Niall nos sumerge y el agua está caliente, claro como no, el agua ya está más que contaminada por la gente a nuestro alrededor.
-Deberíamos ir a la parte más fría para bajar la calentura.
-¿Quieres bajar la calentura? - Niall me mira haciendo puchero y yo sonrío pícara.
-No ese calentura, bebé.
-Aaah, ya - chasquea y me besa mientras se aleja de la gente.
Cuando ya estamos donde es, me dice:- Te quiero.
Por un momento me tenso pero o sea que ridícula soy, esto es un nuevo comienzo, ¿no? Me relajo y no me quejo.
Le sonrio para él y le respondo de la misma manera para recibir una sonrisa bella para mi y, continuamos con la sesión de besos.
Una vez fuera del agua Niall me dejó tocar tierra, cosa que yo no quería, y bueno, de todas maneras salimos del agua porque según el rubio yo peso mucho y tenía principios de calambre y ¡no, mijo! Mejor prevenir que lamentar había dicho yo.
-Iré a buscar un trago, ¿quieres?
Que pregunta.
-¿Iras así? -me mural de arriba a abajo. Se pega a mi cuerpo como un chicle y hace un puchero -. No quiero.
-No me pasará nada. Lo prometo.
-Yo creo en ti, se que eres fuerte porque tienes al más bello y lo que no quiero es separarte de nuevo de una pelea.
-Sí me busca, me encuentra. Y si no, le lanzo el coñazo que me debe. Que por tu culpa, nunca le di. Y si llega a pasar, cosa que creo, ni se te ocurra tocarme porque creeré que estas muy del lado de ella.- advertí.
Él sólo se limitó a hacer un saludo militar-. Sí, mi comandante. Yo iré por la ropa, señor.
-Regalarme un beso para la suerte, ven aquí.
Nos damos un beso y cada quien se va por un camino diferente, y Dios, sí que duele.
Me acerco a la barra y veo a la gente pasandole dinero a los cartineros. ¿CÓMO ES QUE YA NO ES "BARRA LIBRE"? El bartender me conoce y aún así me extendió la mano ¿Creen ustedes qué me dejaran la bebida gratis? No, señores. Tenemos que pagar. Vieron que mi mamá se pasa.
Necesito buscar dinero para por lo menos comprar una botella.
Me acerco a los chicos, Niall ya está ahí y me pasa mi vestido. Me lo coloco y acomodo los botones inferiores.
-¿Alguien tiene dinero aquí para que me presten para comprar una botella? Porque ya barra libre no hay.
-Harry fue a dejar las cosas en el carro, anda a ver si lo alcanzas.
-No quiero ir sola, Arriane, vamos.
-Si no fui con Harry porque me daba flojera. -la odio.
-Vámonos, Eleanor.
-Vamos pues.
Caminamos lo más rápido posible y no vimos a Harry en el camino.
De repente Eleanor toma mi brazo fuertemente y me señala hacia una pareja besándose, no cualquier pareja, no. Había una Elena muy entretenida manoseado a un Harry muy pero muy sorprendido.
-Aah, no. Esto si que no. -le digo a una Eleanor asqueada.
Me dirigí con grandes zancadas hacia ellos y el pasivo de mierda de Harry cuando por fin me ve abre más los ojos, y aún así ni siquiera hace el intento de quitársela de encima, o sea, es como obvio, ¿para qué estoy yo?
Agarro a Elena por sus extensiones baratas y la quito de encima. Mi mano hace un puño de cabello y lo apreto demasiado que creo que le quitare el cuero cabelludo. Levanto su cara y aprovecho para darle un coñazo en la nariz mientras sus manos estan ocupadas tratando de quitar mi mano de su cabello, manos las cuales no tardaron en agarrar y tapar su nariz sangrante.
Quito mi mano de su cabello porque esto de jaladera de cabello no es lo mío, coñazos puros sí.
-¿A caso no te bastó con mi rubio?
-Ni tan tuyo, porque ya fue mío. -quita sus manos llenas de sangre de su cara y lanza una sonrisa sangrienta ladeada.
-Claro que nunca es suficiente verdad -miro a Harry quien mira la escena como un estúpido.
-Nunca. -como quisiera quitarle esa sonrisa de la cara. Lo juro. Estoy en parte feliz de haber sido yo quien la encontró y no Arriane.
-Lo que yo sé es que simplemente no te cansaras hasta que hayas provocado a todos mis amigos. Lo que te convierte en una desagradable perra.
-Ja, mira quien lo dice.
-Nunca con dos del mismo grupo, para que sepas.
Le pico un ojo y me voy hacia ella.
