Y solo se me ocurre amarte (Kaisoo)

Perdedor

JongIn miraba a Kyungsoo, y si externamente demostraba la gracia que le hacia ver a Kyungsoo desesperado mintiendole a su novio por teléfono, esto no se comparaba con lo que pasan dentro de su cabeza, era toda una hazaña no estar tirado en el suelo rodando y abrazando su estómago por la risa.

- La verdad es que no quería preocuparte pero mi mamá ha estado enferma y me ha dicho que pase la noche en su departa...

Su sonrisa desapareció en cuanto escuchó la palabra " mamá " de la boca de Kyungsoo y su piel se erizo cuando escuchó la voz de esa mujer al otro lado de la línea.

JongIn la noche anterior había recordado con inocencia la primera vez que Kyungsoo había sido suyo casi 10 años atrás, durante sus días de preparatoria, pero no había recordado con detalle esa noche hasta después de escuchar la voz de esa mujer al otro lado de la línea.

Miró al Kyungsoo del presente sentado frente a él y recorrió cada centímetro de su cuerpo semidesnudo con la mirada, recordando las manchas moradas, los razguños, la sangre brotando de heridas que se asomaban por doquier, se recordaba a si mismo llorando por un Kyungsoo que fingía que nada le dolía, sintiendo el dolor del otro, besando cada herida, cada golpe con la esperanza de que el otro le diera su dolor para cargarlo por él, mientras preguntaba ¿Quien? JongIn recordaba el cuerpo de Kyungsoo temblar entre sus brazos mientras decía "mamá".

JongIn miraba sin mirar a Kyungsoo estaba tan perdido en sus recuerdos que no notó que Kyungsoo había terminado su llamada segundos atrás.

-¿Tengo algo en mi cara? - preguntó Kyungsoo en tono defensivo sacando a JongIn de sus pensamientos - ¿Acaso dormimos juntos? - dijo con sarcasmo sin recordar en la situación en la que se encontraba, JongIn lo intuyó y una pequeña risa salió de sus labios.

-Entonces realmente no recuerdas, es una lástima - le encantaba ver el rostro de Kyungsoo que se esforzaba por recordar ¿Tanto le atormentaba?

-No paso nada ¿verdad? Sólo quieres burlarte de mi

El pelirrojo se levantó tomando su ropa que estaba doblada junto a la cama y comenzó a vestirse, JongIn miro como dejaba tirado y olvidado su preciado recuerdo, aquella camisa blanca y supo que Kyungsoo no la había reconocido, quizá para él no había sido importante.

Se giro y fue hasta la cocina a poner café, minutos después Kyungsoo nuevamente estaba frente a él.

- No paso nada - dijo afirmando.

- Piensa lo que quieras - respondió JongIn, haciendo que el otro se desesperará. -Hey, ¿No quieres desayunar? -JongIn deseó cambiar el tema- aprendí a hacer unas crepas de zarzamora, fresa y nutella en el tiempo que viví en Francia, después de todo es tu cumpleaños y ...

-Tienes razón es mi cumpleaños y deseo estar con personas, que me quieren y a quienes quiero y que nunca me han hecho daño.

-¿Cómo tu mamá? - Ni JongIn comprendió el porqué había preguntado eso, la cara de Kyungsoo palideció se acercó a pasos gigantados hasta Jongin, y lo confrontó

-no eres nadie para decir eso, no me conoces, no soy él mismo de antes y ella tampoco, esperó no volver a verlo en nuestras vidas señor Kim.

JongIn no supo cuando sucedió pero Kyungsoo había desaparecido de su casa, el café se quemaba en la cafetera y el sol desaparecía al oeste.

Parte del efecto de Kyungsoo era ese, hacerlos sentir como un perdedor.

-O-

Kyungsoo subió al primer taxi que había encontrado, mordía su labio inferior con tanta fuerza que pronto sintió el sabor de su sangre en la boca.