OO7

53 7 0
                                    

HAPPIER
❝And think of me foundly
when your hands are on her❞


El sol se ocultaba, el cielo en tonos rosados de alguna forma se sentía acogedor. Pronto anochecería, pero Rosé aún se encontraba sentada en la entrada de la escuela.

Parecía que esperaba a alguien, pero no era así.

Estaba sola, sólo se sentó ahí y dejó que el tiempo pasara hasta que le volvieran las ganas de pararse para ir a su casa.

Estaba segura que estaba ahí sin ningún propósito, pero la presencia de cierto chico la hizo dudar en si el destino era verdadero.

—¿Qué haces aquí? —preguntó al sentir a la chica sentarse a su lado, sin apartar en ningún momento la vista del frente.

La chica tardó varios segundos en responder, pero su respuesta sólo la dejó confundida. —No lo sé, sólo tuve la sensación de que debía venir, y aquí estoy.

Esta vez sí la miró, observando sus facciones. Le sorprendía como Jennie, a pesar de todo, era capaz de tranquilizarla incluso si en su interior había una discusión de emociones, donde ella de alguna forma no tenía voto ni opinión. No dijo nada, pues no sabía que decir o mencionar, dejando todo en un silencio incómodo de esos que Rosé ya se había acostumbrado.

—¿Por qué no eres feliz, Roseanne?

—Porque mi corazón no te separa de mí. —dijo como si estuviera preparada para esta pregunta toda su vida. —Porque por más que ya haya aceptado el que sí eres feliz sin mi, aún tengo pensamientos de cosas que me gustaría decirte. "Piensa en mi cuando ella esté en tus brazos" o simples maldiciones de como me arruinaste la vida, aunque yo soy la única culpable.

Ella estaba segura de que era la única culpable de su sufrimiento, pues ella era quien no la dejaba ir totalmente. Estuvo esperando paciente el día en que su corazón por fin decidiera soltarla, que nunca pensó en que debía aprender a controlar sus sentimientos.

Jennie se había ido, esta vez con una sonrisa en su rostro de esas que ya conocía: “Todo va a estar bien”.

Así mismo como se fue, otra persona llegó.

Se sentó a su lado, no dijo nada, solo tomó su mano en forma de reconfortamiento.

Joohyun era capaz de hacerle entender muchas cosas, incluso si no decía nada, era suficiente su compañía.

Cerca de donde estaban, aún se encontraba la dichosa hoja pegada al árbol, seguía siendo la única en el lugar. Pero esta vez un gran viento pasó por ahí, haciendo que finalmente la hoja se separara de la rama, bailando a la par del viento.

Tal vez solo necesitaba un pequeño —gran— empujón para seguir adelante.

¡ Fin !

Happier  ⃒  Chaennie ✓Where stories live. Discover now