Capítulo 10: Namjin

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-Namjoon- Jin suspiró. Su respiración volviéndose turbia cada vez que los labios de Namjoon tocaban su piel. Hoy tenían la casa para ellos solos, gracias a Yoongi y Jimin.





Todo comenzó por la mañana, a las 7:00 am todos los miembros de Bangtan habían despertado de su sueño. Un día libre, por fin, aun así siendo inútil pues no estaban acostumbrados. La ocupada agenda había sido parte de ellos desde hace tanto tiempo que ahora el tiempo libre los sorprendía. Jin hizo el desayuno para todos, pero cuando el reloj marcó las ocho todo el mundo estaba ansioso de hacer algo, cualquier cosa.

Jin pensó que era un buen día para limpiar la casa, aunque los demás no estuvieron de acuerdo. Empezó con su dormitorio, recogiendo ropa sucia del suelo y aventándolas al cesto de la ropa. Encontró la sudadera de Hoseok debajo de la cama de Jungkook (¿Cómo había llegado eso ahí?, pensó) y procedió a echarlo a la cesta, pero en su lugar, la encontró atrapada en la cabeza de alguien más.

-¡Hey!-

-¡Oh, lo siento! No te vi- Jin rió cuando Namjoon hizo un mohín.

-¿Necesitas ayuda?- preguntó el menor.

-Sí, claro- Jin respondió.

-¿Qué hago?- Namjoon preguntó y Jin recordó que Namjoon no era realmente el tipo de persona que esté familiarizada con los quehaceres domésticos.

Así que respondió simplemente con un- Las camas, por favor-

Lo que sucedió después tomó a Jin con la guardia baja. Fue puesto de cara a Namjoon, y definitivamente vio una traviesa sonrisa pegada en el rostro de Namjoon antes de ser empujado más duramente y caer sobre la cama de Jungkook.

-Oww Namjoon, ¿qué...?-

Namjoon lo empujó más y lo besó, apretando sus dos muñecas, aplastándolas eficientemente en la cama. A Namjoon le encantaba tomar a Jin por sorpresa, le encantaba hacerlo incansablemente, y le encantaba ver a Jin nervioso bajo su control. Jin luchó para liberarse (porque las tareas son primero), pero en el momento en el que Namjoon rodó sus caderas contra Jin, el mayor perdió su fuerza casi de inmediato, permitiéndole una fácil victoria a Namjoon.

-La cama, entonces- Namjoon habló, susurrando contra las enrojecidas orejas de Jin.

-Namjoon, no deberíamos...-

-¡Hey chicos! Vamos a...Oh por Dios...- Yoongi se detuvo, arrepintiéndose de no tocar la puerta.

Jimin lo siguió un segundo más tarde, gritando con alegría- ¡Hyung! Iremos a...- antes de tener la misma reacción que Yoongi.

Jin quería desaparecer. Su rostro se ruborizó más que antes y esta no era una posición en la que le gustaría ser visto por sus dongsaengs (que no sea Namjoon, por supuesto). Pero Namjoon no se movió. Volvió la cabeza, pero no perdió su control sobre las muñecas de Jin- ¿Sí, que pasa, hyung?- Namjoon preguntó.

Aunque claro, Yoongi entendía. Jimin también.

-Ustedes dos...ugh. Vamos Jimin- Yoongi cerró la puerta, pero Namjoon vio las orejas de Jimin tornarse rojas antes de que la puerta se cerrara. Yoongi tendría que encargarse de "eso", y Yoongi se lo agradecería después. En menos de cinco minutos se hizo silencio en la casa y Namjoon supo que los otros se habían ido. No sabía lo que Yoongi les dijo (probablemente la verdad, porque nadie más entró al dormitorio después de que Yoongi saliera), pero no importaba, porque tenía algo más importante que manejar en este momento.

[Namjin] ¡Lo amas demasiado, hyung!Where stories live. Discover now