Piratas del Caribe [Kristanna, Euginzel, jelsa, Mericcup]

Cap 31-Desalmado chupasangre

<<<Merida>>

Me vestí con lo que creí que sería lo adecuado para la ocasión.

- Te ves preciosa..- dijo Hiccup con sus pantalones puestos pero sin camisa.

Me había puesto un vestido largo color esmeralda oscuro que me quedaba muy bien, es bastante viejo pero aun así me agrada.
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- Gracias... Es largo pero me gusta igual..-dije y el dio un largo suspiro.

- ok... Estoy listo..- dijo y se sentó mas derecho.

- Ok.. Algún lugar especial donde te gustaría?- pregunte y el negó.
Me senté junto a el y le di un beso en los labios.- Muy bien.. Avísame cuando estés listo.. Solo relájate..- digo algo nerviosa y acerque mi cabeza a su cuello. No lo veo apetitoso, ya no.

- Mh.. Dame la mano..- dijo y se la di..- ok ahora..- dijo y lo mordí en el cuello. El efecto droga comenzaba pero me detuve y retire mi boca.- AGH!!! DIOS QUEMA...- dijo Hiccup mientras se retorcía.

- Lo sé Hiccup.. Lo se..- dije cerrando mis ojos pero aun así reteniéndolo bajo mis brazos.

- HAZ QUE PARE MER!!!- grita pero no puedo.

- No puedo Hicc..- dije derramando una lagrima.

- DIOSSSSS!!!- dijo y le di un beso para callarlo pero algo húmedo por que el estaba llorando.

- Resiste Hiccup..- digo y el me empuja y yo lo suelto y caigo al suelo.
Respiraba agitado sobre la cama aun destrozada.

Su piel se tornaba blanca helada desde la mordedura hasta los pies lentamente, las manchas de su piel desaparecían, su pelo brillaba mas, sus músculos se marcaban y me asustaba un poco.. El podría ser mas fuerte que yo y además de que me dobla el tamaño.

- Hiccup?- pregunte ya que el respiraba agitado y se voltea suficientemente rápido como para que a penas lo viera y se cae de la cama.
Veo sus ojos, son rojos y cambiantes como los míos.

- Mer.. - dice después de parpadear varias veces.- Que es...?- dice pero su frase murió, abrió sus ojos y se toco la garganta respirando cada vez mas fuerte.

- Tienes que cazar...- digo pero el sale disparado del camarote.
Salgo corriendo tras el y veo como se abalanza sobre un marinero y lo devora.

- Que pasa? Hiccup.. Que estas haciendo con ese chico?!- y lo peor que podría pasar, Astrid se puso frente a el e Hiccup no podía verla de ninguna forma como un humano, solo veía su cuello y su sangre.

- No Hiccup.. Concéntrate...-digo pero ella no comprende. Hiccup no saca la vista de Astrid y suelta el cuerpo del chico que había devorado y lo hecha al mar.

- Hicc.. Me estas asustando que tienes?- dice y yo me interpongo.

- Corre Astrid..- digo ropa eteniendo a Hiccup y ella me hace caso.
O DIOS ES MUY FUERTE... LOS NEÓFITOS SON DUROS...- Hiccup basta! Puedo ayudarte.. Concéntrate en otra cosa.. Concéntrate en mi... Mírame a los ojos- digo pero el aun forcejea.-
alto!- digo y el me mira a los ojos.- Eso.. Ves.. Estoy aquí.. Bebe un poco de mi sangre.. Te dará saciedad.. Pero se suave.. - le dije y el mordió mi muñeca sin cuidado..- Ya Hiccup suelta..- dije pero no paraba..- ya!- dije y paró.

- Lo siento Mer... No quiero hacerlo pero... Mi cuerpo lo hace..- dijo y beso mi muñeca limpiando las marcas.

- No te preocupes, pronto cuerpo y mente serán uno solo.- digo.- sabes lo que me ayuda a mi?- preguntó y el niega.- Sex... Y ahora que eres un vampiro no te cansaras jamás... Lo eh hecho con vampiros pero... Debo admitir que no me gusta no poder moverme luego..- dije y le brillaron los ojos.
Me cargo y corrió hasta nuestra habitación.

- Hicc.. Ten cuidado..- dije con algo de miedo y me levante el vestido con delicadeza pero el rompio mi ropa interior.

-Quiero hacerlo.. Fuerte.. - dijo y le quite su pantalón.

- Hace tanto tiempo que esperaba por eso...- dije cerrando mis ojos y escuche un gruñido de Hiccup que me penetro tan fuerte que ambos terminamos contra la pared de atrás.- Ah.. Ah.. Bájale.. Un poco..- dije por que a penas podía verlo y mi cuerpo se estaba adaptando lentamente a su miembro neófito.. El se movía tan rápido que sentí que me iba a desgarrar- Hicc por favor.. Mas lento..- dije aun que comencé a acompañar sus movimientos, ya comenzaba a gustarme y mucho.. Era tan rápido como mi cuerpo necesitaba que fuera... Entonces me movía tan rápido como el.

- Hiccup... Que te sucedió? Por que tuve que huir de ti?- dice Astrid entrando en la habitación.
Hiccup estaba de espaldas a ella pero yo no pare de moverme. Sentí como Hicc bajaba su ritmo y olía el cuello de Astrid.

- ASTRID SAL DE AQUÍ!- dije enojada.

- Hicc.. Tan rápido me olvidaste como para revolcarte con ella?- dijo eh Hiccup salió de adentro mío y se paró frente a Astrid, ella examinó su pene y trago.- Por que tienes el pene mas grande?- preguntó y yo me estremecí.

- Sal de aquí Astrid, Merida es mi esposa, puedo hacerlo con ella todo lo que quiera y soy un vampiro, es peligroso que te me acerques...- dijo pero ella no se movió- LARGO!- y con ese "largo" extendió su mano y la puerta se cerró con Astrid fuera.

- Guau.. Tienes el poder de la telequinesia- dije pero antes de que pudiera terminar mi frase Hiccup ya estaba penetrándome de nuevo.

Hiccup sujeto mis manos y me vio a los ojos.
- Te amo..- dice y tenemos un orgasmo pero el aun sigue y sigue y yo sigo y sigo.
En un momento dado, el se para y me penetra contra la pared.- Dime que eres mía.. Dímelo..- dijo entrecortado.

- Soy tuya.. Toda tuya..- dije y seguía penetrándome después de varios orgasmos.

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-Mer..- dice el echado en el suelo y yo en su pecho, la habitación es un desastre.- no nos cansamos... Como vamos a parar?- dice y yo sonrío pero luego hago una mueca de dolor. El me destapa y observa la poca sangre que cae de mi vagina.

- Lo siento..- digo con la cabeza baja- es que debo acostumbrarme al nuevo ritmo..- digo y el me abraza despacio.

- El que debe lamentarlo soy yo.. No eres un juguete, me deje llevar perdón.. Lo siento tanto linda... Esto de ser vampiro es difícil..-dijo y me beso en la frente.

- Lo sé... Por un tiempo serás incontrolable y hasta mas fuerte que yo.. Pero luego te calmaras y tendrás más control pero la sed nunca parara.. Aprenderás a vivir con ella...- dije y el cerro los ojos.

- Me amarías aun que fuera un desalmado chupasangre?- preguntó y yo me reí.

- Tanto como tu me amas siendo una desalmada chupasangre.