Lanzo un golpe y este alcanza su mejilla haciendo que la plástica voltee su cara, así como me hizo ella a mi. Ella se cuadra con sus garras de gata salvaje y se viene contra mi con ellas extendidas y daña los primeros tres botones de mi vestido y con la mano libre clava sus garras en mi pecho, y yo amo mi pecho. Siento como sus uñas se entierran más profundo y va dejando caminos de sangre. Me arde, pero no le pararé a eso. "Porque ya vendrán cosas mejores". Ella quiere alcanzar mi cara pero no se le va a dar, o sí, porque me lanzó un golpe y este dio en mi labio inferior y lo partió.
Encuentra la manera de tumbarme y adivinen donde están clavadas las las piedras. Ella imita mi táctica ¿saben? Está encima de mi y aún mano en mi cuello y la otra en forma de puño.
-¿Qué es lo que se siente que te roben algo realmente preciado?
-Yo no te he quitado nada a ti. No seas ridícula. En cambio, tú -sonreí con desprecio-. Sí.
Ella sonríe victoriosa pero mientras ella está distraída diciendo las estupideces más estúpidas que he escuchado en mi vida. Yo alzó mis pies y estos la alcanzan por cuello y hombros y la lanzan hacia atrás. Yo quedó sentada en su pecho y hago mi acción favorita y que ella casi robó. Aprieto su garganta con mucha más fuerza que en Oops!.
-¿Qué te pude haber quitado yo? Siquiera recuerdo haberte conocido antes del cumpleaños de Niall, en la discoteca. Solté la presión de su garganta para que pudiera hablar.
-Me quitaste a mi papá -dijo dejando de toser y con lágrimas formando en sus ojos. Y volvió a repetir la oración con voz entrecortada -. Me quitaste a mi papá.
Yo no recuerdo haberme acostado con un viejo, no, que asco.
-¿Y quién mierda es tu papá?
Alejo mis manos de ella y es porque quiero saber más de lo que trata de decir. Ahora ella está llorano en silencio tapando su cara con sus manos y yo me estoy impaciente porque quiero jodidamente saber, pero se que no hablará porque esta mas que ocupada. Me bajo de ella.
-Cuando quieras decir qué. Tú sabes que nos volveremos a encontrar y quiero saber más a fondo quien mierda es tu papá y que tengo que ver.
-¡AQUÍ YA NO HAY MÁS NADA QUE VER ASÍ QUE PUEDEN DEJAR DE CHISMOSEAR!
Los espectadores, quienes nunca faltan, se fueran dispersando poco a poco del lugar.
Me acerco a los muchachos y beso a Niall-. Gracias por no detenerme.
-Mejor prevenir que lamentar, ¿no?
Me sonrió pero la sonrisa se le borró al mirar mi pecho.
-Vamos a curarte. - deje que tomara mi mano y me llevara al carro multiusos de Liam porque el espacio de atención médica estaría demás que ocupada.
Yo verdaderamente quiero saber que es lo que se trae entre manos porque eso de que yo le quite a su papá no me cuadra para nada. A demás, con alcohol en mi organismo no puedo pensar bien.
Mientras que estoy sentada en el asiento del copiloto con Niall entre mis piernas y el está concentrado en curar mis heridas. Yo trato de calmar a Arriane.
-Calmate, de todos modos eso te pasa por no acompañarme -le saco la lengua -. A demás, Elena es una perversa y eso fue demasiado para el pasivo de Harry, -y del debilucho de Niall. Pero eso si no lo digo.
-Pero él debió de detenerla, ¿sabes? -dice la pequeña cruzandose de brazos y mirando feo a Harry.
-¿Y para que crees que estaba yo? Verga no sí la inservible pues -miro a Eleanor-. Sin ofender.
Le lanzo un beso.
-Ni también inservible porque te busque público, y no cualquier público, sí no uno que te hacía barra.
-Chocala pues - choqué cinco.
-Listo. - Niall besó mi frente.
-Gracias. Y ahora ¡VOLVAMOS A LA FIESTA! - me entusiasmo yo y los entusiasmo a ellos porque eso es mentira que la fiesta se acabará por un simple conflicto. Y menos si es por obra de la casa.
Para cuando amaneció estabamos dispersos en el porche, todos estábamos más que borrachos. Eso de estar ligando es demasiado jodido.
Yo no puedo siquiera levantarme, mi cabeza gira y gira. Pero no me importaba porque tengo a mi pegoste al lado y esos es totalmente bueno. Ahora a combatir con la resaca y con el último día de las fiestas.
CASA DEL LAGO PART II
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