CAPÍTULO 5✅.

1.3K 92 3
                                    

 LUCIA:

11 de septiembre 2005.

Así de rápido llegamos nuevamente al domingo, día de ir a la iglesia y dar gracias a Dios por lo que tenemos y tratar de buscar desahogarnos de nuestros problemas.

Hoy los vería nuevamente a ellos, también a Elías y a Salvador. No podía negar que ambos me estaban cayendo bien, son unos jóvenes extraordinarios y divertidos a la hora de platicar.

Pero no podía evitar sentir algo extraño cuando veía a Elías, él tenía algo que no sabía bien aún, pero sé qué hace que mi cuerpo y pensamientos reaccionan de una manera distinta por él.

¿Eso era bueno o malo? Realmente no lo sabía porque nunca he estado enamorada o algo por estilo por alguien.

Aunque sí puedo intuir que su amigo Salvador tiene cierto interés en mí, gracias Aarón, que me explico luego de haberle contado la extraña salida que tuve con ambos.

- Lucecita - dicen a mis espaldas.

Estaba frente al espejo terminando de arreglarme para ir a la iglesia, llevo puesto un vestido de mangas larga que cubría mis brazos y llega un poco más debajo de mis rodillas, también había optado por usar unas zapatillas y llevar mi me pelo suelto.

Me volteo para ver quién es y era mi mejor amigo Aarón que me miraba con una sonrisa.

-Sabes que no me gusta ese apodo – hago una mueca.

-Pues no podemos negar que eres como una pequeña luce cita – responde él riendo.

Ahora observo mejor a mi amigo de pies a cabeza, él está con una camisa de vestir negra con un pantalón del mismo color y sus zapatos negros.

Su cabello está desordenado como siempre se ve guapo mi mejor amigo. Él es moreno, un poco más oscuro que yo, mi piel es morena blanca, sus ojos son de un color marrón oscuro y su cabello es de color negro.

- Sé que soy demasiado guapo, pero deja de mirarme tanto, pareces una acosadora – comenta con una sonrisa.

Ahora voy directo a darle un abrazo, sus abrazos son lo mejor, siempre me he sentido segura cada vez que Aarón me abraza, pues, es mi mejor amigo, nunca me deja sola

- Aarón, ya suéltame que me quedo sin aire - digo entre risas cuando ya siento que ha pasado mucho tiempo del abrazo.

Él me suelta y me ve con una bonita sonrisa aún más grande que la anterior.

- ¿Te he dicho lo bonita que eres Lucia? - dice él y pasó su mano por mi mejilla acariciándola.

Veo un brillo en su mirada, que no sabía explicarlo, era diferente su mirada en este momento, una que no conocía y que no sé qué significa.

- Chicos, ya es hora de Irnos - dice mi tía Lía, entro a mi habitación y rompiendo el momento íntimo.

Aarón quita su mano de mi mejilla, y voltea para ver a mi tía con una pequeña sonrisa.

- Lianna - dice él – Siempre tan oportuna nunca tocas la puerta ni nada – cuestiona.

Mi tía solo lo mira.

- Aarón - dice ella – No hay necesidad de tocarla – responde con una sonrisa.

Ellos siempre discutían por cualquier cosita, están próximos a empezar una discusión, pero se nos haría tarde para hacerlo.

- Ok no empiecen porque es momento de irnos – les comento a ambos.

Ambos no dicen nada, solo se dan miradas matadoras, salgo de mi habitación dejándolos solo, cuando estoy en la parte baja de mi casa.

Rotos por Dentro # 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora