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—Es el amigo de Sungmin ¿Qué hace aquí? —Heechul había visto como Siwon de pronto volteaba hacia otro lado, y su mayor sorpresa fue ver al chico que Sungmin tanto ocultaba.
—¿Lo conoces? —preguntó el otro sin apartar la vista de Kyuhyun.
—Sí, lo he visto antes con uno de mis amigos. Parece que te interesas mucho en él. —Hee no era tonto, esos dos se miraban de una manera extraña, sobre todo el castaño.
Los dos vieron como Kyuhyun se acercó a ellos, cuando estuvo a escaso un metro de distancia, se detuvo. Heechul observó al chico, si sus suposiciones eran ciertas y salía con Sungmin, no tenía nada que hacer en ese lugar, además, estaba arruinando su conquista.
—¿Dónde está Sungmin? —Kyuhyun deseó que Heechul se hubiera mantenido callado, no podía negarlo pues lo descubriría.
—No lo sé, supongo que rezando en su casa —respondió, intentando ser indiferente al tema.
—¿Sungmin es el chico del otro día? Pareces demasiado interesado en él, tú no sueles pasar tiempo con otros, a parte de tu amiguito Hyukjae —no supo interpretar ese momento en que Siwon se detuvo a pensar un momento, si cometía un error lo descubriría.
—Sungmin ha quedado en el pasado, tengo demasiado de dónde escoger —dijo el íncubo mirando las piernas de algunas mujeres al pasar.
De pronto, Heechul saltó de la silla poniendo fuertemente ambas manos en la mesita. Vio su expresión, lucía molesto por su respuesta. Era más que obvio que defendería a su amigo, pero Kyuhyun no tenía tiempo para discutir, necesitaba dejar que Siwon pensara que no tenía a nadie por el momento, salir de ahí y llevar a Sungmin a su casa.
—A Sungmin le gustas, no puedes tratarlo como si no tuviera sentimientos. Es la primera vez que esa monja se interesa verdaderamente en alguien, no dejaré que lo arruines. —Kyuhyun dio unos pasos cerca de Heechul, sonrió de manera arrogante y le susurró algo al oído. Hee volteó a verlo bastante sorprendido, pero entonces Kyuhyun le dio un ligero beso en los labios que lo dejó de piedra.
—No me interesa ese pequeño que no se deja hacer nada, tú en cambio pareces más candente. —Heechul hervía en coraje, y Siwon solo se limitó a observar—. Si necesitas un favor, pídemelo.
Le guiñó un ojo y sonrió. Mientras salía del burdel no perdió su sonrisa, una vez fuera caminó hacia la calle esperando encontrar a Hyuk y Sungmin escondidos cerca. La actuación le había quedado bien, esperaba que Siwon se tragara el cuento.
—Kyuhyun —lo llamó alguien. Vio a Hyukjae escondido detrás de un contenedor grande de basura, sus alas y cuernos habían vuelto. Sungmin salió detrás de él.
—¿Qué pasó?, ¿pudiste ver a Heechul? —Min parecía angustiado todavía.
—Él está bien, solo que no elige muy bien a sus compañías, estaba sentado con Choi Siwon. —Hyuk se sorprendió.
