Charlotte.

Capítulo 7: ¿Charlotte?

"Oh vamos, ¿porque mejor no te callas?"

—¡Mia!—Grito Lucas.

—¿Qué?—Solté con más rabia de la que pretendía.

—Hey, cálmate—Lucas me dio una sonrisa retorcida.

—¿Qué quieres?—Tenia la mandíbula tan apretada que creo que me romperé los dientes. 

—¿Qué te paso?—Me respondió con otra pregunta. Lo fulmine.

—No es de tu incumbencia, así que ahora aparte de mi camino—Lo deje con la palabra en la boca y salí a buscar mi siguiente clase.

Esa era uno de mis tantos problemas cuando me enojaba con mis hermanos, siempre la persona que me hable se lleva toda mi rabia, que no pude descargar con mis hermanos, lo que sucedía después es que me sentía como mierda. Luego me ira a disculpar con Lucas. Prometí en mi cabeza, por ahora lo mejor era no hablar con él o con nadie.

Entre a clase sentándome en un lugar vacío alejado de todos. Naike entró con una chica rubia. Me buscó con la mirada, agache la cabeza para que no me viera, sé que es tonto, pero bueno no quería hablar con nadie.

—Aquí estas—Exclamó Naike, alzándome la cabeza. —Mia te presento a Ally, y Ally te presentó a Mia.

Le tendí la mano de mala gana. No me importaba conocer más personas. No les miento que quisiera tener amigas, pero las mejores amigas se cuentan todo, y no podría ver como ellas me abren su corazón contándome sus verdades y mentiras mientras que yo, ni les digo mi  verdadero nombre.

Ella trago duró.

—Un gusto—Ally ni me miro a los ojos. Me sentía mal por haberle hecho ese desplante.

—Hey—Llame su atención—Lo siento—Ally abrió los ojos.

—No-o-o importa—Miró hacia la puerta que iba entrando Cooper hablando animadamente con unos amigos, seguido de Connor que hablaba con Lucas, ambos se veían tensos.

Vi de reojo que Ally miraba a Cooper y se sonrojaba.

—¡Esto debe de ser una broma!—Exclamé— ¿Cómo les puede gustar mis hermanos? – Estaba indignada—Estoy comenzando a creer que quieren ser mis amigas solo por mis hermanos.

—Tus hermanos son guapos Mia—Naike se mordió el labio inferior—Y eso no es cierto, yo no sabía que Connor era tu hermano.

—Yo-o-o—Ella parecía un chihuahua de tanto que temblaba—Naike me trajo yo estaba enferma, por eso no me habías visto  en clase y cuando pasaban lista nadie decía "Presente"—Ni por enterada yo que cada vez que llamaban tu nombre nadie respondía—pensé.

El día trascurrió normal, hasta la última hora de clase que tocaba deporte.

Un profesor regordete de baja estatura, sin cabello y con gafas nos recibió  con un silbato en la  boca.

—¡ESTA CLASE CORREREMOS CUARENTA VUELTAS A LA CANCHA!—Gritó con una sonrisa malvada. Se dio vuela para sentarse en una silla con abanico pequeño, tomo del suelo una botella de agua. Todos nos quedemos quietos hasta que el sonido del silbado nos sobre exalto. –COMIENZEN MANADA DE FLOJOS—Lo mire furiosa estaba haciendo un calor aquí en Sídney y él pretendía que corriéramos.

Cuando iba por la vuelta veinte me quería dar algo, mire a mi alrededor mis hermanos estaban tranquilos como si no estuvieran corriendo. Mire al profesor estaba sentando en su silla con el abanico mientras leía una revista.

—Así es todo el tiempo—Lucas habló, no era difícil seguirme el ritmo así que fácilmente se puso alado mío.

—Lo odio—Solté. Nada más lo mire de reojo—Lucas—Llame su atención.