Capítulo 1

4.8K 345 38
                                    




Apenas se abrieron las puertas del ascensor, caminé hasta el final del pasillo como el señor me lo había indicado, observé la puerta de mi derecha y me detuve.

34

Miré a mi alrededor sin saber qué hacer, no tenía ninguna llave y el señor de antes aún no llegaba.

—Solo ábrala —di un respingo al escuchar su voz detrás de mí. Me volteé y observé una ligera sonrisa en su rostro —Discúlpeme señorita, tengo el poder de la velocidad y de la invisibilidad.

Le respondí con una mueca y me giré para abrir la habitación.

Lo primero que noté fue una pequeña sala de estar con un plasma colgado, al fin algo de tecnología.

Seguí observando la habitación, las paredes eran de color turquesa y algunas eran de un color crema.

Le di espacio al señor para que entrara mis maletas y luego de que le diera las gracias, se fue y me dejó sola.

Seguí caminando hasta llegar a la cocina, aquí cada uno es independiente, así que uno mismo tiene que hacer todo.

Hice una mueca al recordar que yo no servía para la cocina, mi hermano era el experto.

Había una puerta que conducía al baño y otra que llevaba a mi dormitorio, entré a esta última y me tiré en la gran cama que se encontraba en el centro.

En vez de turquesa, las paredes ahora eran de un celeste pastel combinado con el crema de antes, había un pequeño balcón al frente de la cama y varios sillones con cojines verdes.

Era realmente lindo como lo habían decorado, me levanté y salí al balcón para respirar aire puro por un rato, se podía ver lo grande que era el edificio y la gran cantidad de balcones, confirmando el número de personas que vivían aquí, quizás unas 300 personas.

Me asomé al barandal e inhalé lo más fuerte que pude cerrando mis ojos.

— ¡Una trasladada! —gritaron desde lejos, abrí los ojos con curiosidad y miré hacia mi derecha.

En el balcón de al lado, un chico con una sonrisa de lado a lado me miró, corrió hacia el barandal y se trepó encima de el.

— ¡Ten cuidado! —le grité, entre balcón y balcón había un espacio bastante grande y si se caía, dudo que llegara a sobrevivir.

—Tranquila, tengo todo contro... —su pie izquierdo se resbaló y lo último que vi fue cómo se caía.

— ¡No! —salí corriendo hacia la esquina del balcón, miré abajo presa del pánico y busqué al chico, su cuerpo debería haber caído, pero no veía nada.

—Hola trasladada —me volteé hacia la voz del chico de antes, ahora se encontraba en mi balcón, columpiándose en una silla.

— ¡¿Qué fue eso?! ¡Casi me matas del susto! —él sonrió y se levantó de la silla.

—Primero que nada, no es una trasladada —de mi habitación salió el chico de antes, Fred —Es una infiltrada al igual que tú y yo.

— ¿Se puede saber qué hacías en mí habitación? —él me sonrió y se acercó al otro chico.

—Disculpa, lo estoy siguiendo —hizo un ademán con su cabeza señalándolo —Como puedes ver, él tiende a ser un poco suicida cuando no lo estoy viendo —asentí sabiendo a lo que se refería —Y debo ingeniármelas para cuidarlo.

—Soy Zack, mucho gusto compañera —me tendió la mano y me dedicó una sonrisa.

—Olivia —extendí mi mano —No puedo decir lo mismo por ahora —se la estreché y la solté casi de inmediato —Me pueden explicar, ¿Qué es eso de trasladada e infiltrada?

Long Way © (No todo está perdido)Where stories live. Discover now