Epilogo

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Epilogo

Un palido rostro,
una ventana
y un deseo de libertad.

Un joven soñador
admira un atardecer mas,
Siempre tuvo fascinación por ellos
aun antes de conocer a Renee

-realmente nunca creí que volvería al hospital-
Dice el joven, su cabellera rojiza ha perdido vida
Sin embargo sus ojos aun brillan...

La chica rubia sentada a su lado no contesto
sintio un pequeño dolor en su corazon,
pero no dejaria que su hermano menor,
notara su dolor.
Era algo de familia,
odiaban mostrase débiles y vulnerables.
En cambio la rubia miro alrededor
Tratando de buscar algo de que hablar....

-el que se encarga de decorar hospitales
Si que tiene mal gusto-

El chico río
-no todos tienen tu gusto Madelin,
aunque debo admitir, esas flores parecen muertas-
Dijo refiriéndose a un cuadro en particular.

-tengo una idea, traeré
una de las pinturas de mi galería,
Un poco de buen gusto te hara bien-

El joven solo suspiro,
era increíble como su hermana
lograba animarle el dia.
-¿como te has sentido Daniel?-
Finalmente hizo la pregunta de siempre

-como león encerrado-
Dijo con despecho
Nada odiaba mas que su encierro...

La joven se acerco a Daniel
y revolvio el cabello del chico
-oye! ¿Que haces?-

-despeinando al "león"-
Lo dijo en tono de broma,
Pero sus ojos estaban llenos de melancolía
-gracias por volver al tratamiento-

El suspiro, y se levanto de su asiento junto a la ventana,
-sabes que solo retraso lo inminente-

La rubia no perdió la compostura,
nuevamente miro alrededor
-no seria la primera vez, y no me refiero a ti-
Talves por sus años trabajando en la galería
que era capaz de ver arte en el caos,
Poso sus ojos sobre la foto de Renee y el atardecer.
-¿algún día me dirás el nombre de tu musa?-

Daniel tomo el marco de la foto y sonrio.
La misma noche que tomo la fotografía
la había revelado y guardado para si.
Cuando se interno en el hospital para tratar su cancer
la trajo consigo y la coloco junto a su cama.

-¿para que quieres saber el nombre?-

-para agradecerle por hacerte sonreír como idiota-

Las siguientes semanas fueron una
mezcla de días difíciles
días en que el joven no podía levantarse,
dias que no existian,
en los que Daniel pasaba dormido
Y dias "normales"
Cuando podia salir de su habitacion y recorrer el hospital.

-Buenos días Daniel- saludaba una enfermera morena
-¿que tal amanecimos hoy campeón?-

Daniel se limito a decir "bien"
Había sienta emoción escondida
Tras la repuesta
Hoy era un día único.
hoy volvería a casa,
Hoy le diría adiós a su jaula,
y regresaría a su hogar a esperar
volverse una estrella mas en el firmamento

-Madelin, quiero un favor-
Dijo el chico mientras su hermana empacaba sus cosas.
-crees que puedas llevarme a un lugar-

Al principio la rubia se negó,
Pero el pelirrojo insistió
-quiero despedirme de Renee-

Subió con dificultad

Por el elevador y las gradas que llevaban a la azotea

410 metros

Abrio la puerta con la leve esperanza de encontrase con Renee,
esperaba que por alguna loca idea del destino
ella estuviera en la azotea...
Pero no lo estaba...
Debía admitir que una parte de el
Estaba feliz que ella no estuviera, el no quería que lo viera así
Por eso decidió callarlo, por eso aunque se vio tentado a llamarle,
Jamas lo hizo....
Para que no lo viera débil, no lo viera morir.

Pasaron media hora ahi arriba,
El no quiso ver el atardecer desde ahi...
-quiero quedarme los sentimientos de mi ultimo atardecer con ella-

Esa noche, entrego la carta a su hermana....
Nunca supo si fue realmente amor a primera vista
O un simple azar del destino.
Daniel se mantuvo alegre,
Durante sus días en casa
Vivió la vida mas normal que pudo
hasta que no pudo mas...

El joven soñador por fin voló al cielo
A brillar en la noche, a competir contra el brillo de la ciudad,
Y a inspirar a otros soñadores.

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