En una consulta médica, Larry Flinch, un hombre de aspecto insignificante y rechoncho, explica sus síntomas al doctor:
-Verá, doctor, es un tanto complicado de relatar.
-Le escucho, señor Flinch. ¿Qué le ocurre exactamente?
-Pues, verá... el problema no soy yo exactamente.
-¿Qué quiere decir?
-El problema es mi reflejo, mi reflejo en el espejo.
-¿Su reflejo? ¿Y qué le ocurre a su reflejo?
-Sé que esto va a resultarle extraño, doctor, pero es la pura verdad.
-Adelante, soy todo oídos.
-Verá, cuando... cuando...
Larry es incapaz de continuar.
-Siga, no se apure -le anima el médico-. Aquí estamos usted y yo solos.
Larry se acomoda sobre su silla y trata de explicarse de nuevo:
-Verá, cuando me miro al espejo, mi reflejo... digamos que se comporta de un modo extraño.
-¿De un modo extraño? -pregunta perplejo el doctor.
-Sí; digamos que no hace lo que debería hacer.
-No le entiendo...
-Me refiero a que no hace las cosas que yo hago.
-¿Ah, no? ¿Y qué es lo que hace?
-A... a veces se me queda mirando fijamente... Otras se ríe y se burla de mí, y me intimida y hace aspavientos groseros. Otras veces coge mi navaja de afeitar y finge que se rebana el cuello... Cosas así de aterradoras, doctor.
El médico no sale de su asombro.
-¿Está usted seguro de lo que dice?
-Completamente, doctor. Ya le dije que iba a resultarle extraño.
-¿Y cuál cree que es la razón de que se comporte así?
-No lo sé, doctor; es como si se hubiese cansado de mí.
-¿Cansado de usted?
-Es lo que creo.
-Bien, echémosle un vistazo a su reflejo -El doctor revuelve en su escritorio y de un cajón extrae un espejo de mano que a continuación entrega a Larry-. Aquí tiene, mírese en él.
Larry obedece y se mira en el cristal.
-Dígame, ¿qué ve? -le pregunta el doctor.
-Pues... a mí mismo. Me veo a mí mismo reflejado, claro está.
El doctor se reclina sobre su mesa y observa el reflejo de su paciente en el espejo.
-¿Y bien? Yo no veo que haga nada raro.
-Ocurre... ocurre sólo cuando estoy a solas.
El médico se aparta de Larry y se arrellana en su sillón.
-Entiendo... -responde con incredulidad.
-¡Es la verdad! -confiesa Larry-. Mi reflejo me hace burla desde el otro lado.
-¿El otro lado? ¿Qué otro lado?
-Pues el otro lado del espejo, ya sabe.
-No sabía que hubiese un "otro lado."
-Debe de haberlo.
-Interesante.
-No me cree, ¿verdad?
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Delirios de Terror (relatos breves de misterio y horror)
Horror¡Delirios de terror! Relatos breves de terror sobrenatural. Situaciones angustiantes que se tornan reales en la piel de los protagonistas, y que provocan en el lector un intenso desasosiego tras serle abierta la puerta a una realidad distinta a la...