឵឵឵឵឵឵឵឵឵឵ ឵឵឵឵឵឵឵឵឵឵ ឵ ឵឵឵឵឵ ⩇⩇ . ┊ TERMINADO - 𝐄𝐋 𝐋𝐈𝐍𝐀𝐉𝐄 𝐏𝐔𝐑𝐎

𝐈𝐕.

Una semana después

El bullicio de la ciudad quedaba atrás mientras ambos se adentraba en un exclusivo restaurante un lugar discreto. La elegancia del lugar, con sus luces tenues y su ambiente íntimo, parecía un reflejo del poder y la influencia de In-ho. Gi-hun caminaba al lado del Castaño sintiendo la mirada de varios alfas y algunos omegas.

La mesa que les habían reservado estaba en una esquina privada del restaurante, donde podían disfrutar de su velada sin interrupciones y en dos sillones estaban Hyun-ju y Gyeong, Hyun-ju, una Omega dominante, siempre mostraba una actitud segura y decidida, mientras que Gyeong, un Alfa pasivo, contrastaba con su calidez. In-ho, siempre atento a los detalles, había elegido el lugar con cuidado, asegurándose de que Gi-hun se sintiera protegido. A pesar de su carácter dominante, había en In-ho una preocupación constante por el bienestar de su Omega, una protección que rozaba la obsesión de algo que aún no lograba descifrar que era.

La conversación inicial giraba en torno a los negocios y las oportunidades de inversión que Gyeong proponía. In-ho escuchaba con atención, su mente afilada evaluando cada idea con la precisión de un estratega. Mientras tanto, Gi-hun observaba en silencio, admirando la autoridad y el control que In-ho ejercía sin esfuerzo aparente.

Un camarero interrumpió la conversación de los Alfas captando su atención.

────── "Bienvenidos al Restaurante Onanao, hay algo que gusten ordenar." - Menciono con una libreta y Bolígrafo en mano.

────── "Buenas tardes"- saludó Gi-hun, con una sonrisa cordial al ver al camarero acercarse. -"Hmm, déjame ver..."- dijo, echando un vistazo al menú.

──────"Para mí, me gustaría un buen plato de pasta, con salsa de tomate y albahaca. Y de postre, me apetece un tiramisú, si tienen"- pidió, sin poder evitar que su voz sonara entusiasmada.

La cena avanzaba con platos exquisitos que llegaban a la mesa, cada uno más impresionante que el anterior. In-ho, en su papel de proveedor y protector, se aseguraba de que Gi-hun probara lo mejor de cada plato, observando con una mezcla de orgullo y posesividad cómo disfrutaba de la comida. Había en cada gesto una declaración silenciosa de propiedad, un mensaje claro para todos los presentes.

In-ho y Gyeong al terminar sus platillos mas no el vino, se levantaron, moviéndose hacia una sala adyacente que ofrecía más privacidad, No sin antes avisarles a sus omegas que tenían algo que discutir entre ellos. A medida que se alejaban, la tensión en el aire parecía seguirlos, dejando a las dos Omegas con un ambiente más ligero.

Hyun-ju se inclinó hacia Gi-hun, sus ojos brillando con curiosidad. ────── "Así que, Gi-hun, dime, ¿cómo has estado? No hemos tenido muchas oportunidades de charlar últimamente."

────── "Muy bien, después de todo me acostumbro a esta vida y aun no puedo creer como In-ho pudo fijarse en mi. -Rio sonrojado al decir eso.