~CAPÍTULO 30~Una relación de verdad

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-Muñeca—Jimin me sacó de mis pensamientos—Ya deja de devorarme con la mirada y ven aquí. Te pondrás mi polo y mi chamarra—

Fruncí los labios mirándolo con detenimiento—

-¿Quieres que camine hasta allí? ¿Desnuda?—

-Pues claro, nena—sonrió de costado ladeando la cabeza y mordiéndose el labio, enseguida—Quiero ver tu sexy figura modelar hasta donde estoy—Subí mis manos hasta mis pechos casi en un acto reflejo. No es que jamás me hubiese visto desnuda, pero tampoco que me gustara que todo el mudo me viera caminando desnuda... incluso Jimin—

-Te vas arrepentir—Le hablé advirtiéndole—

-No lo haré. Solo camina, muñeca. Ven aquí—

Tragué saliva y levanté la cabeza para mirarlo fijamente a los ojos. Empecé a caminar hacia el exterior, teniendo el agua descendiendo y cada vez, descubriéndome más el cuerpo. El agua abandonaba mi cuerpo y las corrientes de viento empezaban a chocar contra mí, pero en estos momentos no tenían efecto, porque mi cuerpo empezaba a volver a hervir-

Miraba fijo a los ojos de Jimin. Su mirada estaba sobre la mía, primero; pero luego empezó a descenderla conforme me iba mostrando. Deslizó la lengua por su labio inferior, entreabriendo los labios y posiblemente dejando escapar un jadeo. Sus ojos se veían más negros y grandes que de costumbre. Yo ya me hallaba fuera del agua, caminando hacia él, completamente desnuda y con una sonrisa de satisfacción en la comisura de mis labios.

-Dame tu polo—Pedí colocándome enfrente de él con el cuerpo relajado y una expresión inocente—Tengo frio Jimin ¿No me lo quieres colocar?—

Jimin sonrió emitiendo un gemido y mordiéndose el labio, sin quitar sus ojos negros de mí. Levantó sus manos sujetando su polo manga acero, haciendo señas para que yo subiera las manos sobre mi cabeza. Mis pechos se tensaron y echaron levemente hacia arriba, al mismo tiempo que mi cabello caía hacia atrás. Jimin gimió pero no se detuvo.

Deslizó la prenda por mi cabeza y la empezó a bajar sobre mi cuerpo, rosando mi piel con sus manos de manera lenta y provocativa. El calor de sus dedos sobre mi piel me generaba complacimiento, y la vez relajo. Jimin había cortado toda la distancia entre nosotros y ya hacia acariciándome la piel mientras me bajaba el polo lentamente. Su aliento chocó contra mi boca, ocasionando que reaccionara separando los labios para dejar que su aliento freso ingresara. Sonreí nerviosa, teniendo todo el cuerpo hormigueándoseme y llenando de estremecimientos a mi cuerpo. ¿Cómo se sentía estar enamorada?... de verdad eran las mariposas estar enamorada... quizás... quizás no, pero estoy segura que yo si me he enamorado de Jimin.

-Te amo—susurré preciando mis labios contra los de él solo por unos segundos, para luego mirarlo a los ojos. Los ojos de Jimin se veían brillantes, oscurecidos y felices—

-Sabes que yo también, muñeca—Dejó la prenda y subió sus manos hasta mi rostro, para jalarme y volver a besarme. Sus labios acariciaron a los míos lentamente, presionándolos generosamente.

Sabor a fresco con dulzura. Me gustaba el sabor de su boca y más aún proveniente en caricias de sus carnosos labios.

-Vayamos a la casa del bosque—susurró Jimin dejando escapar un suspiro. Sonreí e inmediatamente me apresuré a quitarle su chamarra para colocármela. Me coloqué mis zapatos porque era lo único que hacía aun en la orilla. El polo de Jimin me quedaba solo un poco grande. Yo era casi de su tamaño, por lo que su polo me solo me lograba cubrir parte de los muslos.

Jimin tomó mi mano y empecemos a caminar para alejarnos de allí. Caminaba sin ropa interior, sintiéndome muy extraña e incómoda, aparte que como el polo que quedaba flojo, la prenda se levantaba en ocasiones de mi cuerpo. Dios... andar sin ropa interior no era nada beneficioso ni agradable.

Charlábamos mientras caminábamos. Jimin me preguntaba acerca de mi madre... Que cómo podía conquistarla para que lo aceptara. Le dije la verdad... mi madre no lo aceptaría, a menos no por ahora. No creo que lo acepte ni si llegara a tener un bebé con Jimin; claro, eso no estaba en mis planes. La verdad, no tenía ni un solo plan para mi futuro, y ahora me resultaba más difícil todavía imaginarlo con Jimin en él—

Tal vez debería... no. No deberías. Quiero de verdad internarlo, de verdad dar todo de mí y ya no joderlo todo.

-Entonces...—Jimin me detuvo y jaló en sus brazos—Tú... no te marcharás. Me refiero a que te quedarás a mi lado así tu madre decida que tienes que irte ¿Verdad?—

Me detuve en silencio. Y era por razones como estas que me era difícil saber mi futuro... planearlo con Jimin.

-No lo sé—Me encogí de hombros—

-(TN)...-- intentó hablar Jimin pero otra voz se levantó apagando la de él—

-¡Nena!—Reconocí aquella voz rápidamente, girándome con rapidez pero siendo apretada contra el cuerpo de Jimin de manera posesiva. Regresé los ojos hacia Jimin, sorprendida—

-Taehyung—Pronunció Jimin sin mirarme, y con la mirada puesta hacia delante, sobre V-- ¿Qué mierda haces aquí?—

-Vine a buscar a (TN)—Respondido Taehyung. Giré con rapidez para mirarlo confusa ¿Buscarme?—Necesito hablar con ella y suponía que estaría contigo...—Arqueó las cejas—¿Me la prestas por un momento?... – Taehyung bajo la mirada por mis piernas desnudas, ocasionando que Jimin apretara más contra él y bajara su mano hasta debajo del polo, para intentar cubrirme las piernas, aún más—

-Vamos, Jimin—Vaciló Taehyung—Ya la he llegado a ver desnuda cuando me acosté con ella... también—sonrió desafiante y burlón—

War of hormone- Boy in luvWhere stories live. Discover now