Jandel se levantó temprano ese viernes con una idea fija:
"Voy a dejar de pensar en Sammy."
Había pasado toda la noche en vela, dándole vueltas al mismo pensamiento, intentando convencerse de que lo que sentía no era lo que parecía. No podía serlo.
Tenía novia. Era heterosexual. Y, sobre todo, no sentía nada por Sammy.
O al menos, eso se repetía una y otra vez frente al espejo mientras se ponía la chaqueta.
—No pienso en él —murmuró—. No lo hago.
Su reflejo lo miró de vuelta con cara de burla.
🎈
El día en la universidad comenzó normal: grupos riendo, los pasillos llenos, Tito colándose entre mochilas (como si fuera un estudiante más).
Sammy, por su parte, estaba sentado en las escaleras del edificio principal, revisando unos apuntes con Cracky a su lado.
Y Jandel, por supuesto, los vio desde lejos.
Su mandíbula se tensó. No quería mirar. No quería, pero sus ojos lo traicionaban.
Cracky le decía algo a Sammy, y él reía con esa sonrisa que Jandel conocía bien, la que hacía que todos quisieran acercarse.
¿Por qué te importa?, se repitió en la cabeza. No te importa. No te importa.
Pero sí le importaba.
—Jandel —la voz de Judith, su novia, lo sacó de sus pensamientos. Se acercó sonriente, sujetando su mochila con una mano—. Te estaba buscando.
—Ah, hola, Judy —dijo él, disimulando el nerviosismo.
Ella se estiró para besarlo en la mejilla, y Jandel le devolvió el gesto con torpeza. Hacía días que no se veían mucho. En realidad, hacía días que él evitaba verla.
—¿Todo bien? —preguntó ella, mirándolo con dulzura—. Estás distraído últimamente.
—Sí, solo cansado.
—Hmm... pues hoy te toca descansar conmigo —dijo con una sonrisa—. Vamos a almorzar, ¿sí?
Jandel dudó un momento, pero luego asintió. Quizá era justo lo que necesitaba: distraerse, volver a su normalidad, dejar de pensar en Sammy y en esas sensaciones confusas que no lo dejaban en paz.
🎈
El almuerzo fue... normal.
Judith hablaba de su grupo de teatro, de sus amigas, de lo difícil que eran los ensayos.
Jandel asentía, sonreía de vez en cuando, pero su mente estaba en otro lado.
Cada vez que Judith se reía, él pensaba en cómo sonaba la risa de Sammy.
Cada vez que ella le tomaba la mano, imaginaba lo cálido que había sido el brazo de Sammy apoyado en su hombro aquella tarde.
Y cuando ella lo miraba, lo único que veía eran los ojos de él.
—¿Me estás escuchando? —preguntó Judith, arqueando una ceja.
—Sí, claro —mintió.
Ella suspiró. —Estás rarísimo últimamente, ¿eh?
Jandel quiso negarlo, pero sabía que era verdad.
Era raro.
Era él el que estaba cambiando, aunque no quería aceptarlo.
🎈
Después del almuerzo, Judith se despidió rápido porque tenía ensayo. Jandel se quedó solo en el campus, sin saber adónde ir.
Hasta que, por supuesto, el destino decidió jugar con él otra vez.
Sammy estaba en el jardín con Tito, tirado sobre el pasto, leyendo algo en su tablet. El gato dormía encima de su pecho.
El sol caía justo sobre él, y por un instante, Jandel se quedó quieto observando la escena.
ESTÁS LEYENDO
𝓗e's in My Dreams •Sammy x Jandel•
FanfictionSammy nunca fue de creer en esas cosas del destino, ni mucho menos en los sueños que parecen tan reales que duelen al despertar. Pero desde hace semanas, cada noche sueña con un chico. Nunca logra verle el rostro, pero recuerda su voz, su risa, el c...
