¿Amigos?

siempre juntos

—Adan...

Dije mientras lágrimas salian sin avisar.

—¿Estas bien?–Dijo Adan sentándose a mi lado, lo mire a los ojos.–Dame eso.

Me quito la botella bruscamente y la tiró cerca. Me tomó el rostro entre sus manos.

—Lo perdí todo, te perdí a ti, perdí a Jesse y ahora perderé a Jade... Y yo, soy una hija de puta.– decía cómo podía.–Los amaba a los dos, yo realmente los amo a los dos ¡Maldita sea! Adan jugué con ambos, jugué en ambos lados. Yo, solo quería...

—A mi nunca me perdiste. Yo siempre estaré contigo, pase lo que pase.

Lo mire ¿Acaso me escuchaba? ¡Jugué contigo Adan escúchame! ¡Amo a Jesse! ¡Te amo a ti! ¿Lo escuchaste?

Mi mente daba vueltas, me levanté de golpe y Adan me tomó entre sus brazos antes de que me cayera al piso.
Protegida, me sentía tan protegida. Buscaba todo el día esta sensación. Paz, mi mente por segundos dejo de dar vueltas. Me olvidé de todo un rato y no por culpa del vodka... Siempre has sido tú, Adan.

Yo tras sentir todo esos sentimientos hacia él, solo lo abrace sin decir nada. Sintiéndo de todo entre sus brazos.

—El...

—Jade me explicó todo, no tienes que decirme nada bebé tranquila.

Acarició mi cabello y yo cerré mis ojos dejándome llevar.

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Meses después

De esos momentos buenos y momentos malos, estaba feliz. Mi familia me hacia feliz, mi hermanita Cara esta a unos meses de dar a luz asi que pronto conoceré a mi sobrino o sobrina y como lo aceptaron mis padres, Cara estaba reluciente.

Adan me hacia feliz.

La otra semana fuimos a despedirnos de Jade hubo muchas lágrimas en ese momentos pero nos dijo que pasaría la navidad con nosotros, o sea pronto estaremos juntos otra vez. Hmm ¿Jesse? Ya pasaron semanas sin verlo asi que hoy he decidido afrontarlo.

En pocos minutos estoy en la puerta de Jesse estaba nerviosa: asustada. Tenía que admtir que tenía una pizca de felicidad por verlo otra vez.

—Ana, Dios... Estás aquí.

Dijo Jesse abrazándome fuerte

—Solo vine a despedirme.

—Sé lo que me vas a decir... Sé que sabes lo de mi padre. —me miro triste.—Pero yo solo tenía miedo, sentía miedo hacía el y hacia lo que podría hacerme si lo desobedecía, debes entenderme. Ponerte en mi lugar.

El toma mi menton y yo bajo mi cabeza mirando a otro lado que no sean sus ojos. —Te juro, Ana, te juro que no soy como el.

—Jesse tu embarazaste a Cara.

Lo mire, se me revolvió el estómago.

—Estábamos borrachos, entiendes no estábamos consciente de lo que hacíamos. Al enterarme le ofrecí todo para el aborto. Estamos muy niños para esto y si mi papá lo sabe, va asesinarme.

Tomo mi mejilla entres sus dedos fríos y temblorosos, la quite de un golpe.

Bufe aun con su mano en mi mano. —¿Hubo para ti alguna vez un nosotros? ¿Crees que despues de todo esto te perdonare y todo sera igual? Jesse tu destruiste mi corazón, toda mi confianza estaba depositada en ti...Fui una idiota al pensar que sentias algo por mi, todo esto fue un juego para ti.