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cuando los padres de jungkook mueren en un accidente automovilístico, ni su familia paterna ni su familia materna querían quedarse con él. eran lo suficientemente empáticos para darle unas palabras de apoyo, pero no para darle un hogar, el amor y la felicidad que sus padres se llevaron.

la discusión del hogar de jungkook dió lugar el mismo día del funeral, todos rechazaban de manera no tan discreta a la idea de tener a jungkook en su casa, pero una amiga de la infancia de su madre le hizo el gran favor de dejarlo vivir con ella.

al principio todo fue muy bien hasta que el gato de la señora rompió un jarrón y ella creyó fervientemente que el culpable del daño fue jungkook por más que él intentara explicarle, por lo que empezó a tratar mal al muchacho sin motivo alguno.

nunca llegó al maltrato físico, lo más que llegaba a tocarlo era a empujarlo levemente o agarrarle el pelo, pero estas cosas no sucedían tan frecuentemente como sus gritos, que eran diarios y prácticamente a toda hora.

"— ¡eres un inútil bueno para nada!".

"— ¡estúpido niño, malnacido, inservible!".

"— ¡vete a tu cuarto, no quiero ver tu sucia cara!".

"— ¡ojalá nunca te hubiera dejado vivir conmigo, malagradecido!".

cosas como esas eran las cosas que tenía que soportar jungkook. sobra decir que lloraba todas las noches, deseando que sus padres volvieran de la muerte para llevárselo de allí.

y bueno, sus padres no aparecieron, pero sí lo hizo taehyung. taehyung es el hijo del anterior matrimonio del padre de jungkook. los niños no crecieron juntos pero sí se vieron muchas veces y se llevaban bien. siempre que su padre salía con ambos, terminaban jugando hasta caer rendidos a pesar de la diferencia de edad de siete años entre ellos.

taehyung estaba en el ejército cuando la noticia de que su padre y su madrasta estaban muertos le fue dada. la noticia lo devastó, por supuesto, pero tenía la tranquilidad de que al menos una persona había acogido al chico. grande fue su sorpresa cuando un mes después también le llegaron noticias de que los vecinos habían escuchado el abuso verbal y ahora el muchacho de tan solo dieciséis años había quedado sin un hogar, de nuevo.

es por esto que no pensó absolutamente nada cuando armó su maleta y dejó el ejército para ir a cuidar de su hermano pequeño. nunca creyó que se encontraría en una situación como esta con tan solo veintitrés años, pero tendría que afrontarlo y ser fuerte para que jungkook pudiera serlo también.

los vecinos, una familia de cinco, fueron amables con jungkook y lo dejaron pasar la noche, hasta que al día siguiente llegó taehyung por él y se fueron al hogar que antes era suyo.

fue incómodo al principio, ya que la última vez que se vieron fue cuando la familia le dió un adiós a taehyung antes de que se fuera a servir voluntariamente cuando este tenía dieciocho, pero poco a poco fueron congeniando y conociéndose de nuevo, y el contacto físico se volvió el estándar después de algunos meses de convivencia.

eran lo suficientemente cercanos como para que taehyung se tomara la libertad de darle nalgadas a jungkook cuando quisiera, o dormir juntos y abrazados con sus piernas entrelazadas. la gente en la calle incluso los confundían con una pareja muy a menudo.

"— mejor, así nadie toca a mí hermanito." había dicho taehyung alguna vez a sus amigos cuando estos comentaron lo extrañamente cerca que se mantenían.

y todo fue bien, hasta que taehyung de un momento a otro simplemente se alejó de jungkook. empezó a evitarlo y hacer horas extras sin ninguna necesidad en el trabajo con el objetivo de ver a su hermano lo menos posible, y es por eso que jungkook le está reclamando ahora.