SÍ, CAPITÁN

26

Secretos y pesadillas

(Narra Ryan)

- Bueno, les dejo descansar. Cualquier cosa pueden llamarme por el walkie - se despidió la doctora y cerró la puerta con una sonrisa.

El Capitán y yo nos miramos sin saber qué decir durante un rato. Habían pasado tantas cosas.. después también estaba el hecho de que nos habíamos besado dos veces, y no se él, pero yo vaya que lo había disfrutado.

- Oye , Heming , ¿ te encuentras bien ?

- Sí, solo es un poco de hipotermia - me encogí de hombros.

- No me refería físicamente.. esos.. ¿ no te hicieron nada no ?

Lo miré en silencio durante unos segundos hasta que caí en lo que quería preguntar.

- ¡Ah! No te preocupes , aunque fue asqueroso que me ese tío me manoseara no pasó nada más- él asintió aliviado.

- Quiero.. quiero darte las gracias por salvarme. Arriesgaste tu vida por mi.

- ¿ Salvarte ? - sonreí ampliamente. Más bien él lo había hecho - hiciste todo tú solito. Y salvarte a ti implica salvar a todo el barco. Además , tu también has impedido que muriera , sino ahora estaría flotando en el mar.

Recordé las sensaciones que produjeron sus manos sobre mi cintura y sus labios sobre los míos antes de desmayarme.

- Bueno, pero si tú no me .. - hizo una pausa y se revolvió el pelo, cosa que me di cuenta que hacía solo cuando estaba nervioso - si no me hubieras pasado la navaja no hubieramos salido de allí.

Él también pareció recordar el beso, porque se sonrojó un poco. Me pareció muy tierno y sorprendente que un soldado como él lo hiciera.

- Será mejor que durmamos un poco , Ryan. Buenas noches.

- Buenas noches , Cap - bostecé y me dormí enseguida.

(...)

- ¡ NO ! -grité aterrorizada y abrí los ojos.Me puse el pelo detrás de las orejas con un suspiro.

¿ Cuando iba a dejar de tener estas pesadillas ?

Me refugié bajo las sábanas y comencé a sollozar.

¿ No era suficiente con haberlo vivido ? ¿ Es que acaso tenía que recordarlo una , y otra , y otra vez ?

- ¿ Ryan ?

Me sorbí la nariz para contestar.

- ¿ Si ? ¿ Necesitas que te coja algo ?

- No. ¿ Estás llorando ?

No contesté, porque era obvio que lo estaba haciendo, y sería una tontería negarlo.

- Ven, Heming, súbete a mi cama- me llamó señalando un sitio a su lado.

Negué con la cabeza.

- Vamos, no me hagas moverme y que se me salten otra vez los puntos .

- Eso es extorsión - susurré enfuruñada y me senté en la cama del Capitán.

- ¿ Por qué lloras , Ryan ? - me secó las lágrimas con su pulgar y aparté mi mirada de la suya algo incómoda - ¿ Es.. es por tus padres ?

¿ Debía contarle ? Nunca se lo había dicho a nadie , y la verdad , creo que me aliviaría compartir mi dolor con alguien. ¿ Pero con mi Capitán ?

- ¿ Qué sabes de ellos ?

- Bueno.. leí en tu informe que no están vivos y .. que los asesinaron- me miró temeroso de hacerme daño con sus palabras.

Me eché a llorar otra vez, enterrando mi cara entre mis rodillas para que no pudiera verme.

- Ryan - suspiró él y me abrazó. Aún llorando , me tiré en sus brazos. Necesitaba sentir que estaba conmigo - Cuidado con mis puntos .

Me aparté rápidamente y me mordí el labio .

- Lo siento, ¿ te he hecho daño ?

- Tranquila , estoy bien. ¿ Tienes pesadillas ? - me acarició la mejilla y me sentí como si estuviera de nuevo delante de mi padre.

- Todos los días - confesé agachando la cabeza.

- Yo también las tengo, no tienes que avergonzarte - me alzó la barbilla y le miré a los ojos.

- Yo...

- No te preocupes Ryan, no tienes que contármelo. Ya lo harás cuando estés preparada - me dedicó una gran sonrisa - Duerme un poco, yo te cubro - me guiñó un ojo y solté una risita entre las lágrimas.

Me metí debajo de las sábanas y me arrebujé en las mantas haciéndome una bolita.

Me estremecí cuando sentí su cuerpo acomodándose al mío, abrazándome por la espalda.

- Relájate - susurró en mi oído divertido , lo que provocó otro escalofrío.

Durante unos minutos me limité a sentir su respiración entrecortada en mi oreja ,y su brazo alrededor de mi cintura, mientras mantenía los ojos abiertos. No quería volver a dormirme.

- No parecía un asesinato - suspiré y comencé a relatar. Estaba siendo muy tierno conmigo y se lo debía. Noté que se incorporó un poco para escuchar mejor - Mis padres entraron a trompicones en mi cuarto mientras que yo tosía descontroladamente. El humo me impedía respirar. Cuando abrimos la puerta de mi habitación el fuego ya se había extendido por todo el piso. Era imposible que se propagara tan rápido, apenas acabábamos de verlo encenderse y ya estaba toda la casa en llamas. Aquello era una tortura. No podíamos saltar por la ventana, había siete pisos hacia abajo. Lo único que podíamos hacer era ver como el fuego avanzaba hacia nosotros, esperar nuestra muerte. Desesperado, mi padre me ordenó que me acurrucara en el suelo en la esquina del dormitorio. Asustada , obedecí enseguida. Cuando comprendí lo que pretendían hacer , me revolví asustada chillando. Mi madre me susurró que si uno de nosotros iba a sobrevivir, sería yo. Lloré durante todo el incendio ,e-escuhando los gritos de mis p-padres. Se estaban q-quemando v-v.. vivos. Mientras yo me refugiaba debajo de ellos , ellos estaban muriendo de una forma horrible para impedir que el fuego me abrasara. Haciendo una pared entre el fuego y yo. Cuando los bomberos llegaron era demasiado tarde. Recuerdo que chillé horrorizada y caí de rodillas llorando a cántaros. L-los ví, Capitán, los vi chamuscados delante de mi. Sus rostros p-petrificados en gritos de dolor.. Se hizo una inspección de la casa cuando el fuego se extinguió y encontraron un par de garrafas de petróleo vacías en la cocina. Mi padre era abogado, uno muy bueno, por lo que tenía muchos enemigos. Se interrogó a un tipo al que metió en la cárcel la mayor parte de su vida y que acababa de salir, pero no encontraron pruebas para culparle.

- G-gracias por contármelo, Heming , se que te ha costado mucho, y te lo agradezco - acarició mi cabello.

- Por favor no me trates con lástima. No lo soportaría, me recordaría lo que pasó constantemente - le pedí.

- Claro, no te preocupes. Y ahora será mejor que descanses - dejó un beso en mi frente y me abrazó- Conmigo estás a salvo.