Capítulo 9: ¿Celos?

3.6K 249 156
                                    

Alguien me tomó por detrás y me arrastró a un automóvil a la fuerza. No pude defenderme, pues el tipo era más fuerte que yo. No pude huir de ahí y me enojé conmigo mismo pero a la vez no dejaba de sentir miedo.

El hombre subió rápido al asiento del conductor y empezó a manejar acelerando de inmediato.

Yo aún ni procesaba lo sucedido.

—O-oye ¿Qui-quién mierda eres? ¡D-dejame ir! —exclame enojado y asustado a la vez pero no iba a demostrarle mi miedo a ese sujeto.

—Tranquilo Takahashi, si me obedeces no saldrás herido —rió sarcásticamente y de inmediato me tense.

Esa voz... ¡No puede ser!

—¡¿I-ijuuin-sensei?!, e-es usted ¿cierto? —volteó a verme con una de sus típicas sonrisas burlonas que más odio.

—¿Esperabas alguien más? —su sonrisa seguía en su lugar. Parece que le divierte verme asustado.

Mi corazón estaba palpitando tan rápido que pense que se saldría de mi pecho o me daria un paro cardiaco, lo que sucediera primero. Me encontraba tan asustado en ese momento; él es alguien de cuidado y capaz de muchas cosas.

Nii-chan ¿Qué hago para salir de esto?

Él seguía tan concentrado manejado y yo pensaba en las futuras torturas que tenía para mi.

El miedo se hacia cada vez más presente.

Ya no aguanto”.

—¿Por qué Ijuuin-sensei? —murmuré casi inaudible pero procurando que él lo haya escuchado.

—Perdón Takahashi ¿Dijiste algo? —preguntó extrañado Ijuuin sin quitar los ojos de la carretera.

Había llegado a mi limite. A punto de caer en las lágrimas. Es mucho para mí.

¿Seré capaz de soportar todo este dolor?

¿Por qué? ¿por qué Ijuuin-sensei? ¿Por qué me hace esto? Déjeme ir por favor, juro que no diré nada pero por favor termine esta tortura conmigo —las lágrimas que intentaba reprimir rodaron por mis mejillas.

—¿De que tortura hablas? Si esto es amor.

¿En serio? ¡¿Esta bromeando?!

—¡¿Cómo puede decir semejante estupidez?! —le grité. Después de ese grito frenó el coche bruscamente.

Me di un golpe con el asiento del copiloto. Ijuuin volteo hacia la parte de atrás y me vio a los ojos con esa expresión a la que le tenía tanto miedo y me tomó de la cara con una sola mano. Me apretó tan fuerte que pensé que sus dedos se marcarían en mi rostro.

—Agh —sólo pude gemir de dolor mientras trataba de quitar su mano de encima. Fue inútil.

¿O él es muy fuerte o yo soy un debilucho?

—No me vengas con esas tonterías Takahashi, tú te lo buscaste.

¿Eh?

—¿Qué? ¿Por que dice eso?
S-suelteme por favor.

Después de eso no me dijo nada, me soltó y siguió su camino.

Obsesión.  [En Edición]Where stories live. Discover now