Capítulo 7

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Tengo que confesar que la propuesta de Jade me parece una gran idea, pese a que no haya sido mía. Nunca suelo admitirlo cuando otros tienen la razón, pero, visto lo visto, ella es de las mías y no lo podía negar. Mi problema ahora es hasta qué punto algo así podría llevarse a cabo.

A simple vista (y en general también), puedo parecer una persona realmente fría. Mi duda es si de verdad sería capaz de llegar a hacer algo así. No sé hasta dónde llegan mis límites, aunque, por suerte o por desgracia, probablemente van incluso más allá de lo que Jade tiene en mente. Lo más asqueroso es que no siento ni una pizca de vergüenza por ello.

—Entonces ¿lo harías? —sus ojos marrones me examinan, llenos de brillo y emoción.

Frunzo el ceño. Qué narices. En pocos segundos, una gran sonrisa se dibuja en mis labios. Claro que vuelvo a ser la misma insensible de siempre.

—Está claro que sí. Cueste lo que cueste —aseguro, ampliamente sonriente—. Quizás habría que hablar con Alexa lo antes posible.

—Después de comer, le contamos el plan —me guiña un ojo, triunfante.

—Genial.

Recibo unas palmaditas en la espalda por parte de mi compañera de venganza, a lo que yo le correspondo con una sonrisa cómplice. Si esos niñatos creen que pueden reírse de mí e irse de rositas, se van a enterar.

~~

La propuesta de Emily hoy como actividad de grupo ha sido otro de sus estúpidos "juegos". Efectivamente, la originalidad de esta monitora brilla por su ausencia. Es más, simplemente consiste en que alguien diga una palabra que represente un sentimiento o sensación, por así decirlo, y que la persona que éste o ésta elija, hable sobre algo que le recuerde a ello.

—¿Es obligatorio hablar sobre nuestras intimidades? Hay personas a las que nos importa nuestra privacidad... —protesta la rubia de ayer llamada Hilary, con esa voz tan irritante y molesta.

—Bueno, si lo prefieres, no cuentes nada tuyo. Habla sobre alguien cercano a ti o que tú conozcas —contesta Emily, en un tono mucho más amable que el de la chica—. Bien, empezamos. ¿Caleb, te importa...?

Su hermano asiente y veo que se vuelve hacia mí. Joder...

—Admiración. Y va para... Jade —espeta él... Y menos mal.

Respiro aliviada y medio sonriendo, nerviosa. Ahora espero con ansias la respuesta de mi nueva amiga.

—Fácil me lo has puesto —se echa el pelo hacia atrás, muy segura, dejando bien claro que no le causa ningún trabajo contestar—. Bien, la admiración me recuerda a un concierto al que fui. Al de Green Day, mi banda favorita en todo el mundo. Hasta tengo una foto con ellos. Esa noche fue la mejor de mi vida, lo juro.

Si ahora mismo me preguntaran sobre algo que me recuerde a la admiración, sin duda les hablaría sobre Jade. Apenas llevo un día en este sitio, pero tengo que admitir lo mucho que me gusta su pasión a la hora de hablar sobre las cosas que le gustan. Es increíble la forma en que sus ojos brillan cuando está emocionada por algo.

—Evelyn... —me dice Jade, divertida, muy cerca de mi oído. De hecho, lo hace en un tono no muy bajo, por lo que doy un pequeño brinco.

—Capulla... —susurro, aunque reconozco que me divierte.

—¿Qué me dices si te hablo sobre la traición?

De todas las sensaciones y sentimientos habidos y por haber, Jade tenía que elegir eso. JUSTAMENTE eso. Lo que más presente tengo aunque también de lo que menos quiero hablar. Estupendo...

Campamento de Verano© (Verano #1) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora