Deseos extravagantes.

Capitulo 8: fiesta de despedida.

Acababa de tener una charla horrorosa, asi que me hice a la idea de que ya borraria esa etapa de mi vida, humillar a los chicos en el usuario falso no era de mis ideas profesionales. Asi que me hice a la idea de olvidarme de esas estupideces.

Ya alegrada por salir con mis amigos, decidi ducharme, cuando sali del baño me quede atonita, ya que nisiquiera habia pensado en que ponerme. Decidi buscar varios vestidos y los puse en mi cama, todos cortos y sensuales, llamaban mucho la atencion.

Queria ponerme el rojo, el azul, el negro, el amarillo, en especifico, todos.

Pero el que mas me encantaba era el negro, asi que lo elegi. Entre tantos tacones decidi elegir uno al azar, porque el vestido negro que tenia puesto me iba a quedar con cualquier tipo de tacones, ya sea el color, bla bla.

Elegi unos amarillos muy altos, hermosos, y con mi estatura me quedaban super sensuales. Solo la idea de tener que aguantarlos me ponia mal, pero total.

Busque todos mis maquillajes. Tampoco es que queria lucir extravagante, ni una payasa menos. Solo me alargue las pestañas un poco, puse rubor en mis mejillas y un pintalabios rojo muy llamativo.

La verdad es que parecia una diva.

Ya lista, paso a recogerme mi mejor amiga Melanie en su coche. Llevaba puesto un vestido muy ajustado que le quedaba hermoso, ademas con unas hermosas y encantadoras plataformas doradas.

-Que mejor amiga mas bella tengo.

Y yo le respondi, no pero que va, si tu pareces una presentadora de esas millonarias. Estas hermosa Mel.

Ya de tantos alagos, decidimos marcharnos, ibamos directo a una discoteca muy famosa, siempre nos dejaban entrar, el guardia era nuestro vecino, Ja!. Una vez que llegamos, ya habian llegado nuestros amigos, nos esperaban con ansias.

-Crei que no llegarian nunca. Par de inpuntuales.

Nosotras solo nos miramos y reimos a carcajadas. Habia bebidas, y como buenos amigos de la bebida, bebimos y bebimos, pero con un control por supuesto, si mi padre supiese de mis pecados, me mataria por completo.

Bailamos hasta mas no poder, fue una noche increible, llena de locos, especial, adorable, nunca la podre olvidar, la musica resonaba tan alto que estaba a punto de estallar, pero aun asi queria que sonara mas y mas alto.

Me encantaba ir de fiestas en fiestas, pero Robert hasta eso me arruino. Cada vez que estoy en una fiesta me recuerdo de el y no se porque no puedo evitarlo si ya paso mucho tiempo. Aun creo que tengo sentimientos encontrados por el, pero me moriria de solo pensarlo.

En un cerrar y abrir de ojos, ya estaba en mi casa, la noche paso demaciado rapido que ni cuenta me di.. Dios mio ya era demaciado tarde, las 4:03 am y tenia que levantarme a las 7:00 am .. No lograria dormir siquiera un poco, pero por lo menos me la pase de lo mejor.