Frankenstein

Prólogo

Marco histórico:

                                           Inglaterra finales del siglo XVIII y principios del XIX

El círculo más íntimo en el que vivió Mary Godwin Sheley no fue uno cualquiera. Sus padres y amigos más cercanos formaban parte de la intelectualidad inglesa de finales del siglo XVIII y principios del XIX. Su madre, Mary Wollstonecraft, era partidaria de la revolución francesa y además de los derechos del hombre, abogaba por los derechos de la mujer. Ella fue el vivo ejemplo de la incipiente liberación femenina, pues además, estaba a favor del amor libre y en contra de cualquier opresión que se ejerciera sobre el individuo.

El padre de Mary, William Godwin, filosofo, pensador, creía en la libertad del hombre para elegir, asimismo, estaba en contra de la opresión que ejercía el Estado y no creía en la revolución para llegar a un cambio en la sociedad sino que el hombre cambia con mejoras educativas y económicas llegando, quizá de esta manera, a prescindir del gobierno para él que encarnaba corrupción.

El entorno en la familia Godwin estaba conformado también por el poeta romántico Coleridge, el pensador Thomas Paine, así como los poetas Percy Busshe Shelley, que como sabemos llegaría a ser amante y después esposo de la autora frankenstein, y el famoso poeta Lord Byron.

Los sucesos más trascendentes de aquellos años y que influyeron profundamente en el pensamiento, la política y el arte, fueron la independencia de Estados Unidos así como la revolución francesa. Como se sabe, los ideales de libertad, fraternidad e igualdad tuvieron gran influencia a nivel mundial. En América fueron factores muy importantes que catalizaron las guerras de independencia de las colonias españolas: " . . .fue una fase de cambios radicales no sólo en los ámbitos del arte y la literatura. En esa época, además, también se vieron sacudidas las estructuras políticas y sociales tradicionales en numerosos países europeos, así como en sudamericano, por medio de abundantes y sangrientas guerras de liberación".¹

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¹Ahrends Günter,"las ideas políticas de los románticos ingleses" en Ilustración y romanticismo: 1700-1830, Madrid,Akal, 1992, p. 253.

A diferencia de Francia, en Inglaterra los cambios en cuanto a las estructuras políticas y sociales ocurrieron de forma paulatina, gracias año cual se dio satisfacción a las demandad moderadas y liberales. Esto trajo como resultado que las instituciones políticas de aquel país se mantuvieran intactas aunque modificadas, deprimiéndose únicamente las actitudes radicales.

Por otra parte, el ambiente económico en la Gran Bretaña se transformaba. Fue el primer país en el que ocurrió la Revolución Industrial en la cual los medios de producción en serie se mecanizaron y se pudo abastecer la gran demanda debida al crecimiento demográfico y a la anexión de nuevas colonias. Sin embargo. El proletariado crecía y vivía en condiciones infrahumanas, además no estar representado en el parlamento.

A esta situación se agregó la creciente amenaza militar francesa que cernía sobre Inglaterra y que está pudo sortear con éxito gracias a la calidad de su marina y al eficaz abastecimiento que tenía debido a los logros de la revolución industrial.
Con el tiempo pudo afianzarse como una de las grandes potencias mundiales y ponerse en camino directo hacia el imperialismo.

Pero al terminar este conflicto la situación inglesa se desequilibro, aumentaron los. Impuestos y el desempleo crecía sin remedio, además, la situación de los más pobres empeoraba. Esto ocasionó disturbios entre los obreros, uno de ellos fue la matanza de Peterloo, en donde murieron 11 personas y alrededor de 400 resultaron heridas.

Mientras tanto, intelectuales, políticos y artistas criticaban decisiones en el parlamento del país, por ejemplo, los grandes sectores proletarios que habían ido surgiendo a la par de la revolución industrial. La situación cambio con la aparición de la llamada "Reform Bill" (1832), considerada por muchos un gran punto de partida para la democratización de la sociedad. Esta reforma hizo posible la representación en el parlamento de todo el espectro social. Hubo enormes cambios como el derecho a votar para grandes sectores de población masculina de clase media y se otorgó una amplia igualdad e derechos a los católicos y disidentes.

El aire de libertad que se respiraba se veía alimentado por el surgimiento del movimiento cultural conocido como romanticismo. Los románticos ingleses, por ejemplo, abogaban por la libertad del individuo en todos los órdenes, quizá cada uno de manera diferente, pero creían en la libertad para elegir, no en las situaciones impuestas y opresivas, como por ejemplo la religión o el matrimonio.

Sin embargo, aunque muchos tuvieron actitudes radicales al principio y creían en la revolución francesa, después se desencantaron por los excesos de los jacobinos y su reino del terror, así como por las ansias expansionistas de Napoleón. Así surgió su renovado amor patriótico.

Por otra parte, los románticos apreciaban más una forma de vida sencilla con el fin de un mayor desarrollo personal que la compleja sociedad moderna. Estaban en contra de una confianza ilimitada en el progreso científico y tecnológico.

En fin, en la principal fuerza de esta época la construyó la idea del individuo y de que estés encontrar en libertad para elegir en todos los terrenos: en el social; en el religioso, político y económico. Los grandes ideales de la humanidad, basados en el tema de la revolución francesa, hacían vibrar los corazones románticos por un estado ideal en donde un nuevo comienzo con altas posibilidades de felicidad para el hombre fuera posible. Una Edad de Oro se constituía como la gran esperanza.