CAPITULO 1

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"Por halo de la princesa de Luna"


Serena Tsukino, estaba próxima a cumplir los 20 años con muchas responsabilidades ya que también se a punto en entrar a la Universidad para estudiar pediatría de esa forma sabría que le pasaría a la Pequeña Dama si se llegase a enfermar, aunque descubrió un amor inexplicable a los niños, recordando cuando cuido Alex, cuando apenas era una adolescente y detestaba a su príncipe. Por otro lado como siempre le daba pereza levantarse temprano, era una costumbre difícil de abandonar. También pasaba lo del compromiso con un doctor súper caballero y su futuro como Reina.

No se acordaba muchas cosas, pero sí de las veces en que Su Amado Darién y de sus mejores amigas las Sailor Scouts, estuvieron ahí para ella, salvándola del mal.

Sin saber que ese día cambiario todo

Después de la batalla con Sailor Galaxia las chicas vivían en perfecta armonía y la Tierra se encontraba en total paz.

Darién ya se había graduado de la Universidad, por ende no regreso a los Estados Unidos, como doctor se encontraba haciendo las prácticas en el hospital Central de Tokio y la pobre Serena se estaba debatiendo en lo que quería estudiar, bueno eso creían todos.

Era verano en Tokio por ende hacía mucho calor, todo era "playa y sol" Serena había decidido ir por unas sodas a la playa un viernes de Luna Nueva. Entretenida viendo el agua correr a los niños jugar extrañaba a la Pequeña Dama, de alguna manera.

—Hola preciosa —susurraron detrás de ella— Cabeza de Bombón — alguien dijo ella giró su cuerpo y grito

— ¡Haruka! —, abrazando a una joven con aspecto elegante pero varonil, pregunto llevaba un tiempo sin saber de sus Sailor Exteriores— ¿cómo estás?, ¿Dónde está Michiru? Y ¿Hotaru? Hace mucho que no se de ellas —, volteando, para buscar a la acompañante permanente de Sailor Urano.

—Bien, Bombón Michiru —, cuando iba a decir algo más, estrujo a Serena tratando de que aquella no le pegarán con un balón de playa.

Tomando el balón y desinflándolo de la furia que tenía.

—Perdón— dijo un joven alto cabello negro y ojos igualmente negros, traía unos lentes puestos, detrás de él llegaba una chica de ojos azul celeste y pelo negro — me llamo Son Gohan — ayudando a parar a Serena mientras que Haruka lo miraba con recelo intenso— ¿Te hice daño? —, pregunto a la princesa de la Luna, el chico miro a la joven de pelo negro y la presento — y ella es Videl mi prometida.

Videl, se colocó un poco celosa.

— ¡Hey!, ten más cuidado — dijo una de la Sailor más fuertes, empujando aquel chico, que se puso muy colorado, percibiendo el gran poder de ambas, Urano también sintió algo extraño en esos dos chicos —, muchacho— hablo despectivamente.

La joven Serena se organizó un poco y saludo.

—Mucho, gusto mi nombre es Serena Tsukino — presentándose y presentando a la Princesa de Urano —, y ella es mi amiga Haruka Tenou, tranquilos estoy bien — se acercó a Tenou —, no te ponga a pelear estoy bien — sonrió: de repente su teléfono sonó, el cual al revisar tenía una imagen de una rosa roja. — Luego hablamos Haruka — Aquella era una señal de que ya era hora de volver a casa. Despidiéndose del lugar —. Hasta luego.

Dejando a Gohan, Videl y Haruka en la playa.

Cuando salió de la playa sintió como alguien la veía, un poder fuerte, pero no le puso atención había muchas personas en la playa creyendo que era normal. Iba caminando, en ese momento se encontró con un deportivo color rojo el conductor abrió la ventana saludando así

—Se puede saber, ¿Para dónde va la princesa? — hablo un hombre de cabello negro y sonrisa perfecta, ella alzo una ceja volviendo a su falda playera con flores.

—Estoy esperando a mi príncipe — contesto Serena, el joven salió del auto rojo y le abrió la puerta que daba al asiento en el frente, pero antes entrar dijo ella.

