Invisible String

40 Desafio

—Que no era bueno para ti, que mi pasado no me permite estar a tu altura.

Naruto frunció el ceño, sacudiendo la cabeza.

—Eso no es cierto Sasuke. Mi padre no te diría eso. Tú eres perfecto para mí, ¿y sabes qué? Estoy seguro de que si te conociera de verdad, pensaría lo mismo.

Sasuke sonrió ante la firmeza de Naruto.

—Eso pensé yo, y por eso lo enfrenté.

—¿Y yo? —preguntó Naruto con curiosidad—¿Qué versión mía apareció?

—Una versión que decía que nunca me amaste, que todo esto era temporal, que solo querías probar cómo era estar conmigo.

Naruto lo miró horrorizado.
—¡Eso es una mentira! Jamás te diría algo así Sasuke.

—Lo sé. —Sasuke alzó una mano para acariciar su mejilla y calmarlo— Por eso supe que no eras tú. Nunca podrías mentirme de esa manera.

Naruto lo miró profundamente antes de volver a abrazarlo, esta vez con más fuerza.

—Siempre voy a estar contigo Sasuke. Pase lo que pase.

—Lo sé cielo —respondió Sasuke, con una sonrisa tranquila mientras seguían caminando juntos hacia la próxima prueba.

Mu sensei los esperaba tranquilamente cerca del río, con los brazos cruzados y una expresión serena. Al verlos llegar, se volvió hacia Sasuke con una leve sonrisa. 

—Pasaste esa prueba Sasuke. Estabas listo para superar tu pasado. En realidad, me sorprendiste. No dudaste ni un minuto al enfrentarte a tus mayores temores. 

Sasuke asintió, manteniendo su porte serio.

—Sabía que era algo que tenía que hacer. Ya no quiero seguir siendo prisionero de lo que fui. 

Naruto, siempre orgulloso de su pareja no tardó en intervenir.

—¡Claro que estaba listo, como siempre! Sasuke nunca decepciona —dijo colocando una mano en la espalda de Sasuke y dedicándole una sonrisa radiante. 

Mu sensei dejó escapar una ligera risa. 

—Tienes un buen compañero Sasuke. Ese apoyo constante fue clave para que llegaras hasta aquí. Ahora prepárate, porque la siguiente parte de tu entrenamiento será aún más desafiante. 

—Estoy listo —respondió Sasuke con determinación, mientras Naruto lo miraba con admiración y orgullo.

—La siguiente prueba no será contra el pasado, sino contra ti mismo Sasuke. Deberás enfrentarte a tu propio reflejo, tus propias dudas, y tus límites.

—¿Qué debo hacer?

—Cruzaremos el río —indicó Mu, señalando las aguas tranquilas— Allí comenzará el verdadero desafío.

—¡Eso suena emocionante! ¿Yo puedo ir también?—preguntó el rubio.

Mu negó con la cabeza.

—No esta vez Naruto. Esta es una prueba personal, tú puedes observar desde la orilla, pero no interferir.

Naruto infló las mejillas, fingiendo molestia.

—¡Tsk! Siempre me dejan fuera de las partes interesantes.

—Estaré bien zorrito. Espérame aquí.

Naruto lo miró con algo de preocupación, pero al final asintió, confiando plenamente en él.

—Bien, pero si tardas mucho, me meteré a buscarte.

Sasuke sonrió ligeramente antes de seguir a Mu sensei hacia la orilla del río, preparándose mentalmente para lo que estaba por venir.