sé
-Ojalá no haya pasado nada, no más tragedias
-Eso espero, pero no creo que haya sido algo malo ya que no ha seguido insistiendo- arrugando los labios
Entre varias asignaturas pudieron darle fin al extenso y pesado día.
-¿Vas a venir más tarde a la casa?- preguntó la rubia
-Eh yo creo, ahora iré rápido donde mi tía, ojalá no sea nada
-Bueno, nos vemos- después de eso cada una tomo un camino distinto hasta sus hogares.
Llegando a su casa diviso a un joven afuera de la casa, este tenía un bolso y estaba algo impaciente.
-¿Hola?
-¿Vives aquí? ¿Dulce?
-¿Te conozco?- preguntó curiosa
-No eso es imposible...
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¡Hola! Bueno este capítulo es el más forzado y corto que he escrito, me tarde un millón ya que no tenía ni una gotita de inspiración y extrañamente me inspiré con la otra historia en vez de esta, es extraño XD.
Aunque esta medio fome, latero, etc, los próximos serán más interesantes c;
¿Quién será el joven misterioso del final? O_o
Saludos, espero sus comentarios con lo que quieren que pasé tal vez así me inspire ;c
No se olviden de comentar, odio a los fantasmas que con suerte votan :/ no me animan a seguir :c
Y por último no me había dado cuenta que este es el primer capítulo del 2016 ya que el otro lo subí el 2015 XD y un último aviso, pienso terminar con esta historia a fines de Enero.
~(^-^)~~(^-^)~
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Aún Hay Algo (2da Temporada)
FanfictionDespués de un tiempo, de una nueva y fortalecida relación, el pasado vuelve lamentablemente, ¿Pero que será mas fuerte: El Amor que se tienen o Los Problemas? Esta en la Segunda Temporada de "Aún Hay Algo" te recomiendo leer la primera antes de que...