—Te extrañe —le beso en la mejilla y entro al auto — ¿Cómo estás?

—Bien, aunque un poco cansado — le acaricio la cara—. Yo también te extrañe — se quedó en silencio —Usako y ¿al fin que decidiste? — Ya subidos en el auto — ¿qué vas a estudiar? — el futuro Rey se preocupaba demasiado por todo lo que se refería a su Neo Reina.

— No lo sé, no me preguntes eso — dijo ella un poco asustada, quería que fuera sorpresa — además estamos en vacaciones y quiero olvidar mis deberes — volvió hacer la misma niña de siempre aquella niña despreocupada loca, dulce junto amable. Esa que amaría por toda la eternidad.

—Serena, esto es serio — Darién, le miro con ternura — dentro de poco serás mayor de edad — se quedó en silencio al recordar que dentro de poco había un matrimonio. El suyo con la mujer que tanto amo, y amara hasta el fin de los tiempos — y solo me preocupo por tu bienestar.

Después de esto se quedaron en mudez, cosa rara en ella que siempre daba paso a la conversación Serena se encontraba nostálgica.

Pensaba en Rini y en las consecuencias que tendría su llegada.

Cuando arribaron a la casa de la familia Tsukino.

— ¿Estas enojada Serena? — Dijo el Darién, tan pronto como pudo — Te amo —Le noto dispersa y un tanto alejada.

—No — con una sonrisa gigante, cada ¡TE AMO! de Darién era una mariposa que nacía en el vientre de Serena, pero para que no notara lo que le afectaba cambio rápidamente de tema, aunque era difícil persuadir a su príncipe —pero quiero pasar mis últimas vacaciones con las chicas antes de que cada una siga su destino.

Ya sabes que todas se irán y yo me quedare aquí, para ti — Su más grande miedo era perder a sus amigas, pero su sueño infinito era compartir con su príncipe por toda la eternidad — y yo también AMO— con una sonrisa.

Lita se iba ir a para París a estudiar repostería y Mina también se iría con ella, aunque la Rubia Diosa del Amor estudiaría Diseño de Modas además con ella se vería más seguido. Amy presento pruebas a Yale y la aceptaron sin chistar. Y Rei para la sorpresa de todos acepto a Nicolás y estaban comprometidos. Además, como todos sabemos Haruka, Michiru y Hotaru vivían muy ocupadas en sus cosas sin contar a la Sailor hija de Cronos que no se veía con ellas desde hace mucho.

—Lo sabía, pero no te preocupes que ellas no se marcharían sin despedirse de su futura reina — sus ojos azules eran perfectos. Serena era su única familia desde que la conoció aprendiendo, a ver el mundo de colores.

—Bueno, me voy que ya mi papá abrió la puerta de la casa —le dio un suave beso en la boca. — y ya sabes cómo es él.

Recordó cuando Rini se escapó y debieron buscarla juntos, llevando a Darién a casa, ese lio jamás lo olvidaría...

Después de la batalla contra el Caos Darién le había pedido la mano de Serena, apresurándose antes de que una estrella fugaz volviera, adelantándose

—Acuérdate, que mañana desayunaras conmigo — siguió hablando el mientras abría el auto.

—Aja — afirmo con la cabeza, entro a la casa.

Subió al cuarto al terminar de comer y se quedó mirando la luna, que esa tarde apareció más rápido de lo normal, no perdió de vista a un chico de cabello verde, la miraba como si la siguiera, como si la conociera de antes.

—Es ella — dijo el chico ojos verdes, quedándose hipnotizado con la joven Serena — ella es la soberana de Luna, debo infórmale a Athenea

De repente aparece Luna, una belleza gatuna.

— ¿Cómo estuvo la playa? —, pregunto el animalito.

— ¿Te confieso algo? —, la rubia coloco uno de sus brazos en su escritorio —me siento vigilada.

— ¿Serena vigilada?

—Creo que algo va a pasar —, bostezo metiéndose en la cama.

—No te preocupes te cuidaremos — la gata estaba de buen humor.

—Gracias— sonrió quedándose dormida.

¿Donde estas? - ANIMEWhere stories live. Discover now