Five Times Stiles And Malia Found Each Other [Stalia]

VI

Lo primero que le vino a la mente a Stiles la mañana siguiente, cuando sonó la alarma fue lo brillante que era la habitación (lo que debería ser, tiene enormes ventanas), y el segundo pensamiento, nublado por un dolor de cabeza fuerte, era "¿Qué demonios?"

La alarma hizo que Malia abriera los ojos inmediatamente, pero al principio no podía ver mucho. Ella tuvo que parpadear un par de veces y cuando las cosas se pusieron en relieve su primer pensamiento fue "¿Qué fue lo que paso?".

Y luego, su siguiente pensamiento, cuando se sentaron en la cama fue "Oh, mierda".

"Oh, mierda." Ellos dijeron, apenas un susurro, para darse cuenta de lo que había sucedido. Una vez más.

"¿Qué demonios...?" Stiles se quejó y Malia rozó sus dedos por el pelo, sabiendo muy bien que estaba sucio.

"¿No te acuerdas?" replicó ella, tratando de recordar algo de la noche pasada.

"Oh, sí recuerdo." Él respondió.

"Tuvimos sexo de nuevo." Ella se quejó. Él lo recordó. "Toda la noche."

Se miraron el uno al otro y Stiles asintió.

"Debemos dejar de beber tanto." Dijo.

"Deberíamos." Ella estuvo de acuerdo y se sonrió al verlo. "Buenos días."

Malia se acerca a él, su mano derecha apoyada en su pecho desnudo, el anillo en su dedo brillando con su pequeña luz azul.

"Buenos días."

Estaban en silencio por unos momentos cuando algo llamó la atención de Malia y ella rápidamente se puso de pie.

"Oh, mierda. Skylar." Le informó a Stiles y le lanzó su boxeador mientras ella tropezó a poner su propia ropa interior.

"¿Es que acaso ella viene?" Preguntó con los ojos abiertos, vistiéndose demasiado rápido y recogiendo las sabanas de su cama, que estaban en el suelo.

"Sí. ¿Qué hora es?" Responde Malia con rapidez.

"Hm..." Sabía que hora era, pero estaba tan distraído que tuvo que mirar el reloj de nuevo. "Falta poco para las ocho."

Ella exhaló, bajando el dobladillo de la camiseta que acababa de ponerse - camiseta de Stiles- y asintió.

"Está bien. Nos queda un montón de tiempo."

"¿Qué?"

Pero al siguiente segundo ella estaba bajo las sábanas con él, justo antes de escuchar la llamada y los pasos de una niña que se acerca.

"¡Papá!..." Skylar llama. "¡Es sábado, papá!" en un movimiento repentino, ella estaba de pie en la puerta, su pelo oscuro estaba suelto y sucio, su pijama púrpura tenían pasta de dientes en el frente y pudieron ver el diente que acababa de caer por su gran sonrisa. "¿Mami?"

"Hola, cariño." Malia saludó con una amplia sonrisa y abrió los brazos. Era tan bueno verla, sobre todo cuando ella pensó que no lo haría.

"¡Mami!"

La niña corrió y saltó a los brazos de Malia; la madre celebra a su hija en un abrazo cariñoso, la besó en la cara y la hizo reír.

"¡Oh, Dios mío, mírate! ¿Tu abuelo eligió tu pijama?" Skylar asintió y Malia tomó la cara con las dos manos. "¿El diente finalmente cayó?"

La niña asintió con entusiasmo y sonrió, mostrando la brecha donde su diente debería estar.

"Pensé que no vendrías hoy, mamá." Sky dijo con un pequeño puchero y Stiles sonrió. Tal madre, tal hija.