Capítulo 3

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En el horario de recreo.

¿Alejandro? Alejandro no era nadie en ese momento en la vida de Laura. Aunque era su novio, por culpa de Santiago ya no se acordaba de él.

Laura estaba muy feliz y alegre aunque también se encontraba bastante confundida. Notaba un nuevo sentimiento que muchas de las veces hacía que el corazón le fuera mucho más rápido que de costumbre.

Sabía que tenía un novio pero aun así sentía una fuerte sensación cuando se acercaba a Santiago y le hablaba. Un sentimiento de culpa y a la vez de felicidad extrema le recorría su pecho cada vez que le veía. Pero, ¿por qué sentía ese sentimiento de culpa? Sí, era por Alejandro, se había olvidado de él durante estas horas de clases y aunque era su novio no podía soportar llenarse de felicidad cada vez que veía a Santiago.

En ese preciso instante se le acercó Santiago para hablar con ella. No se lo creía ni ella misma, quería olvidarle y no hablarle para no olvidarse de Alejandro pero tampoco quería ser mala persona y no le quedaba otra que hablarle. Aunque no quería ella se puso sonrojada cuando Santiago se le acercó.

- Hola Laura - Le dijo Santiago a Laura con una sonrisa en la cara.

- Hola - A Laura le costaba pronunciar un simple hola aunque ya había mejorado un poco desde que entró en clase esa misma mañana.

- Esta mañana no te dije como me llamaba, me llamo Laura encantada - Dijo Laura a Santiago en una sola frase y sin poder respirar bien. Sí, eran los nervios los que no le dejaron hablar respirando. Estaba tan nerviosa que le palpitaba el corazón más rápido de lo normal.

Esa era la conversación entre ellos dos. No había más palabras que pudieran decirse entre ellos.

¿Era los nervios, el poco tiempo que tenían, la poca amistad que existía entre ellos...?, no se sabía pero era alguno de esos sentimientos.

Comenzaron de nuevo las clases, esas clases tan aburridas con Don Felipe y sus sujetos y predicados. Las clases no eran interesantes y además aburridas, todas sus clases a partir de ahora eran así.

Las clases pasaron bastantes lentas y todos deseaban que llegara la hora de salir para irse cada uno por su lado. Aunque eso parecía imposible, porque el tiempo pasaba muy lento.

En otro lugar de la ciudad.

La chica que había llegado a la ciudad era una antigua amiga de Laura, se llamaba Ana. Hacía más de cuatro años que no se veían y tenía muchísimas ganas de verla y estar de nuevos juntos.

Ana era una de las mejores amigas de Laura desde preescolar y siempre estaba ahí para lo que fuera. Ella misma sabía que tenía muchos problemas pero no podía contárselo a nadie, ahora mismo Laura para ella era su única amiga. Muchas de las veces estaba sola, pero este viaje que había hecho le había cambiado por completo. Era diferente, era una nueva Ana.


Sonríe Yo te invitoWhere stories live. Discover now