El profesor pidió que tocara el violochelo.
No hace falta decir que mi cara estaba hirviendo.
Levante la mirada, y te vi.
Me sonreíste.
Ahora yo sonrío porque tu sonrisa es hermosa.
ESTÁS LEYENDO
Teclas y cuerdas
Short StoryChica conoce a chico, violonchelista conoce a pianista ¿Se enamorarán entre las armonías de las teclas y cuerdas?