Caparazón

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Las luces móviles, el olor a cigarrillo, mezclado con el de alcohol, inundaban el aire.
La música abombaba cualquier intento de conversación, que no fuera gritada.
Jamie estaba sujeta del brazo de Erin, esposada prácticamente, para que esta no escapara tras una conquista y la dejara a solas con el resto de la ronda que se dividia en otros sub grupos de al menos veinte personas.
Entre ellos, Joaquin, John, Serenity, Emmanuel y los demás escritores.
Luego estaban los de maquillaje, vestuario y efectos especiales.
Arriba, en la zona VIP, se encontraban Leon, Hanna, Misty, Yurem y sus multiples asistentes.
-Ve y habla con el.-Insistio Erin dándole un empujoncito hacia Emmanuel.
Jamie ojeo al joven, este hablaba a penas con sus amigos, mientras bebía sin parar.
De vez en cuando, sus ojos se cruzaban por unos segundos, pero se alejaban.
Ambos, se notaban tensos de estar cerca uno con el otro.
Desde arriba, del balcón VIP, Yurem estaba sobre la baranda que daba hacia los simples mortales.
Habia ubicado la ronda de sus compañeros, pero solo tenia ojos para una persona: Jamie.
Ella se acomodaba los lentes, o jugaba con su cabello.  A penas si sonreía. Parecia un pollito mojado, arrinconado y atemorizado por el caos del sitio.
Yurem dejo salir una sonrisa, cuando, animada por Erin dio un sorbo, arrugando su rostro de forma comica.
-¿Qué es lo que miras?-Pregunto Alex, apareciéndose como fantasma a su lado.
-Nada.-Miro a otra parte, fumando un poco. Incluso, le guiño el ojo a otra chica de abajo que lo miraba con deseo para disimular.
Desde abajo, Jamie vio al par de hombres que se creían superiores solo por ubicarse en un pizo arriba con sillones.
“Se creen la gran cosa”, pensó Jamie, encendiendo un cigarrillo.
Solo quito su mano del brazo de Erin por un segundo, para encender su vicio, cuando…
-¡¿ERIN?! ¡Maldita sea!-Musito Jamie enfadada. Su amiga se había perdido de su campo visual, cual Houdinni.

Un rato después, y con los pies destrozados, Jamie no había encontrado la manera de estar allí, sin sentirse una parte de la decoración.
Decidio que iria al baño y luego se marcharia, ya que al parecer nadie notaba su presencia.
Camino hacia la zona de la infinita fila de chicas, adentrándose como en medio de una selva de salvajes.
Un par de sujetos la miro de forma babosa, pero Jamie prefirió ignorar, aun temiendo por su vida, como si que la invitaran a bailar fuera lo peor que le hicieran. Ella odiaba bailar.
Cuando Jamie se acercaba a su meta, visualizando el final de la fila, una ola de personas la empujo sin aviso contra una de las paredes.
Choco contra otra persona, siendo aplastada por el grupo que violento de movia hacia ese lado.
Su mano era lo único que estaba en contra del desconocido, haciendo presion contra su pecho.
Alzo sus ojos hacia el, para encontrarse con la mirada tierna de Yurem.
Yurem, en cambio, pudo ver el terror en Jamie. Sin pensarlo mucho, cuando la presion disminuyo, Aprovecho para tomarla por la cintura y girarla ubicándola a ella contra la pared.
Jamie quedo algo aturdida, sin comprender, siendo acogida por el cuerpo de Yurem que actuaba como un caparazón.
Sus anchos brazos se  apoyaban contra la pared, haciendo fuerzas para no ir contra ella.
Jamie, desde abajo, miraba sin comprender como la cara de el de a momentos mostraba incomodidad por la fuerza que requería soportar las olas de empujones.
Varios minutos pasaron asi, hasta que al final, un par de seguridad sacaron a los sujetos que estaban peleando, volviendo a la gente a su circulación habitual.

¡NUNCA te daré mi autógrafo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora