Mana cerró sus ojos, como si analizará la situación.

- No creo que Heba sea capaz de decir tal cosa, debe haber algo más... - La interrumpí.

- Y lo hay. - Dije, recordando lo que paso hace unas horas en el Nilo.- Vi... algo extraño en Heba. Pero antes, dime ¿Cómo es el?

- Bueno, Heba es una persona bastante bondadosa y gentil, por lo que me contó Atem, el siempre vio por el bienestar de su familia. Y prácticamente le importa el bienestar de sus seres queridos que el de el. Es un chico de buen corazón, es puro. - Dijo Mana, entonces, el que esta atacándome no es Heba, es alguien más...- Ahora dime ¿Qué extraño le viste a Heba?

- Me creerás loco, pero vi como un sello en su frente en forma de estrella, era rojo carmesí sus ojos de igual forma lo eran. Y no sé porque tengo el presentimiento que alguien lo esta controlando.

- Tal vez tenga algo de coherencia todo esto, de hecho Heba no ha venido a verme y el y yo solíamos ser muy unidos. Hum, ¿un sello eh? quizá haya algo en los archivos del palacio, ¡Vamos!

- Eso espero, de otra forma Atem, Egipto y todos ustedes corren peligro... - Me calle al instante. Mana me miro abriendo sus ojos a tope.

- ¿Como? ¿Qué viste Yugi? ¡Dilo! - Exigió.

- Verás... esque en el Nilo nos encontramos a Heba, y este abrazo a Atem en forma de perdonarlo por el compromiso, lo cual solo fue un pretexto para mostrarme un acontecimiento. Y no Mana, no aluciné nada.

- Pero ¡Es imposible! Isis hubiera ya detectado eso... - Murmuró preocupada.

- Hay veces que la magia no siempre funciona Mana. - Dije.- Es mejor ir y buscar algún archivo de ese sello.

- Tienes razón, vamos.

Nos encaminamos por los pasillos del palacio hasta estar en una especie de biblioteca, y lo digo así porque en estos tiempos sólo eran archivos enrollados.

Estuvimos buscando y leyendo por un largo rato, necesitábamos encontrar que era ese sello y cual era su objetivo.

Lo que más preocupa es ese monstruo gigante de tres cabezas, y con la persona fusionada el. Sólo espero que no sea Heba, si lo que me dijo Mana sobre el era cierto, no quiero que le pase nada.

Después de un largo rato de buscar no logramos encontrar nada, hasta que divisé mi vista donde decían "Archivos confidenciales"

- Mana, ¿Qué son los archivos confidenciales? - Pregunté levantándome del piso.

- Se supone que ahí resguarda información sobre los poderes más malignos de este mundo... ¡Eso es! ¡Quizá este ahí lo que buscas! - Dijo Mana, pero al querer tomarlos, una fuerza repele a la maga arrojándola al piso. - ¡Auch! creo que Mahad la protegió con magia, ¡Ay no!

- ¡Pues dile que la deshaga! - Exclamé desesperado. - ¡El futuro de Egipto depende de esto!

- No es necesario, puedo hacerlo yo. - Mana sonaba segura de si misma.- Tengo que hacerlo.

Extendió sus manos haciendo que estas brillaran, creo que estaba haciendo un especie de conjuro. Al instante que un pequeño campo de fuerza comenzó a hacerse presente, pero parecía como si se estuviera debilitando.

- Creo que lo estas logrando Mana, ¡vamos! - Dije apoyándola.

Mana se concentró una vez más, logrando por fin que la barrera desapareciera por completo.

- ¡¿Viste eso!? ¡Lo logré! - Dijo dando pequeños brincos en su lugar.

- Mana, no es tiempo de jugar. Tenemos que encontrar esa información. - Mana se detuvo al ver mi semblante serio, asintió.

 Estuvimos leyendo por un largo rato los pergaminos que se encontraban ahí, hasta que...

- Mana, lo encontré.

- ¿En serio? ¿Y que dice? - Se acercó a mi para que pudiera leer mejor.

- Dice aquí que es el sello de "Anulis" y que este sólo puede ser utilizado por alguien de corazón puro y noble, ay no... -Murmuré.

- Heba. - Dijimos al unísono.

- Y que el sello de Anulis liberará un poder maligno, más poderoso que el de Zorck. - Murmuré. ¿Qué? no puede ser ¿hay un ser maligno y poder más fuerte que el de Zorck? entonces, tenemos un grave, muy grave problema. - Es imposible. - Susurré.

- ¿No dice ahí más información? - Preguntó Mana.

- No, sólo dice lo que acabo de leer, la verdad no hay mucha información ni de como detenerla. - Dejé caer el pergamino dejando notar mis lagrimas recorrer mis mejillas.

Suspiré pesadamente, ¿Qué haría ahora? ¿Cómo puedo salvar a Heba, Atem y a los demás de este peligro? no sé como, pero debo protegerlos a toda costa. Ojalá Anzu, Jonouchi y Honda estuvieran aquí, como los necesito...

Siento no haber actualizado estos días :( espero y les gusté este capítulo. <3 Esto se pone más intenso para este par.

Un nuevo comienzo para los dos. | Book #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora