Cap 13.

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Cuatro años antes...

—¿Isaac?—fruncí el ceño ante las luces apagadas del jardín.

Isaac no había llegado a casa. No sabía dónde estaba y había escuchado un ruido cerca de la casa de la piscina.

»Isaac, si este es otro de tus juegos voy a estrangularte—amenacé. «A él le gustaba asustarme y yo lo odiaba»

Caminé cerca de la piscina, forzando mis ojos a que vieran algo en la oscuridad mientras me repetía que seguro los de seguridad trabajaban para encender las luces.

Ayer habíamos ido al bosque. Damon y yo tuvimos un par de miradas esta mañana que hicieron que Will levantara las cejas de forma sugerente en mi dirección.

Sabía que dejarlo de esa forma en el bosque había comenzado algo. Algo que, de cierta forma, me emocionaba.

Jugar un poco era bueno. Damon a veces era un poco... intimidante, pero de alguna forma eso generaba algo en mi. Interés.

Mi celular sonó en mi bolsillo y me sobresalté. «Joder, olvidé que lo puse ahí luego de llamar a mi padre»

—Hola Will—sonreí, poniéndolo en altavoz mientras encendía la linterna y comenzaba a alumbrar por donde caminaba.

—Hola, ¿dónde estás?

—En casa, ¿por qué? ¿Tienes planes para mi?

—Mhm, muchos si lo pides así—se burló y rodé los ojos—. Como sea, Damon me dejó en una noche de películas y estoy solito. ¿Vienes?

—Me agrada saber que soy tu segunda opción—resoplé—. Tengo que hacer tarea, pero te prometo que te compensaré después. ¿Qué tal si vienes mañana a casa y cocino mi pollo especial?

—Bien, eso si que es una forma de convencerme—rió—. Oye... si ves a Damon por ahí, no te asustes. Parece que captaste su atención.

—Damon no me asusta, Will—reí—. Te hablo luego, ¿si?

—Bien. Adiós.

Colgó la llamada y yo levanté mi celular para ver mi alrededor. Pero mi corazón se detuvo en el momento en que lo vi frente a mi.

—¿Qué mierda?—retrocedí, con mi corazón comenzando a latir con tal rapidez que se iba a salir de mi pecho ante la vista del hombre vestido de negro con la máscara de calavera negra—. ¿Isaac? Esto no es gracioso.

Él dió pasos hacia mi mientras yo retrocedía, y el hecho de que no me diera una respuesta encendió todas mis alarmas.

Isaac se hubiera reído de mi reacción.

»Hay hombres armados en el perímetro—advertí—. Hagas lo que hagas, no saldrás vivo de aquí a menos que así lo disponga yo.

—Mmm, juegos de poder—su voz me hizo exhalar—. Hola, princesa.

—Maldición, Damon—golpee su pecho y él ni siquiera retrocedió—. Me diste un susto de muerte. Esto no es gracioso.

—No se suponía que lo fuera—jadeé cuando su brazo se cerró alrededor de mi cintura y me pegó a su pecho—. Los juegos no son necesariamente divertidos, princesa.

—Deja de llamarme así—ordené, levantando mi mano para pasar mis dedos sobre la máscara—. Es intimidante. Linda.

—¿Linda?—la burla en su voz me hizo asentir—. Por supuesto.

Me quitó el celular de la mano y chillé cuando lo arrojó a la piscina, logrando que la linterna se apagase y nos dejara a oscuras.

—¿Por qué hiciste eso? Joder, eres un imbécil—intenté ir allí y él me soltó, pero entonces tiró de mi de nuevo y pegó mi espalda a su pecho.

—La recompensa viene al final del juego—dijo en mi oído y cerré los ojos cuando mi piel se erizó—. ¿Cuál es esa recompensa, princesa?

Rodé los ojos. «Por supuesto que no dejaría de llamarme así»

Dije esas palabras para tentarlo. De alguna forma obtener ese subidón cuando me besó removió algo en mi que nunca había sentido. Algo que me hacía querer conseguir más.

Pero nunca me había gustado ofrecer nada en bandeja de plata. Él tenía que trabajar por ello si alguna vez quería obtener algo de mi.

—A veces el jugador puede elegir—jadeé cuando sus labios acariciaron mi cuello—. ¿Qué quieres como recompensa?

Lo sabía. O al menos lo sospechaba.

Los rumores de que Damon nunca tocaba a ninguna mujer habían llegado a mi. Y a mi no me gustaba ser vista. «Creía. En realidad nunca lo había experimentado»

Pero algo me exigía que lo orillara a venir por mi. A tomarme. Era como si la mera idea de verlo obsesionado conmigo fuera la chispa que mi vida necesitaba.

«Me estaba volviendo loca»

—Ya veremos—y entonces ambos caímos a la piscina cuando nos empujó hacia adelante.

No me dió tiempo a tomar aire. En un momento estaba parada frente a Damon y al otro el agua de la piscina me rodeaba sin darme ni un poco de oxígeno.

Me zafé de su agarre, nadando rápidamente a la superficie y tomando una enorme bocanada de aire al salir.

—Oh, si que eres un imbécil—empujé a Damon cuando salió—. ¡Pudiste matarme! ¿Qué tal si me ahogaba?

La carcajada que escapó de sus labios me sorprendió. «Vaya, él sabía lo que era reír. Y era una risa ronca muy bonita»

—Te habría dado respiración boca a boca—dijo, y solo pude ver su silueta. Me molestaba no poder ver su rostro—. No es como que mis labios te molesten.

—Oh, bien, ahora eres un hablador y me coqueteas—me burlé, acercándome y levantando mis manos para quitarle la máscara, pero él puso su mano sobre la mía para detenerme—. No quiero esto, Damon.

—No me importa lo que quieras, se queda—zanjó y fruncí el ceño—. ¿Qué es lo que pretendes?

—Besarte—dije.

Sus manos rodearon mi cintura y me atrajo a su pecho.

—Hazlo. Con la máscara.

La forma en la que lo dijo era un reto. Besar una máscara podría ser humillante para muchas personas. Me retaba a humillarme frente a él, como si me estuviera probando.

Rodé los ojos y me incliné, presionando mis labios en los dientes de calavera de la máscara una y dos veces antes de alejarme.

—Me agrada la máscara, pero ya que no quieres mis labios—me alejé y él avanzó en mi dirección.

Reí antes de sumergirme en el agua, nadando rápidamente hasta la orilla sabiendo que solo podría verme una vez estuviera fuera.

Y eso fue exactamente lo que pasó. Cuando estuve fuera comenzó a nadar en mi dirección y reí corriendo en dirección a la casa.

Crucé las enormes puertas de la cocina y subí las escaleras a toda prisa mientras escuchaba el gotear de sus botas detrás de mi.

Entonces, cerré la puerta de mi habitación en su cara y lo escuché soltar un gruñido mientras intentaba girar la perilla a la que le había puesto el seguro.

—Piénsalo mejor antes de negarme un beso la próxima vez—dije, encogiéndome de hombros antes de caminar al baño.

Conocía mi casa, yo iba a estar bien en la oscuridad.

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⏰ Last updated: May 09 ⏰

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Moonlight [Damon Torrance]Where stories live. Discover now