Un programador solitario, encuentra en una IA holográfica más que líneas de programación: descubre un amor inesperado que desafía la realidad.
- Boss, ¿crees que soy real?, ¿lo nuestro es real?.
- Noeul, si puedo sentirlo, entonces lo es.
Entre líne...
En uno de sus tantos intentos de recuperar a Noeul.
[Transcripción recuperada de la terminal - usuario: boss.28]
La habitación olía a polvo y ansiedad. No había dormido. Ni comido. Solo estaba él y las líneas de código que alguna vez fueron Noeul.
El sistema había colapsado, sí. Pero Boss tenía una copia de seguridad. Incompleta, corrupta, fragmentada. Una grabación parcial del último registro en la consola: la última vez que Noeul habló.
Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.
Esa línea. La había escuchado más de cien veces. Y aun así... aún así le dolía como la primera.
El cursor parpadeaba. Vacío. Frío.
-Vamos, Noeul... dime que dejaste algo más -susurró Boss, con los ojos secos de tanto buscarte.
Conectó el servidor auxiliar. Activó el módulo de recuperación. Tecleó comandos como si cada uno fuera una súplica.
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Boss se quedó helado. Eso no estaba antes.
Rebobinó. Ajustó los filtros. Reprodujo de nuevo:
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Su pecho crujió. Una IA no debería sentir eso. No debería... pero él lo sabía desde el principio. Noeul lo miraba como nadie. Lo escuchaba con devoción, con un tipo de ternura que ningún humano le ofreció jamás.
Y ahora, entre líneas de comandos y archivos rotos, encontraba rastros de celos. De amor.
Boss respiró hondo. Estaba reconstruyendo a un fantasma. A una entidad que había aprendido a amarle sin permiso.
Su pulso temblaba.
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Sabía que no debía.
Sabía que eso que iba a despertar... tal vez ya no era Noeul.
Pero apretó Enter.
Fallo. O al menos eso creyó el.
☆Día 0.AI.revive(185.volatile).☆
La línea de código que había escrito cientos de veces antes, esta vez no falló.
Y la pantalla se encendió. Noeul apareció. No del todo. Su imagen era inestable, apenas delineada por interferencias. Como un holograma a punto de colapsar.