¡Soy Un Pony!┆A Twice OS

¡Soy un pony!

—¡YA ESTUVO BUENO!.—Gritó JIhyo, llamando un poco la atención.—No estamos aquí para pelear, ¡necesitamos saber dónde está Sana!.—Dijo bajando considerablemente su voz.  Refiriéndose claramente a la mayor y menor del grupo y dándoles una severa mirada que expresaba "Una más y se las verán en la casa".

Eso le ponía los pelos de punta hasta a la mayor.

Nayeon se soltó del agarre de Jeongyeon, se enderezó, arregló su ropa y carraspeó.—Bien.—Comenzó, mirando a sus amigas.—Sana si fue a abrazarme, se quedó a mi lado todo el rato, bueno, hasta que pasamos por una tienda de... No recuerdo y me dijo... tampoco recuerdo lo que me Dijo...—Terminó de contar Nayeon un poco avergonzada.

—¿¡Ignoraste a Sana!?.—Chilló Chaeyoung con los ojos considerablemente abiertos, y eso que ella ya tiene los ojos bastante grandes. Uno de sus encantos, según ella.

—¡Claro que no!.—Se apresuró a aclarar Nayeon.—solo que... Bien, no le presté mucha atención... ¿De acuerdo? Lo acepto.—Dijo Nayeon arrepentida y con las mejillas levemente rosadas.—Es que... Pasamos por la tienda de mascotas y ví un hermoso trajecito de marinero para Kookeu, ¡Se vería tan lindo!.

—Está bien, está bien.—Intervino Dahyun, interrumpiendo el probable largo discurso de Nayeon sobre lo lindo que es Kookeu y cuánto lo ama.—El punto aquí es que Sana no está, y tenemos que encontrarla antes de que pase algo como lo de la última vez...—

Todas sintieron un escalofrío recorrer sus espaldas y negaron al mismo tiempo, no querían que algo así pasara de nuevo.

—Tengo hambre...—Intervino Momo repentinamente.

—¡Ahora no, Momo!—Respondieron las otras siete chicas al unisono.

—¿Chicas... Y Jeongyeon?.—Preguntó Dahyun.

—¡Ahora hasta Jeongyeon se pierde, lo que faltaba!.—Exclamó Chaeyoung cansada de la situación. Se suponía que era un día de relajación, no de jugar a las escondidas.

—¿¡¡Y MI TERRONCITO DE MIEL!!? ¡NO PUEDO CREER QUE SE HAYA PERDIDO! ¿¡¡CÓMO PUDE SER TAN MALA NOV-.—Gritó Nayeon, dramatizando un poco-bastante-la situación, pero fue cayada por la mando de Tzuyu al ver que estaba armando una escena. Ya habían llamado suficiente la atención.

Las chicas, apenadas, dieron leves reverencias hacia las personas que pasaban.

—No creo que se haya perdido... Quizá está buscando a Sana.—Dijo Mina, las demás voltearon a verla mientras asentían.
Nayeon se tranquilizó, era lo más probable,

—¡Exacto!.—Concordó Jihyo.—Es lo más probable, igual creo que también deberíamos ir a bus-.—No pudo terminar, ya que fue bruscamente interrumpida.

—¡CHICAAAAAS!—Todas voltearon rápidamente hacía la dueña de la voz; Jeongyeon.—N-N LO VAN A CREER.—Dijo jadeante con las manos en sus rodillas, intentando recuperar el aire ante el maratón que se aventó.

—¿Encontraste a sana?.—Preguntó esperanzada Momo.

Jeongyeon asintió efusivamente, pues aún no podía hablar, aunque se veía muy ansiosa por hacerlo. Todas sonrieron, aliviadas.

Nayeon se acercó para proporcionarle a su novia una botella de agua que había insistido en traer, ya que comprar una era una perdida de dinero; siempre es bueno ser precavida.

—¿Y dónde est-.—Chaeyoung fue interrumpida por unos pasos que chillaban contra el suelo, como si arrastraran un pedazo de hule contra el limpio piso; segundos después una dulce y conocida voz inundó sus oidos y las hizo voltear en su dirección.