Nosotras también sabemos amar (♥#1)

Mejores amigos.

15) Mejores amigos.

-Chicos que guapos se ven ambos y especialmente juntos - dijo mamá bajando de las escaleras.

-Gracias Señora Andrea - exclamo David .

-Nos vamos - dije.

-Señorita espere un, momento, aun no te e dicho a que hora debes venir -

-Mami bella a que hora puedo llegar - pregunte tierna.

--O mi niña, puedes llegar mañana -

-Hablas enserio Mami - sonreí,que paso con mi madre esta muy cambiada.

Marcianos si se llevaron a la original y me dejaron a esta mamá, pues no se preocupen no me enojo .

-Claro que no , puedes llegar hasta las 4 de la mañana -

-Pero no se supone que las 4am ya es mañana -Pregunte

-Como sea - dijo - a por cierto David no le hagas nada a mi linda hija - frunció en ceño .

-Claro que no señora - se vio decepcionado.

¿Que ,me iba a hacer algo malo ?

No el jamas me haría algo malo.

-Esta bien haz le lo que quieras -

Abrí los ojos como platos.

Mi madre acaso esta autorizo, para que David me haga lo que quiera.

-mamá- la fulmine con la mira.

- No chicos tranquilos , si van a hacer algo solo ocupen medidas anticonceptivas , condones y etc de cosas que existen - sonrió mi madre.

Okey estoy roja como un tomate de la vergüenza .Que habla esta mujer,

-Enserio estoy joven para convertirme en abuel -

Si es suficiente .Tome la mano de David, abrí la puerta y lo saque de donde estaba mamá.

Dios enserio que le pasa, que clase de mamá, da permiso a su hija para que caiga en el pecado.

Pues si, solo la mía.

- Oye ojos bonitos, porque estas roja - dijo dulcemente.

-A yo .yo .es .q...u.ee- porque rayos no puedo articular una maldita palabra .

-Te ves muy tierna -me cogió los cachetes -Anda sube - abrió la puerta del auto .

Subí y me di una palmada en mi colita.

-Maldita sea David, vuelves a tocar ahí y no vives para contarlo,escuchaste -lo amenace .

- Oye pero fue mi mano - levanto su mano.

Como diga, cerró la puerta y subió en el puesto del piloto .

-Porque tan brava chiquita - dijo como un niño y me puso el cinturón de seguridad.

-No estoy brava - respondí.

-Si lo estas -

-No lo estoy -respondí un poco enojada, ahora si me estoy poniendo enojada.

Después de unos minutos llegamos a un restaurante, este estaba rodeado por mucho césped, flores, y un mirador.

Wwwo, muy hermoso.

Salimos del carro y el entrelazó nuestras manos.

Esas manos por Dios son tan suaves, como acariciar el algodón

Entramos y enseguida nos dieron una mesa, nos sentamos y ordenamos lazaña y una botella de champaña.

David empezó a contar varios chistes Dios como me vuelve tan locamente feliz , me empezó a dolor el estomago de cada acción de David y sus caras tan graciosas.